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Cómo se ha desempeñado una persona en determinadas situaciones en el pasado permite saber cómo lo hará en el futuro; esta es la idea que subyace en la entrevista por competencias.
La entrevista por competencias es un tipo de entrevista que emplean los responsables de selección de personal para inferir cómo será el desempeño futuro de un candidato a un puesto de trabajo.
Si en una entrevista de trabajo tradicional el reclutador se interesa por los estudios, experiencia o conocimientos del candidato para hacerse una idea general de su perfil, en una entrevista por competencias lo que quiere es conocer ejemplos conductuales de su vida personal o de su experiencia profesional anterior que le permitan evaluar si cumple las competencias que requiere el puesto. Las entrevistas por competencias, también denominadas conductuales, parten de la teoría de que el comportamiento pasado permite predecir el desempeño futuro.
Preguntas habituales de una entrevista por competencias
En una entrevista por competencias, el entrevistador cuenta con un listado de preguntas establecidas, cada una centrada en una habilidad específica necesaria para el puesto. Después, las respuestas de los candidatos se compararán con criterios predeterminados, clasificándose en consecuencia.
El responsable de selección de personal realizará a los candidatos preguntas que tengan que ver con las principales cualidades que se requieren en un puesto de trabajo, como pueden ser:
- Adaptabilidad
- Comunicación
- Creatividad
- Flexibilidad
- Independencia
- Espíritu crítico
- Liderazgo
- Organización
- Orientación al cliente
- Resiliencia
- Resolución de conflictos
- Toma de decisiones
- Trabajo en equipo
Obviamente, las preguntas de la entrevista por competencias serán diferentes en función del puesto ofertado, pues cada uno requiere aptitudes y habilidades distintas. Por ejemplo, para un director de departamento se espera que el candidato tenga capacidad de liderazgo y sepa resolver conflictos; para un perfil de contabilidad, capacidad analítica y de organización; un profesional del área comercial debería poseer dotes persuasivas y de comunicación; y un puesto para el departamento de marketing, creatividad.
Dependiendo de las competencias que se requieran, las preguntas serán unas u otras. Así, para comprobar que el candidato sabe resolver conflictos, puede preguntársele por una situación laboral anterior en que se haya enfrentado a un problema para saber cómo se comportó; si se quiere saber cómo afronta situaciones de estrés, se le puede pedir que cuente cuál fue una situación estresante para él y cómo reaccionó.
El modelo STAR
Existen varias formas de plantear las preguntas de las entrevistas por competencias. Una de las más conocidas es el modelo STAR, que hace referencia a los cuatro factores que se analizan en este modelo de entrevista: Situación, Tarea, Acción y Resultado. Es decir, para evaluar una habilidad del entrevistado —por ejemplo, su creatividad o su flexibilidad—, se le pide que cuente una situación que haya vivido relacionada con esta competencia (ya sea en la vida personal o en la laboral), que exponga cuál era la tarea que él desempeñaba, qué acciones llevó a cabo y cómo se resolvió la situación.
En estas entrevistas habrá diferentes tipos de preguntas:
- Cerradas, a las que se responde con sí o no.
- Abiertas, que permiten una reflexión más larga sobre un tema y evaluar así varias competencias al mismo tiempo.
- Hipotéticas, en las que el entrevistado plantea un supuesto y pide al candidato que proponga una solución.
- Provocadoras, que buscan sorprender al candidato.
- Preguntas trampa, en que las dos hipótesis que se proponen son igual de rechazables.
Ventajas y desventajas de la entrevista por competencias
Realizar una selección de empleados utilizando una entrevista por competencias presenta ciertas ventajas, pues:
- Ayuda a definir el perfil del candidato y a mejorar el proceso de selección.
- Permite detectar el talento afín a los valores y la cultura de la organización, disminuyendo la tasa de rotación de personal.
- Posibilita predecir el desempeño futuro de un empleado.
- Contribuye a eliminar los sesgos en la selección de personal.
Sin embargo, esta fórmula de entrevistar no está exenta de riesgos:
- Requiere experiencia y dominio de la técnica por parte del reclutador.
- Exige un trabajo previo para concretar el perfil del candidato y las competencias requeridas.
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¿Cómo preparar una entrevista por competencias?
Se da por sentado que existen competencias esenciales para ciertos puestos de trabajo. Por ejemplo, para un perfil de ingeniero, se demanda un profesional con capacidad de liderazgo y trabajo en equipo, habilidades comunicativas, resolución de problemas, innovación y adaptabilidad. Partiendo de esa idea genérica, el candidato puede aventurar las posibles preguntas que le hará el reclutador, reflexionar sobre sus experiencias previas y prepararse las respuestas.
De todas formas, la mejor manera de preparar una entrevista por competencias es estudiar la descripción de la oferta para conocer en detalle las funciones que se realizarán en el puesto y los requisitos que se demandan, así como recabar información sobre la empresa para averiguar qué cualidades son las que valoran en sus empleados.
De esta manera, podrás preparar ejemplos de tus experiencias que justifiquen que posees las competencias que la empresa está buscando. No es necesario que sean experiencias estrictamente profesionales (sobre todo si la entrevista es para tu primer puesto de trabajo), sino que pueden ser de tu vida personal. La idea es que al entrevistador le quede claro cómo supiste manejar cierta situación gracias a determinada habilidad. Por ello, es importante relatar la experiencia vivida de manera natural y auténtica.
En ocasiones las preguntas de una entrevista por competencias no se referirán a experiencias del pasado, sino a cómo se afrontaría una determinada situación en el futuro. En todo caso se trata de demostrar cómo las capacidades del candidato se adecúan a las necesidades del puesto. Por ello, es preciso que el candidato haga un análisis de sí mismo para conocer cuáles son sus puntos fuertes. Es decir, trabajar en el autoconocimiento es clave para afrontar este tipo de entrevistas.