José Fernando Calderero
Preguntarse sobre cómo van a ser los profesores en un futuro, muy próximo, equivale a plantearse algunas cuestiones sobre las necesidades educativas de los alumnos que tienen que atender. Una primera incógnita que hay que despejar es si seguirán haciendo falta profesores o la educación entrará en una dinámica selfie en la que cada usuario autoadministrará su formación.
Preguntarse sobre cómo van a ser los profesores en un futuro, muy próximo, equivale a plantearse algunas cuestiones sobre las necesidades educativas de los alumnos que tienen que atender.
Una primera incógnita que hay que despejar es si seguirán haciendo falta profesores o la educación entrará en una dinámica ”selfie” en la que cada usuario autoadministrará su formación. Huyendo de planteamientos bipolares, dicotómicos, me atrevo a afirmar de entrada que, siendo cierto que el autoconsumo de contenidos irá en progresión creciente, la sociedad siempre tendrá necesidad de buenos profesores; entendiendo por buenos aquellos no sustituibles por una app, un algoritmo o un sistema automático en definitiva.
Modernamente hay muchas posibilidades de aprendizaje eficiente no convencional que un profesor actual, o aspirante a serlo, no puede, sin grave riesgo laboral, ignorar. A este respecto, invito al lector a visualizar dos interesantes entrevistas que nos pueden dar importantes claves de nuevas modalidades pedagógicas, la titulada “Lifelong learning, ubicuo y personalizado”[1] a cargo del profesor Dr. Daniel Burgos, y “Aprendizaje personalizado y desarrollo del talento”[2] del Dr. Javier Tourón. En otro orden cosas, es interesante señalar también experiencias, como la llamativa y, muy conocida mediáticamente, experiencia de Salman Khan[3] en cuya academia, según indican en su propia web, “Puedes aprender cualquier cosa. Gratuitamente. Para todo el mundo. Para siempre”.
Ante este panorama, al cual solo nos hemos asomado tímidamente, ¿qué puede hacer un profesor convencional que dedica casi todo su tiempo, energía y recursos, a “dar el programa”?. Nada, no tiene prácticamente nada que hacer; se trata de una “especie en extinción”, aunque, desde mi punto de vista, no debe ser protegida.
¿Entonces, cómo tengo que formarme para ser un profesor “in”, que encaje en los nuevos retos pedagógicos y, por tanto, pueda dar adecuada respuesta a los que la sociedad espera de mí? Vayamos por partes, “los nuevos retos pedagógicos” cambian cada vez con mayor rapidez, lo cual hace que las técnicas que uno ha aprendido hace un año, o menos, pueden estar obsoletas al intentar llevarlas a cabo. Por otro lado, tratar de adaptarse a lo que en cada momento la cambiante sociedad demande “de mí”, es un intento con muy pocas posibilidades de éxito.
Habría, antes de ofrecer algunas conclusiones operativas, que considerar también la premisa de si es la Escuela la que ha de adaptarse a la Sociedad o bien esta ha de adecuarse a aquella o, mejor aún, si las influencias no deberían ser mutuas. Según como se conteste a esta determinante pregunta tendremos un modelo de escuela u otro y por tanto se necesitará un perfil de profesor u otro. Mucho me temo que, desgraciadamente, la escuela está siendo instrumentalizada al servicio de determinados intereses que quizá no coincidan con el bien, y las necesidades reales, de los alumnos considerados como lo que son, personas, no simples recursos.
Es relevante considerar que en el Libro Blanco “La educación importa: LIBRO BLANCO DE LOS EMPRESARIOS ESPAÑOLES”, recientemente entregado por destacados representantes de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) han al Ministro de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de España, se puede leer:
“Los conocimientos y las competencias STEM, por su vinculación con el empleo del futuro, han de ser reforzados y las llamadas “cuatro C” – creatividad, pensamiento crítico, comunicación y colaboración – deben ser desarrolladas desde todos los niveles educativos: educación general, formación profesional y educación superior.
-Creatividad, a fin de generar innovaciones efectivas que añada valor para la industria y los servicios se conviertan en nichos de nuevos empleos.
-Pensamiento crítico, para distinguir lo fundamental de lo superfluo en la actividad empresarial, identificar, con garantías, los errores y los aciertos y aprender de ellos para la mejora del desempeño laboral.
-Comunicación, para trasmitir ideas y conocimientos de interés para los negocios, tanto nacionales como internacionales; y servir de base para el ejercicio de un liderazgo efectivo.
-Colaboración, es decir, capacidad para trabajar en equipo, competencia clave en los modernos ambientes laborales”. [4] (CEOE, 2017, p. 124)
Desde luego, hay que reconocer la enorme importancia de las “cuatro C” y, aplicándolas al tema que nos ocupa, considerar que han de ser elementos irrenunciables del perfil de todo profesor que aspire a desempeñar con éxito su importante labor. Personalmente, y en línea con todo mi trabajo docente e investigador de años, recomiendo poner todo el empeño en desarrollar dichas competencias.
Ahora bien, he de hacer notar que los fines que en el texto citado se plantean, siendo buenos y razonables, se quedan muy cortos para lo que deberían ser las finalidades de una AUTÉNTICA EDUCACIÓN PERSONALIZADA, que nunca debe considerar a la persona como “un recurso para…”. Tal como se plantean, se corre el peligro de desarrollar esas competencias de forma instrumentalizadora, lo cual puede ser, es, muy pernicioso, y peligroso.
