Sara Puerto
Familias necesitadas de Arequipa reciben los kits compuestos por varios kilos de alimentos de Fundación UNIR, una iniciativa para paliar la difícil situación que viven a causa de la COVID-19.
La Fundación UNIR continúa con su labor solidaria de repartir alimentos de primera necesidad entre las comunidades más desfavorecidas de Perú. Una iniciativa para paliar la difícil situación que viven muchas personas en situación de especial vulnerabilidad, que se han visto duramente afectadas por la pandemia. El destino de estas ayudas es Arequipa, ciudad capital de la provincia del mismo nombre.
Allí han ido a parar los kits o canastillas que desde el pasado julio, hasta alcanzar la cifra de 6000 unidades, viene repartiendo la Fundación UNIR. Varios kilos de aceite, arroz, lentejas, frijoles, azúcar, leche… para las familias más empobrecidas que son las más golpeadas por la COVID-19. Dado que en muchos casos dependen del trabajo informal, se encuentran en dificultades para obtener ingresos.
La Fundación UNIR desarrolla, desde finales de julio, la misma iniciativa en las poblaciones peruanas de Cañete, Ica y Ventanilla, gracias a la colaboración de la Fundación Pachacútec, institución educativa que imparte formación profesional, con sede en este último distrito.