Diego Caldentey
Entre el compromiso y el estrés se plantea un inmenso desafío. No es un tema menor: el 70% de los empleados de EEUU admiten no sentirse comprometidos con su empresa, según una macroencuesta de la consultora Gallup.
Entre el compromiso y el estrés se plantea un inmenso desafío. No es un tema menor: el 70% de los empleados de EEUU admiten no sentirse comprometidos con su empresa, según una macroencuesta de la consultora Gallup.
Es lógico que semejante estadística provoque preocupación en los departamentos de RRHH.
En cualquier empresa, un equipo requiere de alto grado de motivación para que la compañía progrese. Sin embargo, existen factores que pueden condicionar cualquier avance. Por ejemplo, el estrés.
Dos preguntas, entonces, surgen de manera obvia:
¿Cómo fortalecer el compromiso, que genera mayor productividad y calidad del trabajo, mayor seguridad y retención de empleados?
¿Cómo reducir sus niveles de ‘asfixia’ laboral, que a su vez provoca agotamiento (mental y hasta físico, en muchos casos) de los trabajadores?
Una de las claves consiste en fomentar un compromiso inteligente, con estrategias que conduzcan al entusiasmo, la motivación y la productividad, sin el agotamiento del empleado
Una de las claves consiste en fomentar un compromiso inteligente, con estrategias que conduzcan al entusiasmo, la motivación y la productividad, sin el agotamiento del empleado.
Así lo afirman tanto Emma Seppala, investigadora de Universidad de Stanford; como Julia Moeller, consultora del Centro de Inteligencia Emocional de Yale. En un artículo en Harvard Business Review, ambas expertas brindan los siguientes consejos:
Exígeles, pero también compénsales
La idea del compromiso ‘extremo’ del empleado con su empresa no siempre es tan saludable. Un estudio de la Universidad de Yale y de la Fundación Faas en el que participaron un millar de trabajadores, plantea interrogantes sobre esta cuestión.
Dos de cada cinco reportaron altos niveles de compromiso y bajos niveles de agotamiento. Pero un 20% admitió que ese alto compromiso le causa un nivel similar de estrés. Como líder de RRHH debes evitar quemar a los empleados exigiéndoles una entrega al máximo sin compensaciones de ‘descanso’ emocional o gratificaciones. El coste puede ser demasiado alto: podrías perder a algunos de tus trabajadores más motivados y valiosos. Y no por su falta de compromiso, sino por sus experiencias simultáneas de alto estrés y síntomas de agotamiento.
Apórtales los recursos necesarios
La mitad de los empleados altamente comprometidos y con bajos niveles de estrés informaron en la encuesta disponer de numerosos recursos para desempeñar sus labores. Destacaron la ayuda de sus supervisores, los sistemas de recompensas, y el reconocimiento y autoeficacia en el trabajo. También bajas demandas, como la escasa carga laboral, bajo nivel de burocracia en la estructura y exigencias de concentración y atención de bajas a moderadas.
En contraposición, tales experiencias de elevados recursos y bajas demandas fueron casi inexistentes (solo el 4%) entre los empleados muy comprometidos, pero también muy estresados. La mayoría de ellos (el 64%) admitió experimentar altas demandas y altos recursos.
Es crucial proporcionar a los empleados los recursos necesarios para hacer bien su trabajo, sentirse bien con su trabajo y recuperarse de los factores estresantes
Por ello, “es crucial proporcionar a los empleados los recursos necesarios para hacer bien su trabajo, sentirse bien con su trabajo y recuperarse de los factores estresantes del trabajo experimentados a través del trabajo”, sostienen Seppala y Moeller.
Ofréceles programas alternativos de bienestar
Para combatir el estrés, las especialistas dan mucha importancia a lo que llaman ‘programas alternativos de bienestar’. Consideran fundamental promover entre los empleados planes de alimentación saludable, práctica de ejercicios, actividades lúdicas y recreativas grupales (en intervalos o fuera de la oficina) y cursos de atención plena.
‘Monitorea’ el nivel de exigencia que enfrentan
Como líder de RRHH debes coordinarte con otros gerentes de primera línea de la empresa para monitorear el grado de exigencia real que enfrentan los trabajadores de sus equipos. Cuanto más alto sea el nivel de exigencia en el trabajo, mayor será la necesidad de apoyo, reconocimiento u oportunidades de recuperación de los empleados.
Plantéales objetivos realistas
Fijar objetivos adicionales en las empresas es hoy una de las prácticas más comunes. Pero las situaciones desafiantes de recompensas ‘extras’ por logros no solo pueden causar ansiedad y estrés incluso para las personas más motivadas, sino que también conducir a estados de agotamiento.
Para algunos empleados, perseguir un objetivo ambicioso conducirá a un rendimiento mayor que perseguir una meta moderada. Pero para muchos otros, un objetivo adicional desmesurado llevará a desmotivarse, tomar riesgos insensatos y hasta renunciar. Los gerentes de RRHH deben garantizar que los objetivos planteados siempre sean realistas. Posgrados como el Máster en Dirección y Gestión de RRHH online ponen especial énfasis en los propósitos y pautas que estos expertos tienen que planificar, y en cómo hacerlo.
Fomenta el equilibrio
Estar ‘enganchado’ al trabajo bastante más allá del horario laboral pautado, incluso en días de descanso, no es sinónimo de compromiso, sino de desequilibrio. Establece normas explícitas para evitar que se envíen correos electrónicos a empleados fuera del horario de trabajo. También deja bien en claro que las noches y fines de semana no entran dentro de las jornadas laborales. Muchos jefes o responsables de otros departamentos parece que aún no lo comprenden…