Elena Mora
El impacto de un ciberataque en la continuidad del negocio es grande. No solo por el gasto económico que implica, sino por la lesión que se ocasiona en la confianza de nuestros clientes y en la reputación de la marca. Llega incluso en algunos casos a tener consecuencias penales.
España es el tercer país del mundo que más ciberataques recibe. Se estima que este año los ataques a empresas se duplicarán con respecto al año pasado. A medida que aumenta la interconectividad y digitalización de la sociedad, las amenazas y filtraciones se multiplican.
Los ordenadores y dispositivos móviles son los grandes aliados para la apertura del negocio al exterior. Permiten gestionar la relación con clientes y proveedores de manera muy eficaz. En todos ellos se almacena gran cantidad de información. Cada directivo e incluso muchos empleados tienen en su poder información sensible.
Hace diez años la responsabilidad por la seguridad de la empresa habría recaído exclusivamente en el director de sistemas de información o director informático, pero la transformación digital lo ha cambiado todo. En el departamento financiero se gestiona la información clave del negocio de la compañía. En el departamento de marketing, comercial o de negocio, la información estratégica. El área jurídica custodia las relaciones contractuales con terceros, además de ser quien tenga que gestionar las posibles consecuencias de una ciberagresión. En recursos humanos, la información de empleados. Así podríamos seguir enumerando los diferentes departamentos y en todos ellos encontraríamos información que puede ser el objetivo de cualquier ciberataque.
Por esta razón, una compañía que delega todas las cuestiones de seguridad únicamente en el director de sistemas de información o director informático está incrementando sus factores de riesgo. Todos los miembros del equipo directivo son responsables de garantizar la seguridad de la información y los datos, y deben implicar a todos los empleados.
El impacto de un ciberataque en la cuenta de resultados y en la continuidad del negocio es grande. Hay gasto económico y se lesiona la confianza de los clientes y la reputación de la marca, a veces con consecuencias penales.
- Programa en Riesgos de Ciberseguridad y su impacto en Negocio