UNIR Revista
La igualdad de oportunidades en la educación garantiza el acceso universal a una enseñanza de calidad. Apostar por este modelo contribuye a contar con sociedades más justas.
La educación es fundamental en cualquier sociedad, ya que influye en el avance y progreso de las personas que la integran. Por ello, es clave garantizar la igualdad de oportunidades en la educación para evitar la discriminación por diferencias de sexo, cultura o condición social.
Las personas que reciben una buena educación tienen acceso a un mejor empleo y a otro tipo de beneficios sociales y personales. Por eso, es fundamental que las instituciones educativas trabajen para que todo el mundo reciba una educación de calidad y con un trato igualitario.
La igualdad de oportunidades consiste en asegurar que todos los centros educativos estén capacitados para ofrecer una enseñanza de calidad que brinde las mismas oportunidades a todos los estudiantes, independientemente de sus capacidades, características físicas, sexo, clase social o contexto socioeconómico.
Beneficios de ofrecer igualdad de oportunidades en educación
Adaptar el sistema educativo para promover una enseñanza de calidad, inclusiva y equitativa es de suma importancia para conformar una sociedad avanzada y más justa.
Además, la importancia de la igualdad de oportunidades en educación radica en su capacidad de transformación como agente de cambio. Es decir, la implementación de la igualdad de oportunidades en las aulas facilita que en el futuro, al tener una población educada, exista más rentabilidad económica y, por ende, una mejor calidad democrática.
Los niveles de educación están relacionados con la salud y la riqueza de una sociedad. Por ello, permitir el acceso a la enseñanza en igualdad de trato y oportunidades es sumamente relevante porque cuanta más educación adquiera una persona, más oportunidades tendrá de realizarse personal y profesionalmente.
La educación es un bien valioso que genera ventajas en todas las sociedades donde está presente. Por ello, facilitar la educación a todas las personas sin importar su condición social, características o cultura es básico y fundamental.
Hay más beneficios derivados de garantizar una verdadera igualdad de oportunidades, que se consigue atendiendo y respetando la diversidad de los alumnos y adaptando la escuela a sus necesidades. Por ejemplo: facilita que los estudiantes logren sus objetivos, les asegura un futuro mejor al estar más y mejor instruidos, permite la diversificación y crecimiento intelectual y personal de las comunidades y también, promueve el desarrollo de un mundo más sostenible y equilibrado.
La importancia de promover una educación accesible e inclusiva está representada por todas las ventajas que reporta. De este modo, la igualdad de oportunidades debería estar presente en todas los centros educativos.
¿Cómo garantizar la igualdad de oportunidades en la educación?
El contexto socioeconómico o la cultura son algunas de las circunstancias que influyen de manera notable en la calidad de la educación, el rendimiento académico y hasta en la trayectoria educativa de determinados estudiantes. Dada su relevancia, se aconseja llevar a cabo algunas acciones que son clave para garantizar que el alumnado tenga las mismas oportunidades educativas y desarrollar su potencial:
- Aprendizaje temprano. Es muy importante proporcionar el acceso a la educación a toda la población infantil para consolidar el aprendizaje en edades tempranas e implementar mecanismos que sirvan para consolidar un sistema educativo sólido.
- Educar para conseguir el máximo potencial. En las instituciones educativas se debe trabajar para lograr el éxito educativo de los estudiantes, ofreciéndoles apoyo cuando sea necesario y adaptándose a los niveles y capacidades de cada alumno.
- Disposición de recursos. Se ha de proveer de los recursos adecuados a todos los centros educativos, tanto humanos como materiales, sin distinción del contexto socioeconómico, sexo o cultura del alumnado. Este punto es posible siempre y cuando los profesionales de la educación y familias sepan cómo proceder y tengan acceso a la información adecuada.
- Autonomía para los centros educativos. Las escuelas deben tener libertad para implementar proyectos que se adapten a sus alumnos, sus necesidades de aprendizaje y el entorno que les rodea. Esta autonomía debe llevar consigo una evaluación que revise de forma centralizada las cuentas y el proceso de aprendizaje para evitar que determinados centros se queden atrás.
- Formación docente. El total de profesionales que trabajan en la institución educativa debe contar con una formación adecuada para ofrecer a los estudiantes una educación equitativa basada en la igualdad de oportunidades. Es necesario que conciencien a los alumnos sobre la importancia que tiene este tipo de prácticas y lleven a cabo actividades que fomenten estos procesos inclusivos.
Esta clasificación representa las claves para lograr que se garantice la igualdad de oportunidades en educación y permitir que los alumnos y la sociedad en general consigan un buen rendimiento en el ámbito educativo.
El papel del educador social en materia de igualdad en la educación
La figura del educador social es esencial para implementar la igualdad de oportunidades en las escuelas. Principalmente, porque este profesional es el encargado de intervenir en la realidad sociocultural del alumnado para mejorarla, garantizar el acceso a la educación, sin importar su condición social o contexto personal, y trabajar para la integración total del alumnado.
Este experto velará para que los centros educativos pongan a disposición de los alumnos una educación de calidad que ofrezca las mismas posibilidades a todos ellos. El educador social colaborará con otros profesionales que conforman la institución con el fin de adaptar los programas para evitar que se produzcan situaciones discriminatorias y se asegure la igualdad de oportunidades y se logre una educación más equitativa.
Para ejercer como educador social e implementar estas políticas basadas en la igualdad se ha de contar con una formación superior. Al respecto, el Grado en Educación Social online de UNIR capacita al estudiante a trabajar en cualquier ámbito donde se precise de servicios profesionales socioeducativos. Además, gracias a esta titulación el futuro educador social contribuirá a mejorar el bienestar social, la integración de las personas y a que estas puedan acceder a una educación de calidad basada en la igualdad de oportunidades.