Carles M. Canals
Para lograr un objetivo común, los integrantes de un grupo de trabajo deben actuar de manera coordinada y armónica y ayudarse entre sí. En el complejo mundo laboral de hoy son muy útiles determinadas herramientas, que aquí te presentamos.
¿Por qué aplicar acciones dinamizadoras del espíritu de equipo? Porque hoy es más difícil conseguirlo. Hace tiempo murió el concepto de un empleo para toda la vida: hay mucha rotación laboral. Nuestro mundo es cada vez más digital y global, con menos contacto cara a cara.
Además, la diversidad forma parte de lo cotidiano y nos rodean personas muy diferentes. Diferentes en carácter, procedencia geográfica, creencias políticas y religiosas, raza, cultura, bagaje profesional…
En el puesto de trabajo, ¿cómo lograr que empleados tan diferentes cooperen entre sí amablemente y sean eficaces? En los últimos años se han desarrollado herramientas de lo que se ha denominado team building: construcción de equipos. Veamos las siguientes dinámicas de trabajo en equipo:
- Un proyecto común.
- Algunos ejercicios.
- Motivos y ventajas.
- No renunciar al liderazgo.
1. Un proyecto común
Se trata de conseguir que todo miembro se sienta protagonista imprescindible de un propósito colectivo ilusionante. Un proyecto común cuyo resultado es superior a la suma de la tarea que cada participante ha desempeñado individualmente.
Se trata de conseguir que todo miembro se sienta protagonista imprescindible de un propósito colectivo ilusionante
Hay múltiples dinámicas de trabajo en equipo para construir y potenciar el espíritu de tu plantilla. A finales del siglo XX empezaron a florecer firmas especializadas en actividades lúdicas en un entorno diferente al lugar de trabajo. Características de estas actividades:
- Ha de haber labor de equipo.
- Si no se nombra un líder, surgirá naturalmente.
- Todos han de hacer alguna aportación.
- Tienen un componente lúdico.
2. Algunos ejercicios
A este tipo de entretenimientos les afecta mucho la moda: mueren algunas iniciativas porque son sustituidas por otras nuevas. Poniendo en el buscador Google las palabras ‘team building’ aparecen docenas de empresas y actividades. Ejemplos:
- Deportes de aventura al aire libre: rafting, deslizarse en tirolina, navegación, rápel…
- Jugar como niños para afrontar un reto. Construir un objeto con piezas de madera o de plástico, tipo Lego. Gincana.
- Actividades participativas. Pintura, karaoke, baile, teatro, grabar un videoclip, club literario, cocinar, concursos.
- Poner a prueba habilidades. Debates improvisados. Uno figura ser un cliente airado y otro un empleado que intenta desenfadarle. Meter a varios en una habitación cerrada para que salgan sin usar la llave, usando su ingenio, como los Scape Rooms.
3. Motivos y ventajas
La mayoría de los instrumentos del team building se basan en ejercicios y juegos realizados fuera del lugar habitual de trabajo. Motivos y ventajas:
- Proporcionan un ambiente distendido. No hay jerarquías, no hay presiones laborales, no se reciben e-mails ni llamadas telefónicas.
- Si el monitor de la actividad lo hace bien, todos los participantes sacan lo mejor de sí mismos para conseguir el objetivo común que les han marcado.
- Estas actividades desinhiben: cada uno acaba mostrándose ante los demás como realmente es.
- Son fuente de motivación.
- Permiten que uno aprenda de otros. Aparecen habilidades y destrezas desconocidas incluso por el que las desarrolla ante el reto que le plantean ahora.
Aparecen habilidades y destrezas desconocidas incluso por el que las desarrolla ante el reto que le plantean ahora
- Mejora la comunicación entre los miembros del equipo.
- Se desvanecen estereotipos. ‘Yo creía que X era un egoísta, arrogante, sólo iba a la suya…’
- Aumenta el respeto entre los miembros del equipo (en la medida en que cada uno lo merece).
- Disminuyen egos desmesurados, si se adopta un mínimo de humildad. Uno ve que es incapaz de realizar determinadas tareas que consigue fácilmente otro al que despreciábamos.
- Tiene aplicaciones a la empresa. Muchos de los ejercicios, pruebas y juegos que se realizan tienen una traslación muy directa al ámbito laboral.
4. No renunciar al liderazgo
Puede resultar muy útil subcontratar estas actividades de team building a firmas especializadas. Pero el directivo responsable de los equipos nunca debe renunciar a facetas importantes de su liderazgo. Una de las funciones del buen líder es construir equipos, coordinar sus tareas, motivar adecuadamente, ofrecer unas condiciones de trabajo justas…
Una de las funciones del buen líder es construir equipos
El líder tiene que preocuparse de que el inmediato superior de cada equipo conoce bien, personalmente, a cada uno de sus integrantes. Así podrá señalar metas adecuadas, evaluar su rendimiento, conocer sus puntos fuertes y aquellos otros en que ha de mejorar, saber qué es lo que más le motiva…
Además, parte de la tarea de potenciar el espíritu de equipo debe seguir realizándose en el ámbito del trabajo ordinario. Por ejemplo, con reuniones periódicas para recibir feedback y si es preciso corregir el rumbo o cambiar prioridades.
- Liderazgo