José María Fillol Cuadrado
La Universidad Internacional de La Rioja celebra en Quito, el 8 y el 9 de julio, el primer gran acto presencial con miles de alumnos, tras dos años de interrupción por la pandemia. Los egresados vivirán en primera persona una jornada cargada de emotividad y recibirán un diploma simbólico como reconocimiento a la finalización exitosa de sus estudios. Los dos días del evento serán retransmitidos por streaming.
Miles de estudiantes de la Universidad Internacional de la Rioja (UNIR) vuelven a reunirse de forma presencial, dos años después de iniciada la pandemia, para celebrar la culminación de sus estudios en el próximo Encuentro Internacional Alumni / Ecuador 2022, que tendrá lugar los días 8 y 9 de julio en el Centro de Convenciones Metropolitano de Quito.
“UNIR siempre pone al estudiante en el centro de su actividad docente y, por este motivo, quiere premiar y reconocer el esfuerzo que han invertido en su desarrollo personal y profesional”, ha destacado el rector de UNIR, José María Vázquez García-Peñuela.
Éxito por encima de las adversidades
Pocos momentos son tan propios en la vida de una persona como los dedicados a “hincar codos” para aprobar una asignatura, en preparar con tesón una tesis fin de grado, en defender un TFM y superar ante un tribunal el último peldaño antes de ser reconocido como magister. Bien lo saben los alumnos de UNIR que están a punto de celebrar su triunfo al lado de sus compañeros en una multitudinaria ceremonia que les unirá a todos en la tradición y en la innovación.
Egresados de UNIR celebran el triunfo de un largo camino de esfuerzo y dedicación.
Gracias a su metodología online, UNIR mantuvo su eficiencia como referente global de la enseñanza en línea y aseguró, en esta situación de incertidumbre, la calidad acreditada en sus titulaciones. Al mismo tiempo, ofreció todos los servicios necesarios para el estudiante, situándolo siempre en el centro exclusivo de su interés. Tal es la filosofía de la universidad, la misma que complementa una incansable labor docente e investigadora.
Ganas de seguir aprendiendo
“El mundo vivía subyugado por una pandemia, mis proyectos profesionales estaban paralizados y entonces surgieron las ganas de estudiar. Una empleada mía había cursado en UNIR y me la recomendó. A pesar de mi extenso bagaje en la industria audiovisual, en dirección de agencias de comunicación y en puestos de responsabilidad en la administración pública, desengrasar las neuronas para estudiar dos horas diarias a mis 59 años, era otra cosa. Supuso un gran reto, aunque la recompensa fue mayor”. Así lo confiesa orgulloso Gonzalo Ponce Leiva, quien terminó su Máster en Comercio Electrónico con mucho esfuerzo y dedicación, incluso tuvo que superar una enfermedad que le hizo dudar si arrojar la toalla.
“Gracias a los profesores de UNIR me replanteé la situación. La calidad humana y el altísimo nivel docente fueron decisivos para continuar”. Sin duda, una demostración del afán continuo por adquirir más conocimiento, seguir aprendiendo fuera de la zona de confort, más allá de que su nombre pueda ser asociado a su paso como secretario general de comunicación de la Presidencia de la República, o como presidente de la Academia de las Artes Audiovisuales y Cinematográficas del Ecuador, cargo que ostenta en la actualidad. “Y ya estoy animado para hacer otro máster, en Comunicación Corporativa”.
Con Gonzalo, UNIR no solo ha ganado a un alumno agradecido, sino a un representante de la universidad, para la cual ya está “fichado” como embajador, que también lo es para sus compañeros de promoción: en el Encuentro del día 8 será el encargado de pronunciar un discurso en nombre de todos los estudiantes.
