Irene Fernández estudia en UNIR el Máster en Ejercicio de Abogacía y lleva desde febrero trabajando en el despacho Enrique Sánchez Spanish Lawyer Liverpool gracias al programa Erasmus + .
“Está siendo una de las vivencias que no cambiaría nunca tanto a nivel personal como laboral”. Así resume Irene Fernández, estudiante de UNIR en el Máster de Abogacía, su estancia en Liverpool con el programa Erasmus +.
Aunque en un primer momento no se había planteado hacer las prácticas del Máster fuera de España, el pasado mes de octubre quiso trasladarse a Londres para mejorar su nivel de inglés. Después de seis meses allí, decidió buscar un despacho para poner en práctica los conocimientos que iba adquiriendo en el master. “Afortunadamente, lo encontré en Liverpool – Enrique Sánchez Spanish Lawyer Liverpool – . No tenía nada que perder y tras la aceptación del despacho me informé sobre las ventajas del programa Erasmus +”.
Después de todo el proceso burocrático, que en su opinión fue rápido y sencillo gracias a la Oficina de movilidad, consiguió la beca y comenzó unas prácticas en el despacho que se prolongarán hasta marzo de 2016. Durante este corto periodo de tiempo, Irene ya ha comprobado cómo todo su esfuerzo ha sido valorado por la empresa. “La buena sintonía con todos los miembros del despacho me ha ayudado a crecer personal y profesionalmente”.
“Cada día es una experiencia y una anécdota distinta, pero lo que más me sorprende es la cara de alegría de los “guiris” cuando les dices que ya tienen casa en España. La ilusión con la que hablan de sus experiencias en España son realmente divertidas”, añade.
Aunque la beca Erasmus no cubre todos los gastos de su estancia en Liverpool, “consigo sobrevivir entre la ayuda del programa y lo que ahorré los seis primeros meses”. Confiesa que le costó dar el paso pero no cambiaría por nada su experiencia. “No es fácil estar fuera de casa. Ver como tus amistades están bajo un sol de escándalo y tu bajo una cruel granizada. Pero sin ninguna duda, es una de las vivencias que no cambiaría nunca”.
Entre los requisitos necesarios para conseguir la beca, señala “tener un conocimiento mínimo del idioma, estar matriculado en UNIR y tener muchas ganas de aprender y conocer gente con otras culturas”.
La alumna de UNIR estudió un doble grado en Derecho y Ciencias Políticas y tiene como objetivo ejercer la abogacía a nivel internacional. “Por este motivo, mi estancia en el despacho está siendo el punto de inicio de mi carrera profesional. Los clientes y los asuntos que tratamos día a día son muy diferentes entre sí por lo que me está aportando una visión del Derecho completamente nueva y totalmente distinta a la que podría haber tenido si hubiera realizado las prácticas en España”.
Todavía tengo pánico cuando suena el teléfono, el acento de los ciudadanos de Liverpool es muy fuerte
Respecto al idioma, llegó a Londres con un nivel de inglés B2. “A día de hoy he observado que mi fluidez es mucho mayor que cuando llegué, lo cual era uno de mis objetivos antes de coger ese primer avión el pasado mes de octubre”. Sin embargo, “todavía tengo pánico cuando suena el teléfono, el acento de los ciudadanos de Liverpool es muy fuerte y muchas veces ni entre ellos se entienden”.
Vista su buena experiencia, invita a que todos los alumnos que puedan, realicen una estancia fuera. “Si tuviera la oportunidad de nuevo no dudaría ni un minuto en adentrarme en esta aventura. Esta experiencia me está ayudando a saber valorar más el potencial laboral y social que tenemos en nuestro país. También me está sirviendo para conocerme más y saber que quiero y que no. Me siento muy valorada en mi puesto de trabajo y estoy pudiendo desarrollar los conocimientos adquiridos durante mis estudios”. Y para todos aquellos que tienen fobia a los documentos que exige la petición de una beca de este tipo, señala que en su caso “no tuve ningún problema y UNIR facilitó todo el desarrollo. El tema más engorroso fue la búsqueda del despacho, que realicé por mi cuenta, pero una vez que ya lo tenía, todo marchó sin complicaciones”.