UNIR Revista
El profesional responsable de analizar todos los indicios de un crimen, entrevistando testigos y recopilando pruebas que permitan dar con el culpable, es el investigador criminal.

Si te preguntas qué estudiar para ser investigador criminal, asegúrate primero de tener claro qué hace exactamente este profesional. Por ejemplo: reunir pruebas, interrogar a testigos y sospechosos, preparar las evidencias para el juicio, colaborar con los forenses… con el objetivo final de resolver crímenes.
¿Suena bien? Pues échale un vistazo al Grado en Criminología online de UNIR, una titulación que facilita el estudio y análisis de todos los elementos que componen esta ciencia: el delito, el delincuente, la víctima y el entorno social del hecho delictivo. La carrera tiene una duración de cuatro años y se compone de asignaturas como Criminología, Psicología, Derecho o Sociología. Además, como optativas encontramos Anatomía y Toxicología, entre otras.
Tras cursar el grado y con tal de especializarse, lo habitual es seguir formándose, por ejemplo con el Máster en Análisis de Conducta Criminal online de UNIR, que ofrece formación para la elaboración de informes forenses criminológicos.
Para el investigador criminal también es interesante contar con formación en sociología criminal, de manera que sepa analizar la medida en que los sentimientos, pensamientos y acciones de una persona se ven afectados por los de su grupo de interacción.
¿Qué es un investigador criminal?
Se trata del profesional que estudia los hechos delictivos, así como el entorno de las víctimas, aplicando las técnicas que domina para extraer la máxima información del lugar en el que se comete el crimen.
Así pues, el investigador criminal lleva a cabo la inspección e indagación de un delito, reuniendo todo tipo de pruebas que conduzcan al esclarecimiento de lo ocurrido y a la detención de los responsables.
Cuando se encuentran inmersos en medio de una investigación criminal, estos profesionales deben enfrentarse también a horarios de trabajo irregulares, pudiendo ser llamados, además, para dar su testimonio como expertos en juicios penales.
Este profesional estudia el hecho delictivo, pero también al delincuente, sus motivaciones… Por eso, además de contar con la formación requerida mencionada arriba, un buen investigador criminal debe poseer un perfil característico que le permita desarrollar su labor de forma eficiente.
¿Cómo ser investigador criminal?
Para desempeñar de manera exitosa sus tareas, el investigador criminal debe contar con ciertas habilidades que pasan por:
- Poseer grandes dotes de observación. Este profesional necesita tener un sexto sentido para ver cosas que a otros se les escapan y detectar indicios que permitan obtener información procesable.
- Saber controlar las emociones propias. Las situaciones que debe encarar un investigador criminal pueden provocar ansiedad, pena, ira, frustración y una larga lista de sentimientos que no deben dejar traslucir si quieren realizar bien su trabajo. Por lo tanto, es importante que sepan mantener la calma y afrontar situaciones desagradables, así como transmitir seguridad.
- Ser honesto. No puede dejarse influir por sus sesgos o prejuicios personales, sino que debe mantener su imparcialidad y juzgar los hechos con una perspectiva meramente científica.
- Contar con buena expresión, tanto oral como escrita. Ha de poder explicar con claridad todos sus descubrimientos ante un tribunal y también debe redactar los informes pertinentes de manera correcta.
- Ser ordenado y sistemático, con tal de afrontar los procedimientos con eficacia.
- Ser empático y comprensivo con las víctimas.
- Ser eficaz, tanto en solitario como en equipo.
- Tener la suficiente capacidad de adaptación para trabajar con métodos diversos que pueden no ser los ordinarios.
¿Qué hace un investigador criminal?
A menudo el cine y la literatura ofrecen una imagen del investigador criminal que dista bastante de la realidad. En cuanto a las tareas que hace un investigador criminal en el desempeño de su actividad, cabe destacar las siguientes:
- Examinar el escenario del delito. El estudio minucioso de todos los detalles que le dan contexto a un crimen, es una de las funciones más relevantes del investigador criminal.
- Encontrar pruebas y evidencias. Este profesional debe contar con la capacitación y las habilidades necesarias para entender cómo se construye un caso y qué necesita para obtener las suficientes evidencias que le permitan encausar a los responsables del delito.
- Realizar entrevistas. Interrogar a los testigos de un delito, a los familiares y allegados de las víctimas o a los posibles acusados de haber cometido un crimen, es una de las actividades más delicadas del investigador criminal. Por ello, es muy importante que cuenten con formación en técnicas de interrogatorio.
- Elaboración de las periciales forenses. Otra de las tareas fundamentales que corren por cuenta de este experto es la redacción del informe criminológico, que permite a jueces y tribunales tener una visión global del hecho delictivo al conocer en profundidad los detalles de su perpetración y de los daños causados.
- Diseño del perfil criminal. Como parte de los cometidos del investigador criminal se encuentra la comprensión del comportamiento criminal para poder elaborar los perfiles. Por eso, la formación en psicología criminal es muy valorada en estos profesionales.
- Asesorar a las autoridades. A lo largo de todo el tiempo que dure la investigación criminal, este experto puede realizar tareas de asesoramiento en cuanto al examen de las evidencias, la prevención de futuros crímenes o sobre el comportamiento delictivo.
Todas las funciones de estos profesionales tienen como finalidad poder llevar ante los tribunales a los delincuentes con las garantías de que se les pueda juzgar con pruebas concluyentes.
¿Dónde puede trabajar un investigador criminal?
Se trata de un especialista que puede ejercer, por ejemplo, de:
- Investigador policial
- Consultor criminológico en ámbitos diferentes, como medios de comunicación o instituciones
- Director de consultoría legal y criminológica
- Docente universitario
- Asesor de abogados
El investigador criminal realiza un trabajo determinante para garantizar que se imparta justicia y que los delincuentes rindan cuentas por los actos que han cometido. Gracias a su destreza para recabar pruebas, analizar escenarios del crimen y seguir los indicios disponibles, es posible descubrir la verdad y presentar casos sólidos ante los tribunales de justicia.
A pesar del sacrificio personal que requiere este trabajo, ser investigador criminológico también reporta muchas satisfacciones, no solo por contribuir a que los culpables cumplan con su condena, sino por el hecho de permitir a quienes han sufrido una pérdida trágica cerrar, en cierto modo, sus heridas.