Beatriz Corral
La egresada Manuela Mena, que descubrió su vocación durante una estancia en Bristol, dirige desde hace seis años su propio centro de idiomas, además de ser docente y participar en diversos proyectos editoriales
Una formación de calidad junto con el grado de motivación adecuado, amén de constancia, trabajo y fuerza de voluntad, conforman la pócima idónea para emprender y desarrollar una carrera profesional y vital exitosa. La prueba viviente la constituye Manuela Mena Octavio. La egresada de UNIR es la orgullosa directora desde hace seis años el centro The Language House & Feel the Language en la ciudadrealeña localidad de Campo de Criptana, además de ejercer como docente en dos universidades y colaborar con varias editoriales en la publicación de materiales didácticos y manuales para la enseñanza del español.
Tan intensa actividad es el resultado de una exhaustiva preparación que comenzó a raíz de cursar el Máster Universitario en Neuropsicología y Educación de UNIR. “Aprendí muchísimas cosas. Por un lado, me di cuenta de que la enseñanza online tiene muchísimas ventajas al ofrecer mayor flexibilidad y autonomía, fundamental para compaginar trabajo y estudios”, constata. Pero no fue lo único. Junto a todo lo que le enseñaron “grandes profesionales, su energía, motivación y pasión me inspiraron hasta el punto de querer seguir ampliando mi formación en el campo de la neuroeducación y a investigar sobre otros modelos y metodologías educativas para ayudar a mis alumnos a maximizar sus oportunidades de aprendizaje”.
Pero fue un poco antes cuando esta licenciada en Traducción e Interpretación por la UCM tuvo la revelación que cambiaría el transcurso de su vida. “No sabía muy bien qué hacer con mi futuro, así que decidí marcharme al Reino Unido para trabajar como auxiliar de conversación en un colegio”, rememora. Y fue allí, durante su estancia en el Bristol Grammar School donde descubrió su verdadera vocación y quiso seguir aprendiendo en el campo de la enseñanza.
“Al comparar programas de máster me di cuenta de la apabullante oferta académica existente y de que debía ser muy meticulosa y exigente para no equivocarme”, reconoce. “Entonces me topé con el Máster en Neuropsicología y Educación de UNIR y cumplía los requisitos que buscaba: enfoque práctico, investigación científica, sentido de comunidad y, sobre todo, profesionalidad”, enumera satisfecha de aquella elección, la cual supuso el primer paso en un camino que le ha llevado a realizar cursos de metodología y estancias en Finlandia, Holanda, Alemania, Italia o Reino Unido.
Una amplia y variada andadura que le ha servido para adquirir vastos conocimientos y experiencias que le han sido de gran ayuda a lo largo de los años. No solo personal, sino también profesionalmente. Fue así como, al poco de concluir el Máster, adoptó una decisión valiente y no exenta de riesgos. Abrir su propio centro de enseñanza de idiomas, que hoy ya cuenta con más de 350 alumnos. “Me siento orgullosa, contamos con un gran equipo de profesionales que me ayudan a gestionar el centro, impartir cursos de inglés y español como lenguas extranjeras y preparar exámenes oficiales como Cambridge”, detalla con satisfacción evidente.
No es para menos, ya que The Language House forma parte de la red internacional de centros de prácticas de la Universidad de Lenguas Aplicadas SDI de Múnich. “Es un referente en enseñanza de segundas lenguas a niños y adolescentes, así como en formación a profesorado”, recalca. Además, imparte clases en la Universidad de Nebrija y en la de Lenguas Aplicadas SDI Múnich.
Su vocación docente es tal que no duda en colaborar en editoriales con las que poder publicar materiales didácticos que ayuden a enseñar español. Entre ellos, se encuentran proyectos de la editorial enClave ELE como ¡Genial¡ A2, un manual de español para adolescentes y Misión ñ, un libro de texto para la enseñanza de ELE a niños.
“Actualmente escribo propuestas didácticas y diseño proyectos educativos que se publican en la revista Maestra Infantil, y en mi blog Aventura en las aulas publico proyectos educativos que hemos impulsado desde nuestra escuela de idiomas, además de reflexiones sobre la importancia de la formación”, concluye. Está claro que pasión y dedicación no le faltan.