Ana L. Cuervo García
Es una de las tesis más aceptadas en el ámbito del estudio sobre esta etapa de la vida y en la criminología en general. Su autora se ha convertido en una referencia a la hora de explicar un fenómeno que va en aumento y preocupa cada vez más a la sociedad.
La delincuencia juvenil es un fenómeno que se da en todas las sociedades, y que puede ser un precursor de la delictividad adulta. Son muchas las teorías criminológicas que se han acercado a los jóvenes que cometen actos delictivos. En esta ocasión, se destaca la teoría del desarrollo de Moffitt.
Esta teoría distingue dos tipos de delincuentes juveniles: los limitados a la adolescencia y los persistentes a lo largo de la vida. Los delincuentes limitados a la adolescencia, son aquellos que delinquen en esta etapa de la vida únicamente. Se trata de sujetos cuyo comportamiento en la infancia ha sido no problemático y cuya actividad delictiva desistirá al llegar a la edad adulta.
Lo que ocurre con estos sujetos jóvenes es que, al llegar a la adolescencia, experimentan un desequilibrio entre la madurez biológica y la que la sociedad permite a en esa etapa vital. Por esta causa, los adolescentes reaccionarán fijándose e imitando a aquellos jóvenes que parecen llevar una vida más independiente, siendo estos los más problemáticos, e imitando entonces sus conductas antisociales y delictivas.
Por otra parte, los delincuentes persistentes a lo largo de la vida son aquellos con infancias difíciles y comportamientos problemáticos desde edades tempranas, tanto en el hogar como en la escuela. Cuando estos llegan a la adolescencia, delinquen y sirven como modelo a los jóvenes delincuentes limitados a este momento del ciclo vital. Moffitt defiende que este segundo tipo de delincuentes juveniles podrían presentar lesiones cerebrales, o haber sufrido anomalías en el desarrollo del feto, durante la gestación, etc.
Un ejemplo de delincuente juvenil limitado a la adolescencia, sería el de un joven de 14 años que, con su grupo de amigos, roba alcohol en una tienda, siendo este menor, un joven que no ha presentado problemas de conducta con anterioridad.
Por otra parte, un ejemplo de delincuente a lo largo de la vida, podría ser el de un joven que durante la infancia ha mostrado comportamientos problemáticos en el colegio, como por ejemplo desobediencia, bajo rendimiento escolar o conductas violentas hacia compañeros. A los 14 años, este delincuente juvenil a lo largo de la vida consumirá y venderá sustancias ilegales, además de cometer actos vandálicos y hurtos. Una vez que este joven alcance la mayoría de edad, se convertirá en un delincuente adulto cometiendo delitos graves de tráfico de sustancias, malos tratos, etc.
¿Qué medidas se pueden tomar contra los dos tipos de delincuencia juvenil? En el caso de los delincuentes juveniles limitados a la adolescencia, las medidas se centrarían en la prevención e intervención de la delincuencia juvenil en este momento vital. Pero los delincuentes juveniles a lo largo de la vida, necesitarían medidas de prevención e intervención centradas en la infancia.
La teoría de Moffitt explica los altos porcentajes de delincuencia en la adolescencia. También se debe señalar, que esta autora e investigadora, se encuentra inmersa en la actualidad, en el estudio de más perfiles criminales en adolescentes. Entre ellos, el de aquellos que, comenzando en la adolescencia, persisten en la edad adulta, y el de aquellos que no delinquen en ningún momento de su ciclo vital. Estos dos últimos conforman porcentajes muy pequeños, pero, aun así, deben ser estudiados y comprendidos.
La teoría del desarrollo de la delincuencia de Moffitt, es una de las más aceptadas en el ámbito del estudio de la delincuencia juvenil, y también una de las teorías clásicas no solamente de este ámbito, sino de la Criminología en general. Es tal así, que desde que Moffitt publicó los primeros resultados de sus estudios (https://moffittcaspi.trinity.duke.edu/about/moffitt), y la primera publicación de su teoría, esta se ha convertido en el punto teórico de referencia de las explicaciones sobre la delincuencia juvenil.
Referencias bibliográficas:
Moffitt, T. (1993). Adolescence-limited and life-course-persistent antisocial behaviour: a developmental taxonomy. Psychological review, 100, 674-701.
Moffitt, T. (2009). A review of research on the taxonomy of Life-Course persisten versus Adolescent-Limited antisocial behavior. Taking stock, the status of criminological theory, 277-311.
Ana L. Cuervo García es doctora en Criminología y Delincuencia Juvenil, psicóloga, terapeuta de conducta y experta en perfilación criminal. Actualmente, es profesora del grado en Criminología en UNIR y profesora colaboradora en CRIMINA. Miembro del equipo de investigación Psycrim.