UNIR Revista
Existen diferentes métodos creativos que ayudan a impulsar la creatividad para llegar a conclusiones diferentes y abordar los desafíos desde varias perspectivas.
La creatividad es algo innato al ser humano y, aunque hay personas con mayor capacidad para desarrollar pensamientos creativos, se trata de algo que se puede trabajar a través de diferentes técnicas de creatividad.
El objetivo principal de todas estas técnicas pasa por estimular la generación de ideas originales y conceptos innovadores. A través de ellas se puede llegar a la resolución de diferentes desafíos de formas alternativas.
La creatividad es muy importante para hacer frente, no solo a los problemas del mundo, sino también para los departamentos de venta de las empresas o las estrategias de contenidos en redes sociales. Fruto de esta importancia, la ONU ha decretado el Día Mundial de la Creatividad con el objetivo de poner en valor este pilar de la comunicación.
¿Qué son las técnicas creativas?
Se entiende como técnicas creativas los diferentes métodos o estrategias que tienen como objetivo estimular ideas originales, alternativas y diferenciadas. Su uso abarca todo tipo de campos, desde los más artísticos hasta los más científicos y tienen la misión de buscar soluciones creativas para desafíos variados.
Su utilidad se extiende a todo tipo de contextos; problemas cotidianos, pero también el diseño de estrategias globales de empresas o la resolución de trabajos en equipo. En este sentido, la variedad de técnicas que existe tiene en común el uso de ejercicios, la búsqueda de enfoques o la exploración de nuevas perspectivas para llegar a todo tipo de conclusiones. Y lo hacen ayudando a liberar la creatividad, convirtiéndose en herramientas fundamentales para la innovación tanto a nivel personal como profesional.
¿Para qué sirven los métodos creativos?
El objetivo final de los métodos creativos pasa por buscar soluciones originales para todo tipo de planteamientos, bien sean problemas científicos o desafíos artísticos. La gran ventaja que presentan es la generación de ideas, aportando soluciones novedosas y originales. Esto ayuda a la resolución de problemas con respuestas que podrían pasar desapercibidas a simple vista o empleando enfoques más convencionales.
A nivel empresarial o de industria, por ejemplo, el uso de métodos creativos puede dar lugar a nuevos productos o servicios que cubran demandas que no se habían planteado antes. Todo ello a través de la creatividad y la ruptura de bloqueos mentales, dando lugar a la apertura de nuevos horizontes y la amplitud de pensamiento.
Los métodos y técnicas creativas ayudan a explorar nuevas perspectivas gracias a su planteamiento de los conceptos a través de múltiples enfoques. Esto enriquece la toma de decisiones y contribuye a un proceso de comunicación más efectivo.
Tipos de técnicas creativas
No todos los problemas y desafíos requieren el mismo tipo de soluciones. Por eso, cada técnica de creatividad puede ser más útil en un contexto determinado. Aunque todas ellas tienen el mismo objetivo final de buscar soluciones originales e innovadoras, cada una lo aborda desde un punto de vista y con herramientas diferentes.
Brainstorming
Es uno de los métodos más utilizados en campos como la publicidad o el diseño. El brainstorming se conoce también como tormenta de ideas y, como su nombre indica, consiste en aportar todas las ideas que se le ocurran a una persona o los diferentes miembros del equipo en relación a un contexto.
Esta técnica no pone filtros, sino que es un primer paso de una estrategia creativa en el que todo vale y las ideas se aportan con total libertad. En una segunda fase del proceso se hará una criba de las propuestas que mejor se adaptan a los objetivos específicos del proyecto.
Brainwriting
Esta técnica de creatividad está relacionada con el brainstorming. En este caso se trata de poner sobre un papel las ideas o conceptos para conseguir una gran cantidad de ideas en poco tiempo. El objetivo es solventar los reparos que puedan darse en los miembros de un equipo a la hora de decir en voz alta sus ideas.
Una vez que están anotadas las ideas, es recomendable darles forma para llegar a un relato con el que responder al desafío planteado. Una forma de hacerlo es a través de la técnica del storytelling.
Mapas mentales
Este tipo de técnica de creatividad ayuda a comprender de forma visual las diferentes aristas de un problema o desafío. Este método, más que para buscar soluciones es especialmente útil a la hora de abordar un problema y comprender todas sus vertientes.
