UNIR Revista
La continuidad asistencial es el mecanismo que garantiza una correcta coordinación entre las diferentes fases de atención de un paciente, lo que conducirá a un tratamiento más eficaz, eficiente y ajustado a sus necesidades médicas.
La continuidad asistencial pone el foco en alcanzar una verdadera coordinación entre los diferentes servicios sanitarios que recibirá una persona. De esta forma, se realiza un seguimiento real de las necesidades del paciente, con una visión completa de su historial médico. Esta información es extremadamente valiosa al realizar el diagnóstico de determinadas patologías. Además, reduce el tiempo de este proceso, evita la repetición de pruebas de manera innecesaria y garantiza que el enfermo recibirá antes un tratamiento adecuado a su dolencia, que será seguido posteriormente por un profesional.
La continuidad asistencial se configura como un ámbito profesional multidisciplinar que requiere especialización académica como la que se alcanza a través del Máster en Intervención Social online de UNIR, centrado en ofrecer las herramientas y estrategias necesarias para actuar en diferentes escenarios sociales.
Otro posgrado que destaca en este ámbito es el Máster en Gestión Sociosanitaria online de UNIR, focalizado en que sus estudiantes dominen las fases asociadas a la gestión e implementación de proyectos de actuación sociosanitaria.
¿Qué es la continuidad asistencial?
La continuidad asistencial se define como “el grado de unión de las experiencias en la atención que percibe el paciente a lo largo del tiempo, de manera que estas sean coherentes con sus necesidades médicas y contexto personal”, según el Documento Marco para el Desarrollo de la Continuidad Asistencial en la Comunidad de Madrid.
Es decir, la continuidad asistencial busca establecer una coordinación entre las diferentes fases de cuidado de un paciente, entendiendo los diferentes niveles de atención y sus especificaciones técnicas y/o profesionales, así como las necesidades requeridas en cada uno de ellos.
Así, la continuidad asistencial se presenta como el camino a seguir para ofrecer un tratamiento más eficaz y eficiente a la persona.
Beneficios de la continuidad asistencial
La continuidad de la atención en salud conduce a la calidad asistencial, logrando ofrecer una respuesta más eficiente y eficaz a la persona que acude en busca de ayuda profesional.
Una organización vertebrada y en continua comunicación garantizará que las actuaciones de los profesionales sanitarios estén dirigidas a proteger la salud integral del paciente.
También evitará la realización de pruebas innecesarias o duplicadas, ahorrando tiempo en el momento del diagnóstico, además de dinero y recursos sanitarios.
Por último, esta visión 360 grados también permitirá identificar cuándo será necesario recurrir a la coordinación sociosanitaria, por encontrarse en algún tipo de riesgo, tanto la persona en cuestión como su entorno.
Fases en la atención al paciente
Las fases de la atención al paciente se dividen en los propios servicios que podrá recibir una persona por parte del Servicio Sanitario Nacional:
- La atención primaria, que agrupa a los profesionales de enfermería, médicos de familia y pediatría. El primer nivel asistencial en el que se sigue la evolución del día a día en la salud de una persona, con la mirada puesta en la prevención del desarrollo de patologías o el control de aquellas ya existentes.
- Los servicios de urgencia, que agrupan a especialistas de todas las ramas sanitarias y están centrados en ofrecer una atención puntual ante un caso concreto de necesidad.
- Las especializaciones médicas, en las que los profesionales de cada ámbito de la salud diagnostican, tratan y realizan un seguimiento pormenorizado de la evolución de la patología del paciente asociada a su departamento.
- Los servicios sociosanitarios, que velan por lograr que todos los ciudadanos gocen de las condiciones económicas, sociales y sanitarias necesarias para desarrollarse como individuos dentro de la sociedad.
¿Cómo asegurar la continuidad asistencial a los pacientes?
La continuidad de los cuidados en salud es una labor que interpela a todos y cada uno de los eslabones de la cadena que conforman las fases de la atención del paciente. En este sentido, la coordinación y comunicación entre agentes, así como trabajar para que la información de cada ciudadano esté siempre perfectamente actualizada y sea accesible a los profesionales que requieran acudir a ella, se considera fundamental.
A esto se suma la labor que desarrollan los órganos directivos impulsando políticas, estructuras y elementos que colaboren en el correcto desarrollo de la continuidad asistencial.