José Luis Ros-Medina
Si quieres liderar la transformación digital del sector público y convertirte en un experto en IA aplicada a la Administración, el momento de actuar es ahora. El futuro de la gestión pública está en juego y quienes lo harán posible se están formando hoy.
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Llevamos años inmersos en una constante revolución tecnológica protagonizada por la inteligencia artificial. Actualmente, sin darnos casi cuenta, se está aplicando a muchos de los servicios y recursos digitales que estamos usando. También en la Administración pública esta revolución se está haciendo presente y ya no es cosa del futuro, sino una carrera constante en la que las administraciones de todo el mundo compiten por mejorar sus servicios amparándose en desarrollos tecnológicos que emplean en mayor o menor medida esta herramienta.
Sin embargo, su implementación en el sector público plantea interrogantes fundamentales: ¿cómo asegurar que las decisiones automatizadas sean transparentes y equitativas?, ¿cómo evitar los sesgos algorítmicos que podrían generar graves desigualdades?, ¿qué papel deben jugar los servidores públicos en este nuevo ecosistema digital?
En un contexto como el actual, la clave ya no está en la tecnología, sino en el factor humano, en cómo preparar a los trabajadores públicos para adaptarse a este reto y desarrollarlo con garantías.
Un cambio de paradigma en la gestión pública
El modelo tradicional de administraciones públicas se encuentra actualmente en plena transformación o, incluso, podríamos decir “superación”. La denominada Administración 4.0 no sólo se basa en la digitaliación de sus procesos, reduciendo los tiempos de espera de la ciudadanía y los costes administrativos, sino que va mucho más allá: se están transformando las relaciones entre el Estado y la sociedad, basándose en una automatización inteligente de procesos, gestión masiva de datos y rendición de cuentas en tiempo real.
En muchos países del mundo, tanto a nivel nacional como subnacional, estas transformaciones están sucediendo mientras lees este artículo. Países como Estonia han logrado una potente automatización de servicios basada en gran parte en la inteligencia artificial, generando lo que se ha venido a denominar como “servicios personalizados”, dando soluciones específicas y automatizadas a sus ciudadanos, sin ni siquiera necesidad de que estos las soliciten.
En España, por poner otro ejemplo, la Agencia Tributaria ha mejorado sustancialmente sus procedimientos de vigilancia del fraude fiscal gracias a la introducción de la IA, reduciendo fuertemente los costes administrativos de dichas investigaciones y mejorando la eficacia en la detección de irregularidades.
En América Latina, gobiernos de México, Colombia, Chile o Uruguay, están desarrollando soluciones tecnológicas avanzadas basadas en IA. Ejemplos que reflejan una clara tendencia glogal hacia la implantación cada vez más importante de estas soluciones.
Colombia: un caso de éxito en formación e innovación pública
El avance de la IA no sólo requiere capacidad de computación y elementos tecnológicos, sino que en mayor medida todavía, está y estará limitado por la capacidad humana para aplicar estas herramientas con garantías. El reto más importante no es, por tanto, el tecnológico, aunque sea paradógico, el reto más importante es humano. Generar la capacidad humana y el talento necesario para aplicar con garantías todas estas transformaciones, especialmente en lo referente a la Administración pública.
Un caso de éxito sin duda en este enorme reto es el caso de Colombia, donde UNIR, como universidad 100% online y referente en formación digital, ha tomado un papel protagonista en la capacitación de quienes impulsan la transformación en el sector público.
Recientemente tuve la suerte de poder impartir una conferencia sobre estos temas en un acto organizado por el Departamento Administrativo de la Función Pública de Colombia y UNIR, al que asistieron más de 800 secretarios generales y jefes de talento humano de todos los ministerios colombianos. Esa misma semana también hablé de esos temas en el Parlamento Andino y en la Contraloría General de la República de Colombia.
Todos estos eventos, junto al fuerte impulso de UNIR en el país, reflejan el formidable interés en la formación y en la digitalización y aplicación de la IA en el sector público que se está produciendo en Colombia. Cada vez hay más demanda de estos temas y de una formación seria y profesional que forme para poder manejarlos.
Gobierno abierto e inteligencia artificial: una alianza esencial
Uno de los principales potenciales de la inteligencia artificial en el sector público es su enorme capacidad para fortalecer los principios del gobierno abierto. La combinación de los datos abiertos, la automatización de procesos, la integración de múltiples fuentes de datos o el análisis predictivo, pueden formar un círculo virtuoso a favor del desarrollo tanto de gobiernos y administraciones más abiertas, así como más inteligentes.
El uso de algoritmos o la aplicación de ‘chatbots’ muestran cómo la IA puede ser una herramienta poderosa para mejorar la transparencia y la participación ciudadana.
Ejemplos como el uso de algoritmos de machine learning para auditar contratos públicos en tiempo real o la aplicación de chatbots para ampliar el acceso ciudadano a la información muestran cómo la IA puede ser una herramienta poderosa para mejorar la transparencia y la participación ciudadana.
Sin embargo, también existen riesgos muy importantes en la aplicación de estas herramientas: la opacidad algorítmica nos puede conducir a decisiones injustas e incomprensibles, los datos sesgados pueden invisibilizar algoritmos que escondan discriminación y todas estas herramientas también se pueden emplear para controlar y manipular a nuestras sociedades. Como cualquier herramienta, la regulación, la formación y la ética son fundamentales para poder desarrollarse con garantías.
UNIR forma a los líderes de la Administración pública del futuro
Si la IA ya está revolucionando la Administración pública, la gran pregunta es: ¿están los profesionales del sector público preparados para estos cambios? La respuesta como tantas veces depende en su mayor parte de la formación y actualización de conocimientos y habilidades.
En UNIR sabemos que no basta con que las administraciones públicas inviertan en tecnología, sino que es fundamental invertir en quienes deberán implementarla, ya que mientras el crecimiento tecnológico es exponencial, el desarrollo de las capacidades humanas será nuestro principal limitante de expansión y aplicación de innovación. Por eso, el Máster Universitario en Administración Electrónica y Gobierno Abierto está diseñado para dotar a los profesionales de las herramientas necesarias para liderar la transformación digital de las instituciones.
En este programa no sólo se proporciona formación sobre IA, big data o blockheim, sino que se ofrece una visión completa de la digitaliación de las administraciones y de la aplicación de las reformas propias del gobierno abierto, como la transparencia, la participación y la colaboración. Gobierno abierto y gobierno inteligente deben ser dos caras de la moneda de la transformación pública, para que ésta tenga realmente garantía de generar valor público para toda la sociedad.
La oportunidad ya está aquí, ¿quién liderará el cambio?
La inteligencia artificial ha llegado para quedarse y su integración en la Administración pública ya no es una cuestión de “si” ocurrirá, sino de “cómo” y “quiénes” la implementarán. El desafío ya no es tecnológico, sino humano: formar a quienes liderarán esta transformación.
Si quieres liderar la transformación digital del sector público y convertirte en un experto en IA aplicada a la Administración pública, el momento de actuar es ahora. El futuro de la gestión pública está en juego y los líderes que lo harán posible se están formando hoy. Descubre el Máster Universitario en Administración Electrónica y Gobierno Abierto de UNIR y conviértete en uno de ellos.
(*) José Luis Ros-Medina es coordinador académico y director ejecutivo del Máster en Administración Electrónica y Gobierno Abierto de UNIR.
- Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales
- Facultad de Derecho