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Prepararse una oposición puede ser un proceso extenso y en ocasiones solitario. Un proceso que consta de diferentes fases, cada una con sus características y particularidades. En UNIR te ayudamos a que conquistes tu plaza.
Prepararse para una oposición puede ser un proceso extenso y en ocasiones solitario. Un proceso que consta de diferentes fases, cada una con sus características y particularidades. El primer paso para empezar con buen pie la preparación de una oposición es conocer en detalle cada una de las etapas.
Desde UNIR queremos ayudarte a que tomes las riendas de tu preparación, siendo consciente en cada momento de lo que estás haciendo y hacia dónde te diriges. Así que, si te interesa conocer un poco más en profundidad cómo funciona el proceso de la oposición, en este artículo te lo contamos.
Vamos directos a ver las fases que nos vamos a encontrar en el camino de la oposición. Este proceso se divide en cuatro grandes partes. Aunque las únicas que de momento requieren de nuestra atención sean las dos primeras, vamos a comentar todas las fases ya que la otorgación de la plaza no se realiza hasta superadas todas ellas.
Fase 1: Primera prueba
Aquí vamos a tener que superar dos pruebas, por lo que esta fase se subdivide en dos partes, Parte A y Parte B. Estas dos pruebas se realizarán de manera separada pero serán valoradas de forma conjunta, por lo que obtendremos una sola puntuación de la primera prueba.
La Parte A consistirá en el desarrollo de un tema elegido por la persona aspirante entre los sacados al azar por el tribunal de forma proporcional al número de temas del temario de la especialidad teniendo en cuenta los siguientes criterios:
- En aquellas especialidades que tengan un número no superior a 25 temas, deberá elegirse entre dos temas.
- En aquellas especialidades que tengan un número superior a 25 temas e inferior a 51, deberá elegirse entre tres temas.
- En aquellas especialidades que tengan un número superior a 50 temas, deberá elegirse entre cuatro temas.
La duración de esta prueba es de 2 horas aproximadamente y posteriormente, según orden de lista, pueden ser leídos por el propio tribunal o por los aspirantes, dependiendo de lo dictado en la convocatoria.
La Parte B Consistirá en la realización de una prueba práctica que permitirá comprobar que se posee una formación científica y un dominio de las habilidades técnicas correspondientes a la especialidad a la cual se opta. El contenido de esta prueba puede ser muy variado, puede ir desde pedir a los aspirantes el diseño de un propuesta didáctica, más específica o más general, hasta la exposición de un caso de aula y pedir a los aspirantes que desarrollen protocolos y pautas de actuación dependiendo del caso expuesto.
En este caso, si las características de la prueba lo permiten, los ejercicios serán leídos por los tribunales o por los aspirantes, dependiendo de la comunidad autónoma.
Esta primera prueba es eliminatoria.
Fase 2: Segunda prueba
Esta fase es muy importante, ya que aquí es donde vamos a tener que demostrar nuestra capacidad pedagógica y nuestro dominio de las diferentes técnicas y estrategias para el ejercicio docente a través de la entrega y defensa de una programación didáctica o de una situación de aprendizaje.
Al igual que la fase anterior, esta se desarrolla a través de dos subfases. En primer lugar, tendrá lugar la presentación de la programación didáctica, que se realizará de forma telemática de la manera que lo habilite la convocatoria pertinente. Importante, ten al día tu identificación o firma electrónica para no tener ningún problema. Además, es fundamental que te asegures que tu programación respeta las bases que establece la convocatoria ya que de lo contrario podría acarrear penalizaciones. Una vez tu presentación se haya entregado y nos hayan confirmado que hemos superado la primera prueba, pasaremos a la preparación y defensa. Aquí, es fundamental entender la diferencia entre la presentación y defensa, ya que se presenta toda la programación pero solo se defiende una parte de la misma. Bien se puede defender la parte teórica junto con una situación de aprendizaje a elegir por el aspirante o a elegir entre las bolas sacadas. O bien solo se defiende una situación de aprendizaje. Esto dependerá de la comunidad autónoma donde se desarrolle la oposición.
