Alfonso Basallo
Ha participado en una nueva sesión del ciclo 'Pensar el siglo XXI', dirigido por Emilio Lamo de Espinosa.
“El cambio climático tiene una dimensión ética”, al suponer una responsabilidad “intergeneracional”, indicó Gonzalo Sáenz de Miera, director de Cambio Climático y Alianzas de Iberdrola, en una nueva sesión del ciclo ‘Pensar el siglo XXI’.
El director de este seminario de reflexión académica, Emilio Lamo de Espinosa, destacó, en la presentación, que “el cambio climático y la pandemia ponen de manifiesto la dimensión global” de los retos actuales. Y que ante el primero “carecemos de instrumentos para poder gestionar” ese desafío, aunque el Acuerdo de París supone un gran paso adelante.
En su ponencia, Sáenz de Miera explicó que “el cambio climático va a tener graves consecuencias económicas y sociales”, incluidas pobreza, hambre y emigraciones. Citó al Foro de Davos, que señaló que los “principales riesgos para el sistema financiero internacional están relacionados con el cambio climático, la biodiversidad o conflictos derivados de la escasez de recursos hídricos”.
Es preciso pasar de “un modelo energético basado en combustibles fósiles a otro más eficiente, en el que se consuma menos energía y que esta no genere CO2”. La buena noticia -subrayó- es que a través de las renovables “es posible cambiar el modelo energético a uno más limpio y más barato”.
Señaló que la transición energética, que la presidenta de la UE Ursula von der Leyen, se fijó como palanca de liderazgo, supone “una revolución industrial y una oportunidad económica” para Europa; y que España está inicialmente bien posicionada “tenemos tecnologías y sol”, pero advirtió que es preciso “aprovecharla” porque hay una fuerte competencia.
“Tenemos tecnologías, hay empresas dispuestas a invertir, y bancos dispuestos a financiar” apuntó. Solo faltan “políticas”, incluidas las fiscales, de forma que quien “contamine, pague”.
Cambio climático global
Participó como panelista Fernando Ruiz, director de Sostenibilidad de Repsol, que calificó al cambio climático de “problema global”, un reto de tal magnitud que solo se puede afrontar y gestionar “mediante una gobernanza global”.
Subraya que “no estamos sabiendo gestionar el reto que se nos viene encima”, pero no es el único. Tenemos también “los retos del agua, la biodiversidad, el plástico”.
También intervino Cristina Rivero, directora del Departamento de Industria, Energía, Medio Ambiente y Clima de la CEOE, que expuso algunas razones para el optimismo. Destacó la apuesta que supone “la agenda 2030, hoja de ruta para conseguir un planeta mejor”; el Green Deal y la oportunidad que suponen los fondos de la Next Generation, remarcando que “la sostenibilidad es condicionante para acceder a los fondos europeos”.
Finalmente participó en la sesión Asunción Ruiz Guijosa, directora ejecutiva de SEO/BirdLife, que alertó de que estamos en un “momento de emergencia ecológica”. Se trata de “una emergencia social no un capricho naturalista”; y debemos plantearnos qué “tipo de sociedades queremos en el siglo XXI”.
Derecho humano al medio ambiente
Apuntó que “el crecimiento ilimitado no es posible”, y que “un simple virus ha hecho tambalearse al modelo”. Abogó por establecer “un nuevo derecho humano: el derecho al medio ambiente”, necesario en este momento, como lo fue la Declaración de 1948, después de la Segunda Guerra Mundial. Y planteó la necesidad de poner la política ambiental en el centro, para que las democracias afronten la amenaza contra la naturaleza y se conviertan en “ecocracias”.