Para una mejor comprensión de la cada vez más difundida, y no siempre bien interpretada, Educación Personalizada sugiero al lector la consulta de los siguientes materiales:
-Calderero, J. F., Aguirre, A., Castellanos, A., Peris, R., & Perochena, P. (2014). Una nueva aproximación al concepto de educación personalizada y su relación con las TIC. Teoría de la Educación: Educación y Cultura en la Sociedad de la Información, 15(2).[5]
Partiendo de que la concepción educativa denominada educación personalizada está hoy extendida en numerosos países y contextos educativos, este trabajo pretende contribuir a clarificar el concepto, estableciendo una relación con las TIC en la actual Sociedad del Conocimiento y de la Información. Tomando como guía la revisión de diversas fuentes y la reflexión sobre actualización del concepto, se propone que “educar es ayudar a cada ser humano a establecer y mantener vínculos valiosos con la realidad”. Además, se aportan diversas prospectivas para profundizar en estos y otros aspectos.
-Calderero, J. F. (2015). La educación personalizada como solución social y ambiental. 19 noviembre 2015.[6]
En las conclusiones de esta conferencia se señala la necesidad de una profunda reflexión acerca de la naturaleza, protagonistas, responsables, fines y desarrollo de la “Educación” de forma que se pueda evitar que lo que podría ser una solución se convierta en parte del problema al reproducir, consolidar y reforzar las ideas y conductas que han provocado los problemas
También se subraya que la auténtica educación pasa por el reconocimiento del carácter personal del ser humano; es decir, de su enorme dignidad y valor “per se”, de forma que, en ningún caso, una persona puede ser considerada un simple recurso.
Concluyendo, consideramos que un profesor que quiera estar al día, y responder a las exigencias de la educación que, según creo interpretar, se está imponiendo con ritmo acelerado ha de incorporar a su perfil los elementos que se describen en:
-CALDERERO HERNÁNDEZ, J., PERIS SIRVENT, R., & PEROCHENA GONZÁLEZ, P. (2015). Estudio integrador de elementos significativos en la formación de maestros. Una propuesta para la autoevaluación docente Tendencias pedagógicas 25 (8).[7] Recuperado de https://www.tendenciaspedagogicas.com/Articulos/2015_25_08.pdf
Artículo en el que se propone a los docentes que, en el ejercicio de sus funciones, reconozcan, y potencien, las dimensiones corporal, afectiva, volitiva e intelectiva de sus estudiantes, teniendo en cuenta también las interacciones existentes en dichas dimensiones. También se proponen algunas consecuencias operativas para una adecuada formación de los maestros encaminada al desarrollo de la persona, entre las que se destaca un esquema descriptivo de las interrelaciones y una propuesta de instrumento de autoevaluación del carácter integrador de su formación.
-Calderero, J.F. (2014). Claves para ser un buen profesor. 24 diciembre 2014. Recuperado el 2 de julio de 2015 de https://ined21.com/claves-para-ser-un-buen-profesor/
En este artículo del blog INED21 muestro las que considero algunas de las claves necesarias para ser un buen profesor, todas ellas obviamente susceptibles de desarrollo:
“Contagiar” el propio afán de superación.
Concretar la acción educadora en quien tenemos ahora, aquí, Pretender enseñar a la “Humanidad” o a “la clase” es… “humo”.
Despertar el hambre de saber y la sed de descubrir.
Conseguir que los alumnos sientan el placer de saber, el gozo de inventar y la dicha de sentirse útiles y valiosos.
Ayudarles a encontrar los grandes tesoros que cada uno encierra y que suelen para desapercibidos a los ojos ajenos y… propios.
Demostrar con una afable y educada pero firme exigencia que tus alumnos te importan y haces que se sientan tenidos en cuenta y apreciados.
Seguir siendo siempre alumno.
Que le recuerden a uno con afecto y agradecimiento años después de haber terminado sus estudios.
-Entrevista de la Dra. Almudena Castellanos Sánchez a JF Calderero en la 4ª sesión del SIEP 2ª época “Cómo poner en práctica la Educación Personalizada”[8]. 18 de febrero de 2015.
En la grabación se presentan varias consideraciones y experiencias prácticas concretas en las que se muestran como la Educación Personalizada no es, en absoluto, un ideal difícil o inalcanzable sino una necesidad social factible.
Confío en que sean muchos los profesores y educadores que apuesten decididamente por una educación al servicio real de las personas, de cada persona, atendiendo sus específicas necesidades, entre las cuales tan relevantes como las que apuntan al reconocimiento y potenciación de la propia identidad están las que atienden al intrínseco, y esencial, carácter social de todo ser humano.
[1] Recuperado de https://tv.unir.net/videos/14845/368/1330/1832/0/Lifelong-learning-ubicuo-y-personalizado
[2] Recuperado de https://tv.unir.net/videos/14702
[3] Recuperado de https://elpais.com/tecnologia/2015/08/26/actualidad/1440607240_167958.html
[4] CEOE (2017). La educación importa: LIBRO BLANCO DE LOS EMPRESARIOS ESPAÑOLES. Madrid. CEOE. Recuperado de https://contenidos.ceoe.es/CEOE/var/pool/pdf/publications_docs-file-373-la-educacion-importa-libro-blanco-de-los-empresarios-espanoles.pdf
[5] Recuperado de https://revistas.usal.es/index.php/revistatesi/article/view/11890
[7] Recuperado de https://revistas.uam.es/tendenciaspedagogicas/article/view/163
[8] Recuperado de https://tv.unir.net/videos/10279/330/0/0/0/Caomo-poner-en-praactica-la-Educaciaon-Personalizada
José Fernando Calderero Hernández es profesor titular de “Teoría y Práctica de la Investigación Educativa” y de “Ciclos Vitales y Comunicación en la Familia” en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Director del Seminario Internacional de Educación Personalizada (SIEP).