En el desarrollo de esta prueba, los aspirantes disponen de 60 minutos aproximadamente, dependiendo de cada Comunidad Autónoma, para elaborar la defensa. Se podrá utilizar el material que se considere oportuno para reforzar la presentación, además de un guión que no exceda las dos caras de un folio para ayudarse durante la misma.
Fase 3: Concurso de méritos
Si hemos llegado hasta aquí es que nuestro desempeño ha sido muy bueno y hemos superado las dos pruebas. Llegados al concurso de méritos deberemos presentar toda la documentación que nos va a aportar méritos según la baremación que haya establecido nuestra comunidad autónoma. En esta fase, será muy importante nuestra experiencia laboral, así como las titulaciones de idiomas y de postgrado, entre otras.
Es crucial que estudies con detenimiento y antelación el baremo establecido por tu administración para sacarle el máximo jugo y obtener todos los méritos posibles. Recuerda, cada décima puede marcar la diferencia entre quedar o no con la plaza.
Fase 4: La práctica
Lo peor ya ha pasado, si estás aquí es porque ya has obtenido, de manera provisional, tu plaza. Ahora solo queda seguir las pautas que en su momento nos marque tu tutor de práctica, que será un compañero/a de nuestro centro y una vez superado el periodo de prácticas ya seremos funcionarios de carrera.
Por último, remarcar que en función de la comunidad autónoma en la que nos encontremos, podremos encontrar variaciones superficiales en aspectos como la nomenclatura, el desarrollo oral o escrito o los tiempos en las fases anteriormente mencionadas.
Consejos para una preparación exitosa
Ahora que ya conocemos las fases de la oposición, vamos a comentar una serie de consejos para cada una de las fases que te ayudarán, tanto a prepararte con antelación, como a realizar el mejor desempeño posible el día de la prueba.
Tanto la primera prueba como la segunda prueba, pueden ser vistas como un maratón. Aquí el secreto no es otro que la preparación y la constancia. Aquí van algunos tips que podrían ayudarte para mantenerte constante y motivado durante este largo proceso.
- Diseña una agenda que estructure tu día a día como opositor, el cual podría incluir lo siguiente: horarios de estudio, tiempo semanal dedicado a cada aspecto de la oposición (temario, supuestos prácticos, programación didáctica, simulacros, elaboración materiales…) y tiempo de descanso y actividad física.
- Es crucial llevar un orden de nuestro avance, ya que durante la vorágine de la oposición es fácil perderse entre tantos frentes abiertos, por ello es fundamental tener una lista o checklist a medio y largo plazo. Aquí iremos marcando con un check los objetivos que vayamos alcanzando, de esta manera tendremos una percepción visual de nuestro avance.
- Realiza simulacros. Esta técnica está muy infravalorada, ya que por el esfuerzo que requiere no se suele hacer, sin embargo, es de los mejores ejercicios que puede hacer un opositor. Haz simulacros tanto de temas, supuestos prácticos y defensa oral de la programación; simulacro significa que debes reproducir la situación tal y como pasará en el futuro, mismos tiempos, mismo materiales y mismas condiciones. Este ejercicio te aportará una experiencia que te será muy valiosa el día de la prueba.
- Por último, más de cara a la defensa oral, trabaja tu oratoria y puesta en escena. Este aspecto pudiera parecer algo poco relevante, pero la realidad es que tu misión en la defensa oral es vender tu producto y por muy bueno que sea, si no lo sabes vender el tribunal no lo va a apreciar. Tener una buena oratoria y un lenguaje corporal adecuado no hará milagros, pero sí que te ayudará mucho a transmitir lo que le quieres contar a tu tribunal.
Para enfrentarse a una oposición se necesita mucha voluntad y sobre todo requiere contar con una preparación sólida. Con los Másteres de Educación de UNIR no solo sumarás puntos en las oposiciones, sino que también te fortalecerán profesionalmente, mejorando tus habilidades y conocimientos.
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