La alumna peruana Karina Matto es la primera en obtener una de las ayudas que concede la Universidad Internacional de La Rioja y gracias a la cual cursará el título de Experto Universitario en Inteligencia Emocional
Karina Matto es peruana y, a sus 39 años, compagina su trabajo en una editorial con labores educativas en el colegio Vallesol, en Piura, una ciudad de la zona occidental norte de Perú. Allí desarrolla un proyecto para trabajar con los alumnos en un ambiente integral, con especial hincapié en la inteligencia emocional. Es por eso por lo que ha elegido continuar con su formación a través del Experto Universitario en Inteligencia Emocional de UNIR. Título que inicia con una inmejorable noticia: la de ser una de las primeras afortunadas en conseguir una de las becas para profesionales latinoamericanos que convoca la Universidad Internacional de La Rioja para apoyar económicamente a los mejores perfiles de cada país de América Latina. Estamos con ella para que nos cuente en primera persona sus sensaciones al respecto.
“El tener una beca para mí es grandioso, supone llegar a lograr toda esa meta de proyecto educativo que tengo“, valora orgullosa Matto quien, de manera excepcional, ha recibido de forma física el documento que atestigua esta ayuda. El proceso hasta llegar aquí comenzó hace varias semanas cuando “a través de Internet, conocí UNIR, como se conocen muchas cosas sin que te dé la certeza”. Pero tras su tanteo e interés inicial, un asesor contactó con ella, la acompañó en todo el proceso “de conocimiento de la entidad que me presta la formación” y resolvió cualquier duda sobre “lo que implicaba tener un diplomado a través de la red, algo no muy usual en Perú pero que sí se da”, explica la nueva alumna de UNIR. También reconoce que no siempre resulta fácil para los profesores de su país continuar con su formación “por el nivel económico que percibimos, pero no es imposible, yo estoy acá”, anima a sus homólogos.
Confianza y solidez
Además, destaca convencida la “confianza que te da UNIR, es lo que transmitiría a otros profesionales latinoamericanos que quieran formarse, que se animen, a veces uno tiene dudas, el riesgo de que la entidad en la que te vas a formar no rinda las expectativas que tú tienes de la formación pero tras conocerla bien, les digo que tomen ese riesgo”. Y añade: “Que tomen la decisión de hacerlo, siempre todo lo innovador da miedo pero cuando algo te da miedo es porque vas por el buen camino y yo digo desde ya que quiten ese miedo porque acá en UNIR te dan la confianza y solidez necesarias, tienen un trato de persona a persona“.
Porque para Matto resulta esencial el continuar formándose pese a que ya se esté trabajando. “Con este apoyo para seguir estudiando podré llegar mejor a mis alumnos, que es lo más importante para mí”. La docente es firme defensora de la Inteligencia Emocional y de su desarrollo, cuanto más temprano, mejor. “Si lo haces desde Infantil, puedes lograr todo en la vida, lo que te propongas, es lo primordial”. Y para conseguirlo, resulta clave la labor también con los propios profesores. “El cambio no es solo un goteo, se tiene que llegar a más educadores, yo voy desde ya totalmente emocionada por transmitir todo lo que he recibido acá”, concluye con un entusiasmo arrollador.