Más de 4.000 personas asisten a la Graduación de Colombia 2016 en la que el rector ha felicitado a los nuevos egresados "por haber alcanzado la meta, cualificarse profesionalmente y ser más a la sociedad". Lee aquí la crónica de la ceremonia
Alegría, satisfacción y agradecimiento. Además de, por supuesto, mucha emoción. Estas palabras resumen a la perfección el cúmulo de sentimientos que esta tarde han abarrotado el Centro de Convenciones G12, en Bogotá, sede de la multitudinaria Graduación que la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) ha celebrado en Colombia. Una emotiva ceremonia que además ha podido seguirse en directo a través de la página oficial de la Graduación: graduacion.unir.net
Hasta el Centro de Convenciones se han desplazado más de 4.000 personas, de las que un millar eran graduados que no han querido perderse tan especial acontecimiento rodeados de sus familiares y amigos. Todos ellos han asistido con expectación a una ceremonia donde se ha hecho especial hincapié en la importancia de una educación de calidad e innovadora para una mejor vida personal y profesional.
Así lo ha refrendado el rector magnífico de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), José María Vázquez García-Peñuela, quien tras alabar la “maravillosa nación” que es Colombia ha destacado la alegría “que inunda nuestros corazones y la satisfacción que nos procura conseguir metas personales arduas, entre las que se encuentra la realización de un Máster universitario”.
Un logro que, ha reconocido el rector, “dista de ser fácil porque el nivel de exigencia que una universidad cuyas autoridades se toman en serio el papel que la sociedad les asigna ha de ser, necesariamente, alto” y ha advertido de que, quien estima que la enseñanza online demanda menos dedicación y esfuerzo personal que la tradicional “no conoce suficientemente la realidad”. Tras reconocer el esfuerzo de los graduados y agradecer el papel de sus familiares y profesores, el rector les ha recordado que “han alcanzado la meta, se han cualificado profesionalmente y podrán ser más útiles a la sociedad”.
En una línea similar se ha expresado el director de la Escuela de Ingeniería y Tecnología (ESIT) de UNIR, autor de la lección magistral. Bajo el título ‘Inteligencia Artificial y Tecnología al servicio de la educación y la sociedad’, Rubén González ha señalado que “habéis aprendido unas destrezas generales y específicas para mejorar como profesionales cualificados en la sociedad del conocimiento en la que nos encontramos inmersos”, si bien ha incidido en que “una de las labores más importantes que podemos hacer como personas, además de ingenieros, tecnólogos, empresarios o educadores, es proporcionar soluciones eficientes que faciliten la integración social de las personas”.
¿Cómo? A través de “ciudadanos muy competentes en nuevas tecnologías” que es lo que exige un mundo interconectado como el actual, donde la gente pueda crear su propia tecnología y, por ejemplo, adecuar mecanismos de accesibilidad para personas con discapacidad. “La formación en línea ha permitido ser una parte clave en la formación integral de personas que necesitan que el mundo de saberes llegue a su casa”.
Pero la inteligencia artificial, la robótica y la computación deben ir de la mano de la ética, la moral y la deontología porque “Internet de las Cosas, Inteligencia Artificial y Accesibilidad carecen de sentido si su esencia no se basa en ayudar a personas con y sin discapacidad” y es por eso que González ha destacado el papel de las universidades y escuelas tecnológicas. “Formar y educar en tecnología será básico; formar y educar en ética y moral será crítico”, se ha despedido, no sin recordar a los asistentes que “siempre tendréis aquí vuestra casa, en la que habéis confiado y deseo que sigáis haciéndolo”.
Así lo hizo en su momento Asury Paola Villarreal Campos, alumna del Máster Universitario en Neuropsicología y Educación, que ha hablado en representación de sus compañeros, con los que ha compartido las expectativas, entusiasmo, curiosidad y sed de conocimiento con los que, meses atrás, juntos iniciaron una nueva etapa de su vida. “UNIR nos ha llevado a alcanzar el anhelo esperado y gracias a ella la distancia, ubicación geográfica, las dificultades económicas, familiares, sociales y hasta de salud ya no son un impedimento para querer salir adelante y ser mejores personas”, ha reconocido.
Y ha continuado asegurando que “esta universidad ha permitido que lo imposible se haga posible, nos brinda una educación con altos estándares de calidad e innovación educativa para enfrentarnos a esta sociedad globalizada que nos exige nuevos retos y responsabilidades”. No ha sido un adiós, ya que “este paso por UNIR es un nuevo comienzo que nos aleja de la ignorancia y pasamos a la búsqueda inagotable del saber”. Por eso ha querido compartir su sentir “en este día venturoso” con todos sus seres queridos, amigos, compañeros y los “excelentes maestros que nos apoyaron”. A todos ellos, Villarreal les ha transmitido un profundo agradecimiento “por habernos brindado lo más sagrado: el tiempo y el amor, su apoyo incondicional que nos permitiera llega a la meta”. Una sincera y estruendosa ovación puso el punto final tanto a sus palabras.
Asimismo, el Brigadier General Adelmo Fajardo, Jefe de Educación y Doctrina del Ejército Nacional de Colombia, dedicó una palabras a los egresados destacando la importancia de la Educación en todos los aspectos de la vida, y que cobró especial relevancia tras el convenio interinstitucional entre UNIR y el Ejército colombiano firmado minutos antes de la ceremonia.
Al finalizar la ceremonia, ha servido una cena cóctel para todos los graduados y sus acompañantes que han disfrutado con un festival que ha hecho las delicias de todos los allí presentes.