Ceremonia inolvidable
Poco desvela Gonzalo de su discurso, pero a buen seguro recogerá el sentir común de quienes como él albergan la plena convicción del deber cumplido. Así se reflejará en miles de rostros satisfechos dentro de unos días, cuando alumnos de todo el continente americano, uniformados con toga y birrete, engalanados con una beca, saluden el paso de la comitiva Académica al inicio de una ceremonia largamente deseada por todos.
El Encuentro Internacional Alumni dará comienzo con la entrada de la comitiva Académica.
Más de una docena de docentes de UNIR se desplazarán a Quito para formar parte de esa comitiva Académica, la cual inaugurará el acto con su entrada al Centro de Convenciones. Al frente de la misma, habrá una mesa presidencial integrada por José María Vázquez García- Peñuela, rector de UNIR; Rafael Puyol, presidente de la Universidad; Adela López Martínez, vicerrectora de Estudiantes; Beatriz Feijoo Fernández, vicedecana de investigación de la Facultad de Empresa y Comunicación, y otras autoridades como Rosalía Arteaga, presidenta de UNIR en Ecuador y ex presidenta de la nación, y Nina Pacari, líder indígena y política.
Las primeras palabras que se escuchen en el recinto estarán enmarcadas en la lección magistral que Adela López dirigirá al auditorio. Su exposición versará sobre el papel que deben tener las humanidades en el siglo XXI. “Una sociedad que no hace aprecio de las humanidades es, sin remedio, una sociedad desorientada, que ha perdido su sentido. No es posible el auténtico progreso de la sociedad sin unas metas claras, que vienen dadas por el humanismo, que de verdad enriquece al hombre”, afirma.
En su exposición, López hará hincapié en la función de las universidades como “laboratorio de cultura, lugares donde se hace posible la apertura de la inteligencia a lo universalmente verdadero”. Y concluye que el primer paso para entrar en el mundo de las humanidades y para suscitar mentalidades innovadoras, “es el amor a los libros”.
Reconocimiento compartido
Tras la exposición de la docente, será el turno del mencionado discurso de los estudiantes, para acto seguido llevarse a cabo uno de los momentos más esperados de la jornada. Ese será la recepción del diploma simbólico por parte de los egresados, reflejo del fruto que durante mucho tiempo fueron forjando.
La entrega del diploma simbólico es uno de los momentos más especiales para los alumnos.
El especial momento de reconocimiento hará recordar el periplo de esfuerzo personal que les ha hecho llegar a buen puerto, lo cual no quiere decir exclusivo. Detrás de ese recorrido duro del estudiante, a veces salpicado de adversidades, siempre hay alguien más: un profesor que mostró la asignatura desde un punto de vista inédito y más atractivo; aquel tutor al servicio del alumno para aconsejarle cómo planificar los estudios; la madre o el marido que animó a luchar a pesar de las dificultades; y, sobre todo, la familia. No hay historia de éxito sin la presencia de ellos.
Por eso, ese día singular, los alumnos podrán estar acompañados por sus seres queridos y más especiales; para que el momento de alegría sea compartido in situ o de forma virtual. No obstante, el estudiante, previa petición a la organización, podrá distribuir el enlace de streaming entre sus allegados, para que también puedan disfrutar de una jornada única desde donde estén.
Esta retransmisión en directo por streaming se verá en Latinoamérica y para las dos ceremonias del Encuentro, días 8 y 9 de julio. Además, en la primera jornada, egresados que no estarán de forma presencial para recoger su diploma de asistencia, podrán descargárselo vía online en conexión simultánea al acto.
El espíritu de llegar a todos forma parte del decálogo de universidad en línea de UNIR. Una universidad transfronteriza, que rompe barreras geográficas, es inclusiva y supera situaciones de desigualdad ofreciendo oportunidades a mujeres y a personas en situaciones desfavorables allí donde otras universidades no pueden llegar.
Punto de partida
El imprescindible punto solemne de la ceremonia estará marcado por el discurso del rector de UNIR, José María Vázquez García- Peñuela. Se dirigirá a los estudiantes en términos de reconocimiento y parabienes por el hito logrado. Recordará la importancia de la formación superior en la consecución de ese sueño, que es un punto y seguido para alcanzar otros igualmente ambiciosos.
