Jorge Arana Varona
El directivo de la multinacional especializada en el diseño, optimización y equipamiento de espacios de trabajo participó en una nueva sesión de ‘Visión CEO’, ciclo organizado por la Facultad de Empresa y Comunicación de UNIR.
“En momentos convulsos, un buen directivo debe estar muy atento a las señales del mercado, para luego ser ágil y ofrecer una propuesta de valor atractivo que se adecúe a lo que el cliente realmente busca. No es fácil, pero con esta fórmula nosotros hemos logrado salir adelante de forma efectiva”. Así se expresa Alejandro Pociña, CEO de Steelcase Iberia, al referirse al momento actual con la guerra en Ucrania como telón de fondo y otras incertidumbres que afectan a la economía global.
Pociña, presidente en España y Portugal de la multinacional norteamericana especializada en el diseño, optimización y equipamiento de espacios de trabajo, asistió este jueves a una nueva edición del ciclo ‘Visión CEO’, organizado por la Facultad de Empresa y Comunicación (FEC) de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).
Este espacio, que pone en contacto a destacados directivos del país con estudiantes del MBA online de UNIR y de todas las titulaciones de la FEC, además de cualquier persona interesada en el mundo de la dirección empresarial, fue conducido por Iñaki Ortega, economista y profesor de UNIR desde 2012.
Iñaki Ortega y Alejandro Pociña conversan sobre las nuevas posibilidades del teletrabajo.
Al comenzar la sesión, Ortega preguntó a Pociña cuál es la fórmula mágica para tener un buen desempeño en momentos adversos como la crisis del 2008 o la pandemia y la era pos-COVID 19. El invitado a la sesión, ingeniero superior industrial y que cursó además el programa enfocado a ejecutivos internacionales de la Harvard Business School, abordó durante el encuentro esta cuestión y otras como la necesidad de crear oficinas innovadoras que ayuden a la motivación y fomenten la productividad, además de reflexionar sobre las múltiples cualidades que debe tener un CEO.
Atraer al empleado hacia la oficina
Respecto al nuevo escenario de teletrabajo, que cobró gran protagonismo tras la pandemia, y a cómo afecta a los modelos de negocio de las empresas, incluida Steelcase, el directivo apuntó que es fundamental “incrementar la atracción de los empleados para que a la gente le merezca la pena el esfuerzo de ir a la oficina, sabiendo que si no van se pierden muchas cosas”.
Respaldó esta afirmación al mencionar que, a través de múltiples estudios globales realizados por la empresa que dirige, “las personas que trabajan de una manera remota tienen un 33% menos de compromiso y un 20% más de probabilidad de abandonar la compañía. Por ello, se está viviendo una revolución en el diseño de los espacios”.
Iñaki Ortega, economista, profesor de UNIR y moderador del ciclo Visión CEO.
El presidente de la división Iberia de la compañía desveló sorprendentes datos sobre el teletrabajo, al referirse a otros estudios elaborados por la empresa. “El 77% de la Generación Z prefiere asistir presencialmente a las oficinas, mientras que el porcentaje entre los baby boomers gira en torno al 50%. Esto se debe a que los jóvenes se encuentran inmersos en un período de acoplamiento al mundo laboral, mientras que los más adultos ya han obtenido esa experiencia y no necesitan estar en las oficinas”.
Pociña agregó que “el 75% del trabajo en las pymes es presencial” y que “las grandes empresas tecnológicas que habían cerrado oficinas las están volviendo a abrir. Estos sectores se están dando cuenta de que en aquellos negocios donde la velocidad es clave, es muy difícil mantener este ritmo cuando todos los miembros de un equipo están dispersos”.
Cómo traducir los intereses globales a las peculiaridades locales
Los estudiantes del MBA online de UNIR que presenciaron el encuentro vía streaming tuvieron la oportunidad de realizar preguntas al invitado del ciclo. Una de las consultas giró en torno a cómo se gestiona la división de una empresa global. En concreto, preguntaron a Pociña cómo se traducen los intereses y la cultura de una empresa norteamericana a las peculiaridades del universo ibérico. El protagonista de la sesión aclaró que la solución es “aunar lo mejor de los dos mundos. Los americanos son muy buenos en muchas cosas. Son muy estructurados, aportan un marco de actuación y unos procesos que funcionan. De todos modos, hay que poner un poquito de sal y pimienta porque, de lo contrario, corres el riesgo de que el proceso sea dirigido por la empresa cuando lo deben dirigir los clientes. Si te piden algo que no está reflejado en los procesos hay que modificarlos porque, evidentemente, no vas a cambiar al cliente”, señaló.
