Jorge Arana Varona
En el documental de Movistar+ 'Carolina Marín: la lucha infinita' se muestra el trabajo del investigador de UNIR dentro del cuerpo técnico de la campeona del mundo de bádminton, que multiplica la cantidad de datos sobre los atletas y el alcance de la medicina preventiva.
Manuel Jiménez, docente e investigador en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), es una figura destacada en el campo del diagnóstico deportivo. Su trabajo se centra en el análisis de hormonas y marcadores inflamatorios a través de la saliva, una técnica que permite obtener datos precisos y en tiempo real sobre el estado físico y emocional de los deportistas. “El presente y futuro del diagnóstico en saliva es muy prometedor y mínimamente invasivo“, afirma Jiménez, quien colabora con centros de investigación de renombre mundial.
El documental de Movistar+ Carolina Marín: la lucha infinita ofrece una mirada íntima al trabajo de Jiménez con la campeona olímpica de bádminton. En el documental, Jiménez explica cómo el análisis de saliva ha sido clave para monitorizar y optimizar el rendimiento de Marín, permitiendo anticipar posibles lesiones durante la preparación para los JJOO y ajustar las cargas de entrenamiento.
Las hormonas modulan nuestra conducta y nuestra conducta afecta a la producción de ciertas hormonas. Por ejemplo, niveles altos de testosterona nos capacitan para competir. Si un deportista tiene altos niveles de testosterona, está altamente capacitado para vencer a sus rivales y muy motivado para alcanzar los puestos más altos del ranking. Este es el caso de Carolina Marín, que produce “una cantidad de testosterona circulante descomunal para una mujer. A pesar de sufrir tres lesiones de rodilla, se plantea presentarse al Campeonato de Europa de 2026. Necesita competir”, afirma el investigador de UNIR.
Monitorización y prevención de lesiones
En el Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada, Manuel Jiménez trabaja junto al cuerpo técnico de Carolina Marín. Su labor dentro del equipo consiste en analizar las muestras de saliva de la deportista para evaluar sus niveles hormonales durante las duras jornadas de entrenamiento y detectar cualquier signo de fatiga o riesgo de lesión. “El equilibrio entre la testosterona y el cortisol es la base para prevenir lesiones. Cuanto mayor es el equilibrio de los ejes neuroendocrinos menor es el riesgo“, explica Jiménez.
El análisis de saliva permite a Jiménez y al resto de entrenadores ajustar la carga de trabajo de Marín, asegurando que su preparación física sea óptima sin poner en riesgo su salud. Esta línea de investigación permite hacer un seguimiento detallado de los deportistas, proporcionando datos precisos que ayudan a tomar decisiones informadas sobre su entrenamiento y recuperación.
“Trabajamos en equipo. Los datos hormonales los contrastan con la psicóloga, el preparador físico y el entrenador. Todos percibimos lo mismo cuando los datos confirman, científicamente, que estamos en esa situación”, comenta.
Anticipación y manejo de la recuperación
Este seguimiento a través de muestras de saliva durante la preparación olímpica permitió identificar momentos críticos en los que Carolina Marín necesitaba descansar para evitar lesiones. Durante la concentración en el CAR de Sierra Nevada, estos análisis revelaron que los niveles de cortisol de Marín eran elevados con respecto a sus valores medios, indicando un alto riesgo de lesión.
En respuesta, Jiménez aconsejó un descanso de 48 horas para permitir que la atleta se recuperara adecuadamente. “Caro, vamos a parar. Necesitamos un descanso porque estamos en alto riesgo de lesión. Desconecta un poco, baja a Granada, date un paseo”, le dijo el docente de UNIR. Marín, aunque reacia al principio, aceptó el consejo y decidió descansar para evitar un problema mayor.
El documental está ya disponible en la plataforma Movistar+.
Con el análisis de saliva se evalúa la situación física para reestructurar, si fuese necesario, el entrenamiento. “Analizo cuando está en el límite. Mientras no llegue a ese punto, no hay problema. Puedo seguir haciendo los análisis y decir que todo está perfecto. Carolina aguantaba entrenamientos duros y sus niveles de cortisol eran normales. Esto es exclusivo de los grandes deportistas, que tienen una capacidad de adaptación psicofisiológica muy especial”, comenta.
Aplicaciones más allá del deporte
“Algunas situaciones del deporte son incontrolables”. A pesar del exhaustivo trabajo de Manuel Jiménez y del resto del equipo, la campeona del mundo se rompió el ligamento cruzado en la semifinal de los Juegos Olímpicos. Hasta que Carolina Marín pueda volver a entrenar de cara a Campeonato de Europa de 2026, todos los componentes del cuerpo técnico han sido contratados por la Federación Francesa de Bádminton.
Por su parte, el docente de la Universidad Internacional de La Rioja se encuentra trabajando en un grupo de investigación de la universidad enfocado en el diagnóstico temprano de enfermedades como el Alzheimer a través de muestras de saliva. En este prometedor estudio, UNIR trabaja en coordinación con centro de primer nivel de España, Brasil y Estados Unidos. “Hemos encontrado 486 proteínas diferentes en la saliva, de las cuales más de 300 son dianas de posibles diagnósticos de enfermedades que van desde los procesos neurodegenerativos hasta la metástasis de algunos tipos de cáncer”, explica.
Estos avances no solo benefician al ámbito deportivo, sino que también tienen aplicaciones en la salud pública. La capacidad de realizar diagnósticos precisos y no invasivos desde casa podría revolucionar la medicina preventiva y el seguimiento de enfermedades crónicas. La investigación en saliva abre nuevas posibilidades para el diagnóstico temprano y el tratamiento de diversas patologías, mejorando la calidad de vida de las personas.
La posibilidad de realizar diagnósticos rápidos y precisos desde casa podría transformar la forma en que se gestionan las enfermedades crónicas y se lleva a cabo la medicina preventiva. “Es un método mínimamente invasivo y puede hacerlo cualquier persona desde su casa“, concluye Jiménez, subrayando la accesibilidad y eficacia de esta técnica. La investigación en saliva no solo mejora el rendimiento deportivo, sino que también ofrece soluciones innovadoras para la salud pública, beneficiando a un amplio espectro de la población.
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