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La utilización de métodos estadísticos y matemáticos puede resolver problemas financieros y ayudar a predecir el comportamiento de los activos financieros en los mercados.
Si la econometría es la rama de la economía que utiliza herramientas matemáticas y estadísticas para analizar las relaciones económicas, la econometría financiera se centra específicamente en la aplicación de métodos econométricos en las finanzas, particularmente en el análisis de los mercados y los activos financieros.
A grandes rasgos, los modelos econométricos permiten estimar las pérdidas o ganancias que se pueden obtener al realizar una inversión en un determinado activo financiero.
La econometría financiera es una disciplina de reciente creación. El crecimiento de los mercados financieros y la variedad y complejidad de los productos financieros disponibles implican que se recurra cada vez más a los métodos econométricos para medir los riesgos y explicar el comportamiento de los activos en los mercados.
Funciones de la econometría financiera
La principal función de la econometría financiera es predecir el comportamiento de un activo, y la posibilidad de obtener ganancias con él, teniendo en cuenta su nivel de riesgo y la incertidumbre que rodea a los mercados. Para ello, la econometría financiera se apoya en modelos econométricos y series de datos financieros (una serie temporal, un conjunto transversal de datos o una combinación de ambos) que permiten contrastar diferentes escenarios y comprobar las consecuencias que tiene en el comportamiento del activo los cambios en alguna variable. Por ejemplo, se puede realizar un estudio de econometría financiera a partir de los datos procedentes del precio diario de una acción durante un año o también a partir del rendimiento de diferentes activos en una jornada en la bolsa.
En econometría financiera los modelos más usuales son los modelos de heteroscedasticidad condicional autorregresiva (modelos ARCH y GARCH) y los modelos de volatilidad estocástica (VS). En estos modelos el riesgo se puede predecir a partir de la volatilidad (la variación de precios del activo con respecto a su media) de los activos. En concreto, los modelos GARCH se usan para modelizar la volatilidad de las series financieras, evitando las limitaciones que tiene usar la varianza tradicional como medida de riesgo (volatilidad). Como alternativa, los modelos de volatilidad estocástica presentan una mayor flexibilidad a la hora de representar las propiedades empíricas características de los rendimientos financieros.
Ámbitos de aplicación de la econometría financiera
A través del uso de la estadística, la econometría financiera permite encontrar soluciones a problemas económico-financieros y tomar a partir de ellas decisiones estratégicas, tanto en el ámbito de la empresa como en el de asesoramiento en inversiones. Por ejemplo aplicando modelos econométricos se puede:
- Estimar la relación entre distintas variables financieras.
- Determinar el precio de una acción en función de una variable (como por ejemplo el anuncio de reparto de dividendos).
- Medir la volatilidad del rendimiento de un bono.
- Estimar qué modelo es más eficiente: si el Capital Asset Pricing Model o Asset Pricing Theory.
- Comprobar si los mercados de futuros reaccionan más rápidamente que los mercados spot (al contado).
- Estudiar propiedades de los rendimientos financieros.
- Realizar simulaciones para calcular el precio de un instrumento derivado.
- Estudiar las microestructuras de los mercados financieros.
En particular, la econometría aplicada a los negocios se suele utilizar en el área de marketing e investigación de mercados (para hacer pronósticos de demanda o de oferta y en análisis de equilibrio de mercado, principalmente), en todo lo que tiene que ver con los mercados financieros y en el diseño de estrategias empresariales.
Saber aplicar diferentes modelos de econometría financiera posibilita trabajar como analista de riesgos de mercado o analista de inversiones en entidades financieras, grandes empresas o instituciones públicas. Para todo ello forma el Grado en Finanzas y Contabilidad de UNIR, del que salen profesionales dotados de un perfil multidisciplinar, capaces de desempeñar tareas de gestión y asesoramiento financiero y contable.