Para llevarlo a cabo se dibuja en papel o de forma digital un mapa y, partiendo del centro, se abren líneas para anotar todas las cuestiones relacionadas con ese concepto global. Su principal función es representar en un solo golpe de vista la estructura de un planteamiento.
Design thinking
La metodología design thinking es una de las más conocidas de las técnicas de creatividad. Se define como un proceso de búsqueda de soluciones a partir del planteamiento de un reto. Este método se centra en las personas a través de conceptos como la empatía o la validación.
Estimula un tipo de pensamiento no lineal en el que cada etapa del proceso se analiza por separado, pero también como parte de un todo. Su principal función es ayudar en los procesos de gestión del cambio o diseñar nuevos modelos de negocio. Es uno de los conceptos más empleados en el mundo de las startups.
PNI
PNI son las siglas de Positivo, Negativo e Interesante, tres conceptos que conforman una técnica de creatividad diseñada por Edward de Bono en la que se redactan tres listas para cada problema o desafío planteado. En cada una de esas listas se anotan los puntos negativos, positivos e interesantes para valorarlos y tomar decisiones.
Esto obliga a abrir la mente y abordar las cuestiones sin prejuicios, basándose únicamente en las conclusiones finales. La técnica PNI tiene múltiples beneficios, no solo a nivel profesional, sino también a la hora de tomar decisiones personales o salir de encrucijadas vitales.
Do it
Este método invita a la acción. Consiste en tomar la decisión más correcta, efectiva y menos contraproducente, sin perder demasiado tiempo en analizarla. El objetivo es potenciar al máximo la creatividad y el instinto.
Sinéctica
Este proceso creativo se basa en la búsqueda de respuestas a través de la conexión de elementos que, a priori, puede parecer que no tengan nada que ver entre ellos. Así, a través de conceptos ya existentes, es posible llegar a nuevas y originales conclusiones.
La forma más efectiva de poner en práctica esta técnica es mediante sesiones en grupo, en las que los miembros se retroalimentan a partir de sus ideas y eso da lugar a nuevas soluciones innovadoras.
Triz
El nombre del método Triz responde a las siglas en ruso del concepto de teoría para resolver problemas de inventiva y fue inventado por el ingeniero Genrich Altshuller para analizar una serie de patentes y buscar patrones comunes entre ellas. Esto permite abordar de una forma lógica el proceso de invención de productos y servicios.
Para ello, se convierten los problemas en conceptos abstractos extrayendo sus componentes más esenciales y se buscan soluciones también abstractas para ellos.
Scamper
El método Scamper busca impulsar al máximo la creatividad a través de estrategias e ideas ya conocidas pero modificadas de alguna forma, bien dándoles una vuelta en su totalidad o cambiando pequeñas partes. De este modo, se llega a soluciones diferentes que con un método convencional de resolución de problemas.
Este tipo de técnica ayuda a optimizar los recursos en base a acciones ya puestas en marcha.
Método 365
Seis personas, tres ideas y cinco minutos es todo lo que se necesita para poner en práctica el método 365. Es una técnica que no necesita más recursos que la participación de un pequeño grupo, un lápiz y un papel.
El objetivo de esta técnica de creatividad es conseguir un gran número de ideas en un pequeño periodo de tiempo. Igual que ocurre con métodos como el brainstorming o el brainwriting, el método 365 está exento de prejuicios y todas las ideas aportadas son válidas. Se trata de una primera fase para la resolución de un desafío.
Los seis sombreros de De Bono
Este método es uno de los más conocidos y utilizados a la hora de buscar soluciones creativas y abordar los problemas desde diferentes perspectivas. Para ello, se establecen seis sombreros imaginarios con diferentes colores y significados:
- Blanco: los hechos
- Rojo: la intuición
- Verde: las ideas
- Negro: lo negativo
- Amarillo: el optimismo
- Azul: los resultados
Aplicando cada uno de los sombreros a un concepto se pueden comprender sus diferentes aristas y abordarlo desde diferentes perspectivas, lo que dará lugar también a diferentes soluciones.
En un mundo en el que se generan millones de contenidos diarios, la creatividad es un elemento fundamental a la hora de transmitir mensajes que lleguen a la audiencia. Es, por lo tanto, uno de los grandes valores que aprenden los estudiantes en el Grado en Comunicación online de UNIR.