Isabel Alvarez Castro
Miembro durante 28 años de la Policía Nacional y creador del método VERA, el investigador de UNIR explica por qué el analista de conducta es una pieza clave en la resolución de un hecho delictivo.
El coordinador del Máster en Investigación Criminal e investigador del grupo de PSYCRIM (Psicología y Criminología) de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Juan Enrique Soto, señaló en la openclass “Perfilación criminal: análisis de la conducta” que el analista es una pieza clave en el inicio de la investigación y resolución de hechos delictivos. “Una vez ocurren los hechos, el analista se centra en la conducta del sospechoso para interpretar el comportamiento: qué decisiones tomó, por qué o cuál ha sido su razonamiento para realizar el acto”.
Desde que se recibe una llamada para notificar un delito u homicidio, el analista trabaja en una serie de operaciones psicológicas operativas en conjunto con la policía y los investigadores: el tono de voz, discurso, inspección ocular, reconstrucción, entrada y registro en el lugar de los hechos, detención y toma de declaración.
Cuando una persona llama a los servicios de emergencia normalmente está directamente implicada en el suceso.
“Cuando una persona llama a los servicios de emergencia normalmente está directamente implicada en el suceso. El tono suele ser distinto a la llamada que realiza un testigo honesto que se ha encontrado con la situación, desde ese momento se empieza a analizar”, explica Soto.
Si el análisis de conducta no proporciona datos suficientes, se hace un perfil criminal “en la que se describen las características físicas y psicológicas de comportamiento del sospechoso que le distinguen del resto de la población”.
Eficacia y rigor científico
“En el análisis de conducta es necesario aportar rigor científico y debe asegurar a los investigadores que el proceso lógico que ha llevado a una hipótesis es defendible desde la ciencia”, asegura Soto.
Durante la actuación operativa en conjunto, la policía científica, los operarios e investigadores aplicarán sus propias técnicas para detectar indicios de lo que ha pasado. “Se plantean cosas en conjunto, se comparte información y se genera preguntas sobre la conducta del sospechoso como vestimenta o desplazamientos que ayudarán a los investigadores a seguir una línea de actuación”, explica el experto.
Los analistas aportan un valor adicional a la información obtenida por la policía científica e investigadores.
En este sentido, Soto explica que los analistas aportan un valor adicional a la información obtenida por la policía científica e investigadores y remarca que “si el trabajo no está acompañado de rigurosidad y metodología no tiene validez”.
La policía científica, los operarios e investigadores aplicarán sus propias técnicas para detectar indicios de lo que ha pasado.
Método VERA
El método VERA (Víctima, Escena, Reconstrucción y Autor), ha sido desarrollado por el psicólogo, profesor e investigador de UNIR, Juan Enrique Soto, y se utiliza para trazar perfiles criminales de homicidas desconocidos.
Actualmente, el método VERA está muy aceptado y los jueces piden estas muestras periciales e incluso, en algunos casos, los mismos tribunales solicitan informes con éste método para ayudar al juez. “El método VERA se puede utilizar en cualquier caso delictivo, desde un homicidio, un hurto o una estafa a nivel cibernético, porque existen conductas humanas que se pueden analizar”, señala Soto. Además, toda la información queda registrada de manera objetiva y permite una investigación controlada, con los menos sesgos posibles.
En algunas ocasiones, la información de perfil criminal no es suficiente y los analistas sugieren a los investigadores líneas de actuación “como, por ejemplo, a qué hora es conveniente buscar al sospechoso, en qué lugar, si hacerlo de manera discreta o mediática, etcétera”.
Los analistas acompañarán a todo el equipo para analizar directamente las conductas del sospechoso durante la detención, interrogatorio, visita al lugar de los hechos e incluso juicio si fuera necesario.
Futuro de la perfilación criminal y la inteligencia artificial
Respecto a la introducción de las nuevas tecnologías para el análisis de conducta, Soto afirma que ya se están utilizando en los procesos de análisis, pero deja claro que es una herramienta que no sustituye en ningún momento el trabajo humano.
“Actualmente hay tecnología que nos permite detectar más indicadores que los que el ojo humano puede ver. El método VERA está trabajando para ver de qué manera se puede integrar la IA para pasar de los datos a las hipótesis y que los sesgos sean los menos posibles”, concluye Soto.
