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Si estudias o has estudiado Derecho y quieres conocer las salidas laborales en el extranjero, te explicamos cómo ejercer la abogacía en la Unión Europea.
La Unión Europea tiene una normativa propia para ejercer la abogacía dentro de sus Estados miembros, facilitando la movilidad de los profesionales del Derecho. Para trabajar como abogado en Alemania, Francia, Italia u otro país europeo el primer requisito que se debe cumplir es la inscripción en un colegio oficial de abogados en España. Para colegiarse como abogado en España se requiere:
- Contar con el título de licenciatura o grado en Derecho.
- Superar el máster en Abogacía que permita preparar y aprobar el examen de acceso de esta profesión y que convoca el Ministerio de Justicia.
- Solicitar el acceso como ejerciente en alguno de los colegios oficiales.
Requisitos para ser abogado en la Unión Europea
La Directiva 98/5/CE, del Parlamento europeo y del Consejo, de 16 de febrero de 1998, es la normativa encaminada a facilitar el ejercicio de la profesión de abogado en un Estado miembro diferente a aquel en el que se obtuvo el título. En su artículo 3 se establece el requisito de “inscribirse ante la autoridad competente de dicho Estado miembro”. Un abogado español que desee ejercer su profesión en otro país miembro de la Unión Europea deberá, además, cumplir una serie de requisitos en función del país que elija pero que, en general, son:
- Ser ciudadano reconocido de un Estado miembro.
- Poseer la titulación o grado que acredite los conocimientos así como haber superado el examen nacional para ejercer la abogacía.
- Estar colegiado en España.
- Acreditar un conocimiento avanzado del idioma o idiomas requeridos en el país elegido.
El procedimiento en España sirve como ejemplo del proceso que un licenciado o graduado en Derecho podría seguir en otros países miembro de la Unión.
Ser abogado en Alemania
Los abogados alemanes reciben la misma formación que los jueces: un grado de cuatro años y dos exámenes específicos (el de acceso a la abogacía y el referendariat, para el cual se requiere un período previo de prácticas). La abogacía en Alemania se organiza en 27 colegios regionales, además del Colegio de Abogados del Tribunal Supremo de lo Civil y Penal. En algunos “lánders” los abogados pueden ejercer también de notarios, una diferencia respecto a la legislación española.
Ser abogado en Francia
En Francia para ser abogado también es necesario estudiar el Grado en Derecho, realizar el máster para el ejercicio de la Abogacía (denominado Máster 2) y superar el examen de acceso al Centro de Formación de los Abogados (CAPA), para lo que se dispone de un máximo de tres convocatorias. Los graduados y licenciados en España, excepto si han ejercido en Francia durante un mínimo de ocho años, deberán superar ante el Consejo Nacional de la Abogacía una serie de pruebas para determinar que están capacitados para ejercer conforme a las exigencias de la legislación francesa.
Ser abogado en Portugal
En Portugal, además de la carrera de Derecho, también es necesario superar un examen para ejercer la abogacía. Para ello es posible elegir entre dos opciones: realizar un máster y prácticas en un bufete o realizar únicamente las prácticas.
Abogados europeos que ejerzan en España
Los ciudadanos europeos que deseen venir a España a ejercer como abogados tiene dos vías, como explica el Consejo General de la Abogacía Española:
Reconocimiento de cualificaciones
Procedimiento para reconocer el título de origen mediante un examen de aptitud (y un posible periodo de prácticas) para lo cual se exige la colegiación en la autoridad competente de su Estado de origen y ser ciudadano de un Estado miembro. Para acceder a este reconocimiento se debe solicitar al Ministerio de Justicia el reconocimiento del título de graduado o licenciado en Derecho obtenido en otro país de la Unión Europea.
Este procedimiento permite ejercer como abogado en España por cuenta propia, por cuenta de otras personas físicas o jurídicas, en las mismas actividades que un abogado español y sin ningún tipo de limitación. Es la vía más rápida de acceso a la abogacía en España para aquellos ciudadanos europeos que tienen un alto grado de conocimiento del idioma.
Establecimiento permanente
Es el proceso de inscripción como abogado de la UE en el registro especial de los Colegios. El requisito previo es también la colegiación o registro ante la autoridad competente en su Estado de origen. Este procedimiento consta de dos fases, la Inscripción, y tras tres años de ejercicio efectivo y regular de la profesión, la plena Incorporación a la profesión. Los “abogados europeos inscritos” pueden ejercer en España por cuenta propia, por cuenta de otras personas físicas o jurídicas, en las mismas actividades que un abogado español, pero durante los tres años que dura este primer periodo no podrán realizar la defensa de clientes ante juzgados y tribunales sin el concierto con un abogado español ni inscribirse en el turno de oficio. Después de tres años de ejercicio efectivo puede solicitar la incorporación plena y, si le es concedida, no necesitará tramitar el reconocimiento de su título y quedará integrado en la profesión en la misma calidad que los abogados españoles.
A los “abogados inscritos” se les aplicarán las mismas normativas profesionales y códigos deontológicos que deben cumplir los abogados con título español. Es importante tener en cuenta que para trabajar como abogado en otros países de la Unión Europea hay varias opciones. Además del ejercicio libre de la abogacía, para el que se puede solicitar la inscripción en los respectivos colegios profesionales y cumplir unos requisitos particulares en cada país, se puede postular a puestos de abogado en el sector privado. Además, los organismos e instituciones de la propia Unión Europea abren posiciones para abogados y licenciados o graduados en Derecho a los que se puede acceder como ciudadano europeo, otra opción interesante a evaluar si se desea trabajar como abogado fuera de España.