UNIR Revista
Los gestores del patrimonio se encargan de preservar, conservar y promocionar los bienes culturales, artes, materiales e inmateriales con valor histórico de un territorio determinado.
España cuenta con un amplio patrimonio artístico, histórico y cultural, reconocido nacional e internacionalmente, que requiere de tareas de protección y conservación. Para conservar y preservar los más de 60 Patrimonios Mundiales declarados por la Unesco y los 17.693 Bienes de Interés Cultural (BIC) registrados, es necesario contar con gestor de patrimonio cultural que vele por el estado y mantenimiento de estos bienes.
Un gestor de patrimonio cultural es un profesional encargado de la “administración eficiente de recursos (patrimoniales, humanos, económicos…) que afecten al patrimonio cultural”, según se recoge en el Código Deontológico de la Asociación Española de Gestores de Patrimonio Cultural (AEGPC). Por lo tanto, requiere de una formación multidisciplinar que abarque desde conocimientos sobre administración de empresas a la dirección y gestión de recursos humanos o el marketing cultural.
En este sentido, además del conocimiento obtenido en la carrera, se recomienda que quien quiera trabajar como gestor en esta área curse el Máster en Gestión del Patrimonio Cultural. En esta especialización se aprende a dirigir proyectos desde una perspectiva integral y a diseñar modelos de gestión adaptados a cada territorio, aplicando conceptos de marketing y finanzas, así como las nuevas tecnologías para desarrollar proyectos sostenibles. Además, la realización de este posgrado en UNIR implica la realización de prácticas en instituciones públicas y privadas, en organismos como el Instituto del Patrimonio Cultural de España.
Principales funciones de un gestor de patrimonio cultural
Fundamentalmente, el trabajo del gestor de patrimonio cultural está centrado en dar protección y valorar los bienes culturales, artes y materiales que tienen un valor histórico, artístico, arqueológico o antropológico especialmente significativo, a la vez que en gestionar estos recursos.
Dentro de estos bienes susceptibles de ser protegidos se incluyen edificios históricos (museos, teatros…), áreas arqueológicas, obras de arte, documentos, tradiciones culturales y cualquier otro elemento que represente el legado cultural de una sociedad. Así, su trabajo puede desempeñarse en museos, sitios arqueológicos, monumentos históricos, patronatos de conservación, fundaciones, galerías de arte, entre otros.
El gestor de patrimonio cultural se encarga de la planificación, ejecución y monitorización de tareas para las que requiere un equipo multidisciplinar formado por técnicos especialistas en las diferentes áreas. Entre sus funciones destacan:
- Investigación y análisis del patrimonio. Llevar a cabo estudios, de diversa índole, para identificar y conocer la relevancia y valor de los elementos de patrimonio cultural de una determinada área.
- Inventariado y registro. Realizar tareas de catalogación y documentación de bienes y patrimonio.
- Conservación y restauración. Desarrollar planes y técnicas de conservación y restauración para proteger y mantener los bienes culturales de forma que se mantenga su originalidad y se evite su deterioro.
- Gestión de proyectos y promoción. Planificar y poner en marcha proyectos de conservación y restauración, así como acciones de promoción del patrimonio con campañas de educación y sensibilización con las que fomentar el conocimiento y puesta en valor.
- Legislación y normativa. Un gestor del patrimonio cultural debe estar al tanto de las diferentes leyes y normativas relacionadas con la protección del patrimonio cultural y patrimonio histórico, tanto de ámbito autonómico o nacional como el artículo 46 de la Constitución Española de 1978 donde se incorpora como obligación del Estado proteger el patrimonio. Por su parte, la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español regula, entre otras cuestiones, las obligaciones y competencias relativas al Patrimonio Histórico Español. Asimismo, estará al día de las recomendaciones internacionales sobre protección del patrimonio.
- Planificación. Estos profesionales colaboran con entidades locales y autonómicas para integrar correctamente el patrimonio en la planificación urbana y territorial, asegurando siempre que su conservación sea compatible con el desarrollo. Igualmente, ejercen como asesores-consejeros de derecho cultural.
- Financiación. Los técnicos de gestión del patrimonio histórico y cultural deben también ser parte de las actividades destinadas a la búsqueda y diversificación de fuentes de financiación y mantener reuniones con responsables de las administraciones en materia de subvenciones y patrocinadores del ámbito privado. Además deberán preparar y controlar las ayudas y subvenciones, así como procurar su correcta y adecuada inversión.
- Difusión. Este profesional también debe encargarse de las relaciones públicas con medios de comunicación, estableciendo las prioridades comunicativas y divulgadoras correspondientes a campañas de difusión de imagen corporativa y de actividades y proyectos.
Requisitos para ser gestor de patrimonio cultural
El gestor cultural es un profesional multidisciplinar que requiere de un amplio conocimiento sobre el patrimonio, pero también:
- Formación académica. Generalmente quien se desempeña en esta profesión proviene de una formación universitaria en áreas como Historia del Arte, Arqueología, Derecho, Bellas Artes, Arquitectura, ADE, Gestión Cultural, Comunicación, Turismo, Antropología, Ingeniería o campos relacionados.
- Gestión. Este perfil debe contar con capacidad de gestión, desde proyectos hasta recursos humanos.
- Habilidades técnicas. Es recomendable contar con habilidades en investigación, documentación y gestión de proyectos.
- Pasión y ética. Es básico que el futuro gestor de patrimonio tenga pasión por el patrimonio cultural y un gran sentido de la responsabilidad hacia el mismo.
- Conocimientos específicos. Profundo conocimiento del patrimonio cultural y su gestión, así como técnicas de conservación y restauración.
- Conocimientos legales y normativos. Familiarizados con las leyes y regulaciones que protegen el patrimonio cultural en su área de trabajo.
- Conocimiento de herramientas informáticas. Para desarrollar actividades administrativas y de gestión es necesario contar con la capacidad de manejar herramientas informáticas.
- Capacidad de trabajo en equipo y comunicación. Trabajar en este ámbito implica colaborar con profesionales y entidades diversas, por lo que es fundamental tener habilidades para trabajar en equipo y buena comunicación.
El sueldo de un gestor de patrimonio en España
Contar con una formación superior y especializada ofrece la oportunidad de llegar a conseguir una mejor remuneración; sin embargo, los salarios varían según la localización, la experiencia laboral previa, el empleador, etc.
El salario promedio para un gestor en el ámbito de la Administración Pública en España, tal y como recoge la Federación Estatal de Asociaciones de Gestores Culturales, puede oscilar entre los 19.000 y 55.000 euros anuales, dependiendo de algunos de los factores mencionados anteriormente. En este sentido, un puesto de auxiliar rondará un salario base de 19.152 € y un técnico superior los 53.790,58 €. En el caso de trabajos en entidades privadas, como por ejemplo fundaciones, además de poder obtener un sueldo competitivo, se suelen conseguir empleos más adecuados al perfil.
La labor de un gestor de patrimonio histórico y cultural va más allá de la administración y conservación de bienes, ya que mantiene el compromiso con la preservación y promoción de la identidad cultural y la memoria colectiva de una sociedad.
