La profesora de la Facultad de Educación de UNIR ha participado online en un congreso educativo en Valencia con sendas presentaciones, además de publicar un artículo donde acuña el término propio de 'macrodeberes'
La profesora de la Facultad de Educación de la Universidad Internacional de La Rioja Ingrid Mosquera ha participado en el Congreso Internacional sobre Tecnología, Educación y Desarrollo, INTED 2017, con dos comunicaciones que versan principalmente sobre el papel de la tecnología para facilitar la educación.
La docente de los Grados de Educación Infantil y Primaria y del Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria intervino online en este encuentro, celebrado los días 6, 7 y 8 de marzo en Valencia. En la primera comunicación, titulada Communicative Competencia Through Mobile Applications in the Subject of English for Secondary Education, hizo referencia al empleo de aplicaciones móviles para mejorar la competencia comunicativa en la asignatura de inglés de Educación Secundaria Obligatoria.
En la segunda presentación, Gamification within the English Subject, Mosquera abordó brevemente la metodología de la gamificación, los tipos de jugadores y su relación con las nuevas tecnologías para, posteriormente, debatir tanto las posibilidades como las limitaciones de la gamificación para la educación. Además, se ofrecían posibles actividades para el aula de inglés en las etapas de Primaria y de Secundaria.
No es la única actividad en la que esta doctora en Filología Inglesa ha participado recientemente. La revista científica de opinión y divulgación DIM ha publicado su artículo ‘Macrodeberes: hacia unos deberes significativos’ en el que acuña un término propio, macrodeberes, como traducción del inglés home learning. Palabra que emplea Peter Hutton, director del centro australiano Templestowe College, para hacer referencia a un nuevo tipo de deberes que implican a más agentes educativos desde un punto de vista colaborador, cooperativo e innovador y que está implantando con alumnos jóvenes, preadolescentes y adolescentes.
Así, la docente de UNIR adapta a la realidad española las ideas que esboza este educador y en las que diferencia los macrodeberes de los microdeberes, considerados estos últimos como las tradicionales tareas de las que hay que partir para tratar de mejorarlos. Es decir, ejercicios de libros, rellenar huecos, hacer traducciones de oraciones, realizar redacciones, hacer una lectura y comentarla o responder a unas preguntas, entre otros. Los macrodeberes, por el contrario, consistirían en actividades más complejas, con más competencias implicadas y donde las actividades fuera del aula que antes no se consideraban parte del aprendizaje, tengan ahora la categoría también de deberes y computen como horas dedicadas al estudio.