John Müller
El fundador de Tesla, Elon Musk, ha revelado en las últimas semanas algunos de los cambios que introducirá tras adquirir Twitter.
¿Cuál es la intención de Elon Musk?
Estas intenciones figuran en el comunicado enviado al regulador bursátil estadounidense (SEC), los tuits publicados en las últimas semanas y una reciente entrevista en TED. Musk comunicó que su intención es excluir Twitter de Bolsa porque cree que, como cotizada, la red social “no prosperará ni cumplirá su imperativo social” de ser “la plataforma para la libertad de expresión del mundo”. Como compañía privada, Musk podría abordar los cambios que tiene en mente sin la presión de los accionistas y de Wall Street.
Musk explicó en la entrevista en TED que su oferta es seria, tiene “suficientes activos” como para financiar la adquisición y que su intención es “mantener tantos accionistas como permita la ley en una compañía privada, alrededor de 2.000”. Durante la entrevista, aseguró que su motivación “no es ganar dinero” sino “elevar la confianza en Twitter como plataforma de opinión pública”.
Musk y la libertad de expresión
El empresario es partidario de reducir la moderación de contenidos de Twitter en aras de la libertad de expresión, sin más límites que los que marque “la legislación del país en el que opere”.
Así, se muestra “reacio a eliminar contenido” y defiende que hay que “ser muy cauteloso con las prohibiciones permanentes” de cuentas. “Creo que es mejor la suspensión temporal que la prohibición permanente”, dice.
El veto más controvertido y relevante que ha llevado a cabo Twitter en su historia ha sido el aplicado al expresidente estadounidense Donald Trump, cuya cuenta fue suspendida de manera permanente por “incitación a la violencia”.
El fundador de Tesla, que entró en el capital de Twitter a comienzos de abril con una participación minoritaria, defiende la necesidad de una mayor transparencia, para lo que promete abrir el código del algoritmo porque considera “bastante peligroso” que “la caja negra” de un algoritmo promueva o reste impacto a un tuit. También cree que debe quedar un registro público si se realizan cambios manuales.
En su opinión, este compromiso le avala ante quienes se cuestionan cómo se puede asegurar que Twitter pueda ser una verdadera plataforma de opinión pública si la compañía acaba en manos del hombre más rico del planeta. La fortuna de Musk está valorada en unos 260.000 millones de dólares, según Forbes.
Propuesta de cambios
Asimismo, el empresario dice que una de sus prioridades es “eliminar los ejércitos de bots” que hay en la red social y el spam porque devalúan la plataforma. Musk, que tiene 82,4 millones de seguidores en Twitter, también quiere incluir en la red social un botón para editar los tuits, algo en lo que Twitter lleva tiempo trabajando. Musk es partidario de poder realizar cambios durante una corta ventana de tiempo tras la publicación y ve razonable que quede un registro de lo que se editó y que, en estos casos, se ponga a cero el contador de retuits y favoritos del tuit inicial.
El emprendedor estadounidense también ha sugerido cambios en el servicio de suscripción premium de la plataforma, que se lanzó el pasado verano, y está disponible en EEUU, Canadá, Australia y Nueva Zelanda por una tarifa mensual de 2,99 dólares. Entre otras funciones, estos usuarios ya pueden editar los tuits durante 30 segundos tras su publicación.
Musk podría impulsar este servicio porque considera que si Twitter depende de la publicidad para sobrevivir “aumenta el poder de las corporaciones para dictar políticas”, según opinó recientemente en un tuit. El empresario ha propuesto rebajar el precio de la suscripción en al menos un euro y eliminar los anuncios para estos abonados, que recibirían automáticamente la autentificación de su cuenta.
Enlace a la noticia de referencia: Los planes de Elon Musk si toma el control de Twitter
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