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Una buena gestión del tiempo, la constancia y un ambiente adecuado contribuyen a superar las pruebas de la universidad. También son importantes los autocuidados como el deporte, la meditación y una alimentación saludable.
Estudiar día a día, repasando lo aprendido en clase, y no dejar para el último momento el aprendizaje de toda la materia es una práctica muy recomendable en cualquier nivel educativo. Sin embargo, al llegar a la universidad, es posible sentir cierto vértigo y falta de adaptación al nuevo sistema que pueden poner en peligro la consecución de buenos resultados. Por ello, es conveniente tener claro cómo estudiar para un examen de universidad con la finalidad de sacar el máximo rendimiento al tiempo invertido.
Existen mil y un consejos sobre cómo estudiar para un examen en la universidad, así que cada cual debe elegir aquellos que mejor se adapten a sus preferencias y forma de ser. Hemos recopilado algunos de los mejores consejos para preparar un examen universitario:
- Identificar las ideas más relevantes.
- Sintetizar la información y hacer esquemas.
- Leer en voz alta.
- Pensar posibles preguntas y preparar las respuestas.
- Eliminar las distracciones en el tiempo dedicado al estudio.
- Realizar los descansos necesarios para afrontar las jornadas de trabajo en el mejor estado, tanto físico como mental.
Más allá de los exámenes, si se está estudiando a distancia, también es recomendable seguir consejos para estudiar online, pues esta modalidad implica un compromiso mayor. Sea como fuere, estudiar en la universidad requerirá, sin duda, dedicación y esfuerzo, pero no tiene por qué resultar una tarea imposible si se adoptan los métodos de estudio adecuados.
¿Cómo estudiar para un examen tipo test?
Los exámenes tipo test pueden representar una dificultad añadida, puesto que sus múltiples opciones suelen crear confusión y, además, no es posible argumentar las respuestas, como sí concurre en las pruebas de exposición. Por ello, es necesario tener en cuenta ciertas recomendaciones a la hora de preparar estas evaluaciones.
Estos son algunos consejos sobre cómo estudiar para un examen tipo test:
- Conceptos clave. Identificar la información más relevante resulta mucho más importante que en un examen donde es posible justificar la respuesta. En este caso, es primordial sintetizar los datos, comprender lo fundamental y seleccionar la información clave.
- Práctica. Conseguir exámenes anteriores de la misma materia y realizar simulacros con ellos es una de las mejores maneras de preparar un examen tipo test.
- Comprensión. Es determinante comprender lo que se está estudiando, ya que las preguntas en el test pueden estar formuladas de muy diferentes maneras, por lo que memorizar sin entender no es productivo.
- Esquematizar. Elaborar mapas, esquemas y asociaciones del temario es una tarea muy beneficiosa para afrontar este tipo de exámenes.
- Tarjetas de estudio. Preparar tarjetas que contengan un enunciado por una cara y la respuesta por la otra resulta una excelente herramienta para estudiar y para practicar.
Las claves del estudio en la universidad
Comenzar la formación universitaria conlleva toda una serie de cambios a los que es preciso adaptarse para lograr el objetivo de finalizar los estudios elegidos con buenos resultados.
Estos son algunos de los mejores consejos sobre cómo estudiar en la universidad:
- Ambiente de estudio propicio. Contar con un lugar de estudio que resulte agradable, cómodo, luminoso y práctico es muy recomendable para afrontar de manera productiva el aprendizaje. Cuando el diseño de este ambiente es el adecuado, los estudiantes disfrutan de menos distracciones, ahorran tiempo y su estudio se realiza de manera más eficaz. Por tanto, para obtener buenos resultados académicos es indispensable disfrutar de un espacio que, necesariamente, habrá de emplearse durante muchas horas.
- Gestión del tiempo. Una vez se conocen todas las disciplinas que componen el plan de estudios, es recomendable establecer un calendario de trabajo diario con el fin de llevar al día todas las asignaturas. Puede parecer complicado compaginar el horario de las clases y las tareas adicionales con una rutina diaria de estudio, pero el hecho de organizar el tiempo ayuda a aprovecharlo mejor y a tener los exámenes preparados de forma constante.
- Organización de las materias. A la hora de afrontar el estudio en la universidad es preciso establecer prioridades porque no todas las asignaturas presentan igual grado de dificultad. Por tanto, será preciso hacer hincapié y dedicar más tiempo a aquellas materias que suponen un reto mayor. Empleando más tiempo en ellas, se afrontará el examen con una mayor seguridad y tranquilidad.
- Autocuidados. Cuidar de la salud mental es indispensable en cualquier ámbito de la vida y los estudios universitarios no son una excepción. Además del tiempo dedicado al estudio, para rendir al cien por cien es fundamental alimentarse bien y practicar actividades que permitan desconectar, como hacer deporte, meditar o salir con amigos. Por otro lado, establecer objetivos realistas ayuda a controlar la presión que pueden suponer los estudios universitarios, pero en caso de llegar a sentirse desbordado, siempre se puede acudir a los equipos de apoyo psicológico de los que disponen prácticamente todas las universidades.
- Estudio en compañía. Encontrar un compañero de estudios con las mismas pretensiones e inquietudes puede resultar muy gratificante para compartir horas de trabajo. Aprender en grupo resulta más divertido, al tiempo que se aprovechan los conocimientos y enfoques de los demás compañeros.
- Eliminar distracciones. Tener el móvil lejos, la televisión apagada y evitar los ruidos puede ser determinante para prevenir distracciones y hacer que las horas de estudio resulten más productivas. En el caso de personas que se distraen fácilmente, acudir a una biblioteca para estudiar puede ser una buena opción.
- Constancia. La constancia es la base del éxito en cualquier faceta de la vida y también en el estudio. De nada vale comenzar con mucho ímpetu siguiendo todos los consejos, si al cabo de pocas semanas se abandonan los hábitos. Ser constante en las técnicas de estudio elegidas y mantener las rutinas establecidas determinarán el éxito final de los estudios elegidos.
La constancia y el hábito determinarán en gran medida el éxito académico al llegar a la universidad.