Ambos difieren principalmente en duración y enfoque académico.
Un máster puede durar entre uno y dos años, dependiendo de la especialidad, y se centra en la profundización de conocimientos y habilidades específicas, y puede estar más orientado a la investigación o a la aplicación profesional. Es ideal para quienes desean especializarse en su campo o adquirir competencias prácticas avanzadas.
Por otro lado, un doctorado, cuya duración se encuentra entre los 4 y los 6 años, se enfoca en la creación de nuevo conocimiento a través de la investigación original. Como estudiante debes completar una tesis o disertación que contribuya significativamente a su campo de estudio. Este nivel de educación está diseñado para formar investigadores independientes y académicos, y es el más alto en el terreno académico.
En cuanto a salidas profesionales, los graduados de máster pueden acceder a roles avanzados en su campo, como gestión, consultoría y especialización técnica, y algunos optan por continuar hacia un doctorado. Los doctores, en cambio, están preparados para carreras en la academia, la investigación avanzada, y posiciones de liderazgo en la industria, el gobierno y organizaciones sin fines de lucro.
En resumen, un máster es para especialización avanzada y habilidades profesionales, mientras que un doctorado es para la investigación profunda y la creación de nuevo conocimiento.