UNIR Revista
La exalumna de UNIR cuenta su experiencia en la universidad y cómo ahora ha encontrado un trabajo que la llena totalmente, y en el que, gracias a la formación práctica y las herramientas adquiridas, ha crecido como docente.
Aterrizó en UNIR por el boca a boca, después de terminar el Grado en Educación Infantil y dedicar un tiempo a estudiar unas oposiciones. “Mi hermano ya había hecho un máster aquí y quedó muy contento, con lo que me dije: ¡pues venga, qué mejor referente que él!”, dice Andrea Freire, que acaba de terminar el Máster Universitario oficial en Educación Bilingüe en la Universidad Internacional de La Rioja.
Hacer un máster era una parte fundamental de su plan de vuelo profesional. “Siempre lo había tenido en el horizonte, pero lo fui posponiendo durante varios años mientras estuve estudiando unas oposiciones”, comenta. Antes empezó Psicología, pero pronto se dio cuenta que su vocación era otra, la educación infantil, que fue al final en lo que terminó graduándose. Tras terminarlo se puso a trabajar en una escuela y ahí también volvió a virar para cambiar el rumbo, “más hacia el cole de mayores”, porque siempre le gustaron los niños un poco más crecidos que los de 0 a 3 años, que “al final son bebés y no ves muchos cambios en ellos a lo largo del curso”.
Vocación por la enseñanza
Le gusta educar, enseñar, la parte más académica de un maestro, y siempre ha sentido debilidad por los idiomas, un motivo principal para reorientar su carrera y llevarla finalmente a buen puerto. “Me gustan los idiomas, se me dan bien y aposté por el inglés porque ofrece más posibilidades de desarrollarte profesionalmente. Y como nunca he tenido la oportunidad de vivir y trabajar en otros países, estudiar el Máster en Educación Bilingüe me pareció también una buena forma de iniciación. A lo mejor no ahora, pero en el futuro no me importaría nada vivir fuera de España”.
Esta educadora con espíritu aventurero, que ha dedicado parte del verano a trabajar en un campamento urbano en A Coruña, buscaba una universidad online que le permitiese, precisamente, compaginar el máster y su trabajo con esos niños más mayores. Y se matriculó en UNIR justo al acabar la pandemia después de comprobar que la formación en línea era tan buena como la presencial, pero mucho más flexible y adaptable a su vida personal y profesional. “Me ayudó mucho su metodología porque trabajaba. Además, los profesores me dieron todo tipo de facilidades para adaptar los contenidos, las actividades, los trabajos y los exámenes del máster a la formación que yo tenía y mi ámbito de trabajo como maestra de educación infantil”, destaca Freire.
Formación práctica
Aprendía muchos conocimientos en el máster y después los aplicaba en su día a día como profesora. También ahora en el colegio bilingüe en el que trabaja, que es el mismo en el que hizo sus prácticas. “Muchas veces los padres te preguntan cosas sobre sus hijos, que por qué ahora están hablando raro o por qué no hablan tanto como antes o si hablan en casa de forma distinta o están tardando más en hablar. Gracias al máster, ahora tengo unos conocimientos y unas herramientas que me permiten explicarles por qué está pasando eso y cómo es el proceso. Y noto como las familias agradecen esas explicaciones sobre las razones y motivos por lo que sucede todo eso en el cerebro de sus hijos”.
La exalumna de UNIR asegura que la carga de trabajo durante el máster fue la adecuada, “ni más ni menos, al menos para mí”. Una valoración en la que tuvo que ver bastante, según su experiencia, la ayuda constante de su mentora. “Me ayudó muchísimo, era muy simpática y súper atenta. En un momento dado, por ejemplo, tuve que prorrogar mi trabajo de fin de máster y estuvo muy pendiente constantemente. Fue una maravilla. Me ayudaba a clarificar las cosas y siempre estaba ahí. Me decía: ‘Oye, este día. Recuérdalo. Sé que soy pesada…’. Pero no, al contrario, tengo siempre mil cosas en la cabeza y necesito un Pepito Grillo que me eche una mano”, recuerda.
Psicología bilingüe
Durante el máster, Freire mostró un interés especial en “todas aquellas asignaturas relacionadas con los procesos psicológicos que están detrás de los cerebros de las personas bilingües. Quizás por quitarme esa espinita que tenía clavada después de haber estado un tiempo estudiando Psicología”. Tanto es así, que ya piensa en profundizar en esta materia en el futuro.
También destaca el alto nivel práctico del máster, algo que considera muy importante especialmente si estás trabajando. “La teoría está muy bien, pero, al final, en tu día a día lo que necesitas es la práctica, ver qué recursos funcionan y cuáles no. Probar. Las asignaturas relacionadas con actividades, ideas y prácticas reales son a las que te agarras realmente cuando estás en el aula con todo el ruido que hay alrededor”.
Andrea realizó sus prácticas externas y fue contratada en Coruña British International School, un centro educativo privado e internacional situado en A Coruña. Este centro educativo sigue el English National Curriculum, al tiempo que cumplen todos los requisitos educativos españoles. Ofrecen a los estudiantes una educación individualizada de alta calidad, con atención especial para cada alumno.
Especializarse en educación bilingüe, sin dejar de trabajar
El Máster Universitario oficial en Educación Bilingüe de UNIR, impartido totalmente en inglés y que suma puntos en las oposiciones, prepara para adaptarse a las necesidades concretas de los centros de educación bilingüe, tanto públicos como privados.
Con una orientación muy práctica y totalmente actualizada, este máster 100% online enseña las mejores estrategias y herramientas para impartir asignaturas no lingüísticas en un segundo idioma mediante la utilización de la metodología CLIL o AICLE.
Serás capaz de impartir y desarrollar los contenidos propios de cada asignatura a la vez que desarrollarás las habilidades lingüísticas de tus alumnos, especializándote en una de las áreas más demandadas del sector educativo. Es el único posgrado oficial que incorpora formación específica sobre la neuroeducación aplicada al bilingüismo.