Carmen Márquez Vázquez
La educación es un mecanismo para equilibrar las desigualdades sociales. Sin embargo, nuestro sistema educativo muestra procesos de fragmentación y desigualdad que, lejos de garantizar la equidad o movilidad social de los estudiantes, contribuye a reproducir las condiciones sociales de origen.
La Agenda Global de Desarrollo Sostenible 2030 (ODS) entiende la educación como un derecho fundamental de toda la ciudadanía y un factor clave para el desarrollo humano y sostenible de las sociedades. La educación es, por tanto, considerado como un mecanismo para equilibrar las desigualdades sociales y construir sociedades más justas.
A pesar de este reconocimiento, nuestro sistema educativo continúa mostrando importantes procesos de fragmentación y desigualdad que, lejos de garantizar la equidad o movilidad social de los estudiantes, contribuye a reproducir las condiciones sociales de origen y limitan severamente el derecho a una educación equitativa y de calidad para todos y todas.
En la literatura especializada, el fracaso escolar, las altas tasas de repetición o el abandono escolar prematuro se han venido asociando a factores personales o familiares del alumnado. Recientes estudios han puesto de manifiesto cómo estudiantes que proceden de entornos socioeconómicamente adversos logran alcanzar el éxito académico y han evidenciado que el fracaso escolar, lejos de ser un fenómeno natural e intrínseco a determinados perfiles personales del alumnado, se genera y/o permite por un determinado orden escolar.
El próximo 17 de mayo a las 15:00h. (GMT+2) te invitamos a la openclass “El fracaso escolar: una problemática educativa pendiente de resolver”, con la Doctora Carmen Márquez Vázquez
Sabemos que gran parte de estas experiencias de fracaso educativo tienen su origen en la etapa de educación primaria, aunque es durante la transición y el desarrollo de la educación secundaria obligatoria (ESO) donde se fraguan los más relevantes procesos de desenganche y desvinculación escolar. Para tratar de evitar estos procesos, desde hace más de una década se viene aplicando un creciente número de programas y actuaciones educativas con logros significativamente parciales.
Prácticas que facilitan la consecución de los objetivos
Por tanto, resulta urgente la adopción de medidas que garanticen el acceso, aprendizaje y participación de todo el alumnado en sus centros educativos y en igualdad de condiciones, tal y como se establece desde la educación inclusiva. Para ello, se han identificado algunas prácticas que facilitan la consecución de estos objetivos: garantizar los apoyos suficientes para el alumnado con discapacidad o extranjero dentro del aula, implementación de metodologías de aprendizaje y evaluación diseñadas desde los principios del diseño universal.
Además, potenciar y difundir las buenas prácticas relacionadas con la colaboración docente y la innovación educativa, participación de la familia y resto de agentes sociales en los órganos de participación escolar o el fomento de las investigaciones sobre evaluación de las políticas educativas preventivas de las desigualdades. Estas deben ser algunas de las acciones, como punto de partida, de la configuración de un nuevo contexto escolar más justo y equitativo para minimizar el fracaso escolar.
El 17 de mayo a las 15:00 horas abordamos la openclass “El fracaso escolar: una problemática educativa pendiente de resolver”, con la Doctora Carmen Márquez Vázquez. Para tratar este tema, analizaremos algunas de sus definiciones y las posibles causas facilitadoras que las principales investigaciones de nuestro país han ido desarrollando. En segundo lugar, nos detendremos en un análisis de las políticas y medidas educativas que se ha desarrollado en nuestro contexto educativo como respuesta a la diversidad del alumnado. Por último, trataremos de ofrecer algunos datos sobre el resultado de estas medidas de atención al alumnado vulnerable están generando.