“No es un proceso sencillo en un grupo tan grande como el nuestro, pero a través de buenos resultados hemos logrado un estatus de start-up dentro de la gran corporación en la que estamos”, resaltó el directivo de Steelcase.
“Transmitir confianza a través de la transparencia”
En otro tramo de la conversación, Iñaki Ortega llevó la charla hacia una vertiente centrada en las habilidades que debe tener un directivo, cómo debe comportarse y cómo debe ejercer en su ámbito laboral. Para Alejandro Pociña, la clave reside en “tener las ideas muy claras para luego ser capaz de explicarlas de una manera didáctica a todo el mundo. No me refiero exclusivamente al comité de dirección sino a todas las personas implicadas”.
En este sentido, aseguró que “todos los trabajadores deben saber dónde está situada la empresa, cuál es su rumbo y qué papel tiene cada uno en esa dirección. Para gestionar todos estos factores es fundamental transmitir confianza a través de la transparencia. Cuando tienes estos elementos puedes tener las ideas claras y de igual manera tienes a todo el equipo a bordo”, aseguró.
También hizo hincapié en que en la vida de un directivo hay que tomar decisiones complicadas, como pueden ser las relacionadas con la mala incorporación de un trabajador al grupo de trabajo. Usando una analogía marítima, Pociña expuso que “en un velero de alta competición no puedes llevar a bordo a gente que va de paseo”.
“En momentos convulsos un buen directivo debe estar atento a las señales del mercado”, afirmó Alejandro Pociña.
“Siempre hay que abordar estas situaciones con criterios éticos. Nunca debemos prescindir de las personas sin motivos o justificaciones. Simplemente es necesario hablar con aquellos profesionales que no se han adaptado al proyecto. Los empleados agradecen esto porque ellos mismos pueden no estar a gusto. Cuando toca realizar estas decisiones siempre tratamos de apoyar, ayudar y acompañar al trabajador en cuestión”.
El docente de UNIR recordó en este punto que la propia empresa liderada por el directivo gallego había pasado por un momento muy complejo como es el cambio de su modelo de negocio. Preguntado por el desarrollo de esta situación, Pociña afirmó que “aunque teníamos a todo el mundo a bordo, ha sido un proceso intenso. Un tránsito de mucho trabajo, pero muy reconfortante y ahora mismo el resultado está claro. Es más, al principio el grupo no veía correcta la dirección que tomamos, pero ahora ya han cambiado de opinión”.
“Es fundamental seguir formándose”
Los estudiantes del MBA online de UNIR también preguntaron a Pociña si en algún momento de su carrera había padecido el denominado ‘síndrome del impostor’ (considerar internamente que alguien aspira u ocupa un puesto que no merece por falta de condiciones técnicas, habilidades u otros factores). “Pues la verdad es que no”, comentó el empresario. “Siempre he procurado en mi carrera profesional ejercer distintas funciones y nunca he aceptado un puesto de mayor responsabilidad si sentía que no estaba preparado. Cuando me ofrecieron por primera vez un puesto de alta responsabilidad me sentía preparado para ello por los años de experiencia y formación que tenía a mis espaldas”, afirmó.
“Yo aconsejo a directivos que no se salten etapas, que disfruten del camino y que procuren formarse. Es crucial estar completamente al día de lo que está pasando. Se requiere esfuerzo y salir de la zona de confort. Para ello hay que mantener una formación continua”.
El invitado describió su propio caso, al comentar que se sigue formando, visitando instituciones como el MIT y pasando por múltiples escuelas. “Cada tres o cuatro años refresco mis conocimientos para estar seguro de que estoy al corriente de todo lo que está pasando en el mundo y en mi sector”.
Un sector apasionante
Finalmente, Alejandro Pociña animó a los estudiantes a elegir su sector como lugar de trabajo y a desarrollarse laboralmente debido a que “es apasionante”.
“Con este nuevo modelo de negocio estás en contacto con muchos palos de la sociedad y del resto de empresas. Quien se siente atraído por la parte industrial, tiene cabida. Al igual que en temas comerciales, de marketing, de cultura… En resumen, es muy rico”, concluyó el directivo de Steelcase.
De este modo finalizó una nueva edición de ‘Visión CEO’. Por el ciclo ya han pasado destacadas personalidades como Pilar López Álvarez, vicepresidenta de Microsoft; José Manuel Inchausti, vicepresidente de MAPFRE; Helena Herrero, presidenta de HP para el Sur de Europa, o Sebastián Muriel, CEO de GroupM, entre otros.
Más información:
- Puedes ver el vídeo completo de la sesión.
- facultad-de-empresa-y-comunicacion
