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El modelo de gestión de casos es un proceso que consiste en optimizar la intervención social para proporcionar eficazmente servicios a individuos o grupos con necesidades complejas.
En el ámbito del trabajo social existen diferentes métodos de intervención social. Un buen ejemplo de ello es el denominado modelo de gestión de casos, centrado en evaluar necesidades, planificar intervenciones, coordinar recursos y evaluar resultados para garantizar una calidad asistencial óptima y mejorar la calidad de vida de aquellas personas con necesidades complejas.
Especializarse en esta área es una opción útil para aquellos que quieran dominar este y otros modelos de intervención social. Al respecto, UNIR ofrece el Máster en Intervención Social online, una titulación para convertirse en un experto capaz de desarrollar soluciones efectivas a problemas que pueden generar casos de exclusión social, discriminación o desigualdad.
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¿Qué es el modelo de gestión de casos?
El modelo de gestión de casos es un procedimiento centrado en la coordinación de recursos para proporcionar los servicios apropiados a las personas dependientes o que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
El propósito de la gestión de casos en trabajo social consiste en lograr que los individuos con problemas sociales complejos y múltiples reciban lo que requieren en el tiempo y calidad adecuada. Así, este método trata de promover una intervención más eficiente y eficaz, optimizando el proceso, promoviendo la integración de servicios y maximizando el bienestar de las personas con las que se trabaja.
En el modelo de gestión de casos se realiza un seguimiento constante de la implementación del plan, ajustándose según sea necesario y evaluando los resultados alcanzados.
Bajo esta metodología, se involucra a profesionales de diversas disciplinas, como trabajo social, salud, educación y empleo, para abordar las complejidades de la situación del individuo o sus familiares.
En el ámbito de la salud, destaca la labor de la enfermera gestora de casos, encargada de garantizar la atención continuada de los enfermos aplicando este modelo de intervención sociosanitaria. A su vez, estos profesionales sanitarios siguen, en la mayoría de los casos de pacientes crónicos, un modelo de gestión conocido como pirámide de Kaiser.
El modelo de gestión de casos en trabajo social
Existen diferentes modelos y métodos de intervención en trabajo social. En el caso de la gestión de casos, se busca que el trabajador social brinde una intervención más eficaz y eficiente. Esto se consigue gracias a la optimización y coordinación de recursos, la evaluación de forma individual y la planificación y adaptación de intervenciones a las necesidades de cada persona.
Bajo esta metodología el trabajador social se encarga de garantizar que el individuo recibe los servicios que permitirán solventar los problemas sociales que presenta. A su vez, este profesional debe ajustar su atención y apoyo al grado de déficit que tenga el usuario con el fin de incentivar su autonomía, independencia y máxima implicación. Además, hay que asegurar la confidencialidad y privacidad del individuo durante todo el proceso.
Con la gestión de casos, el trabajador social tiene que contar con el conocimiento total de los costes del servicio, la disponibilidad de los mismos y los límites presupuestarios.
¿Cómo aplicar el modelo de gestión de casos?
La aplicación del modelo de gestión de casos en intervención social implica una serie de pasos y estrategias para abordar las necesidades complejas de los individuos.
- Se debe comenzar con una evaluación del caso para identificar las necesidades, los problemas sociales y la situación de vulnerabilidad que posea la persona, así como su entorno familiar.
- Se continúa un proceso en el que se coordinan y organizan los recursos necesarios para abordar los problemas evaluados y satisfacer las necesidades del usuario de forma eficaz.
- Después, se planifican la intervención y la toma de decisiones, especificando las prioridades. Tras este paso, es el momento de intervenir bajo el modelo de gestión de casos.
- Por último, es imprescindible que el trabajador social realice un seguimiento para asegurarse de que se cumple con la atención asistencial durante este modelo de intervención social.
El modelo de gestión de casos puede aplicarse, por ejemplo, en individuos o grupos en riesgo de exclusión social por falta de ingresos, ausencia de escolarización, dificultades con el idioma, etc.
En definitiva, este método es un procedimiento eficaz para garantizar que estas personas o colectivos reciben una asistencia integral adecuada y adaptada a sus necesidades, optimizando así el proceso de intervención social.