José María Vázquez García- Peñuela, rector de UNIR, dirigirá palabras de felicitación a los estudiantes en su discurso.
El rector de UNIR se volverá a dirigir con las mismas intenciones en un nuevo discurso dirigido a los egresados de la segunda jornada del Evento. En este día, Beatriz Feijoo, será la encargada de ofrecer la lección magistral, sobre la priorización de lo humano en la alfabetización digital en los menores. Desde su posición como experta académica e investigadora en el ámbito de la publicidad, disertará sobre las inquietudes que suscita la gestión de los contenidos híbridos, especialmente los que entremezclan publicidad y entretenimiento, por parte de los menores.
Para la académica de UNIR, “la alfabetización digital de las nuevas generaciones debiera encaminarse hacia integrar también la dimensión ética que permita discernir entre lo bueno y lo malo y su repercusión en el comportamiento del propio individuo y de la sociedad.”
Otras reflexiones, acerca de la tecnología al servicio del hombre o sobre la formación de los menores para responder sin miedo a preguntas trascendentales que plantea la vida, también llegarán a los alumnos, ya en las postrimerías del Encuentro.
Testimonio de ideario UNIR
Cerca del final, entre el murmullo de felicitaciones, abrazos y lágrimas, los alumnos, aún sin romper filas, empezarán a desvelar experiencias y testimonios coincidentes con el espíritu de la universidad. Así no serán pocos los estudiantes que supieron aprovechar la flexibilidad de la metodología UNIR, ideal para conciliar vida familiar y laboral, aunque esto no siempre sea fácil.
Alumnas engalanadas con la beca UNIR, para disfrutar de una jornada única en sus vidas.
Jessica Reino es una muestra clara de ‘querer es poder’. Un contexto de pandemia, un trabajo absorbente, una hija de siete años que atender y ¡un bebé por llegar! Hasta el último momento trabajó embarazada y no dejó de estudiar su Máster en Marketing Digital con UNIR. “Tenía claro mi objetivo, dónde estaba el punto de mi sacrificio y de mis renuncias”.
Autoexigente, ante sí tenía el reto de conectarse a todas las clases, por mucho que tuviera la posibilidad de verlas grabadas en cualquier momento. “Algo que me sorprendió en UNIR y que valoro muchísimo, es la interacción. El hecho de que te respondan a una duda, debatan un criterio, ofrezcan alternativas en el momento, es un plus impagable. Los profesores de cada materia me daban respuesta a lo que necesitaba, de tal modo que podía retroalimentarme de la información proporcionada. Eso me ayudaba a evaluarme y seguir creciendo”.
En ese tiempo, Jessica tuvo a su hijo y casi se acabaron las horas de sueño. “No dormí nada”. Tesón, sacrificio y capacidad para la organización hicieron posible culminar de forma brillante su TFM, a día de hoy, ejecutado como plan de marketing para la radio que ella misma dirige. “Ahora invito a mis antiguos profesores a mi programa, para seguir aprendiendo de sus conocimientos, también de su experiencia práctica sobre el terreno”.
Como vivo ejemplo del triunfo de la voluntad y amor por el estudio, la ya magister por UNIR, pronunciará el discurso que represente a los alumnos de la segunda jornada.
¡Lo conseguí!
Y tras discursos y clases magistrales llegará el final de la ceremonia bajo los acordes del Gaudeamus Igitur, himno universitario por excelencia. Entonces acabará un día memorable en la vida de un alumno de UNIR. Posiblemente, no haya mejor escenificación de la alegría del momento, que esos birretes al aire, transmitiendo un mensaje sordo pero unánime, compartido por todos: ¡Lo conseguí!
Explosión de alegría, birretes al aire, al término de la ceremonia.
