María del Carmen Quiñones Martínez
La educación es un proceso de perfeccionamiento que el estudiante lleva a cabo en un esfuerzo de autogestión y con el apoyo de un profesor. En la sociedad en la que vivimos, la generación del conocimiento es constante. Por ello es importante aprender a manejar la gran cantidad de contenido que existe.
La educación es un proceso intencional de perfeccionamiento que el estudiante lleva a cabo en un esfuerzo de autogestión y con el respaldo de un agente educador. En la sociedad de la información en la que vivimos, la generación del conocimiento es dinámica, ya que se construye de manera constante. Por lo tanto, es importante aprender a manejar la gran cantidad de contenido que existe y que cambia constantemente. Enseñar y aprender a buscar información se ha vuelto indispensable, pues es una herramienta básica para generar aprendizaje.
El aprendizaje se lleva a cabo en dos niveles: el individual, que es personal y sucede de manera interna, y el social, que ocurre dentro de un grupo de personas, es decir, que trabajan en red, por medio de diferentes formas de comunicación y del intercambio de información. Hay que sacar provecho de las ventajas y competencias que se desarrollan en ambos niveles, pues eso nos facilita la autogestión del aprendizaje.
Buscar información, por cualquier medio, es la base para que seamos capaces de dar respuesta a diversas preguntas, debatir sobre temáticas actuales y generar nuevo contenido, al alcance de otros. Para ello, necesitamos contar con datos manera continua, ya sea de fuentes directas, de documentos o de materiales de audio, vídeo, blogs, sitios web, etc.
En la sociedad actual existe una gran producción de información en todas las áreas del conocimiento. Se hace indispensable que estudiantes y docentes desarrollen la habilidad para enriquecer la práctica. Aprender implica hacer y el hacer requiere pensar y reflexionar, ya que la manera de demostrar que sabes algo es llevándolo a la práctica.
Los peligros de la (des)información en Internet
Actualmente, gracias a la existencia de computadoras, teléfonos inteligentes, tabletas y otros dispositivos digitales, es mucho más fácil tener acceso a textos y artículos de cualquier tema. Desgraciadamente, muchos estudiantes dan como verdadera cierta información que resulta ser solamente la opinión personal de alguien que escribe en la web. Para evitar ese tipo de errores, es importante ejercitar el pensamiento analítico y crítico para valorar la calidad y utilidad de la información recabada. Además, hay que evaluar la veracidad, formalidad y credibilidad de cada página de Internet y de los autores que publican y saber usar correctamente los buscadores.
El objetivo principal de enseñar la técnica de búsqueda de información es lograr que los estudiantes gestionen su aprendizaje y sean capaces de producir y compartir nuevos conocimientos. Como docentes, debemos recordar que las habilidades para el manejo de información no se adquieren de manera espontánea, sino que dependen de la ejercitación.
Por lo tanto, es conveniente que, al dejar una actividad que requiera investigación, avancemos paulatinamente en cuanto al nivel de complejidad. Es decir, comenzar por trabajos sencillos e ir aumentando la dificultad para que el estudiante pueda reforzar esta habilidad poco a poco. También hay que practicar la comprensión lectora, respetar los ritmos y estilos de aprendizaje y prestar la ayuda necesaria a fin de que el alumno supere cualquier duda, obstáculo o limitación.
Finalmente, hay que recordar que la información representa un elemento de mucho valor para la investigación, la generación y adquisición de conocimiento. Por ello, todo profesional debe ser selectivo, crítico, activo, y aprender a organizar el contenido con el que trabaja, así como interpretarlo y darle sentido.
- Doble Grado en Maestro en Educación Primaria e Infantil