John Müller
El autor del artículo, profesor en Kellog, afirma que la lucha contra la Covid ha estado marcada por una total falta de comunicación. Con la vacunación, gobiernos y empresas están cambiando su discurso.
El marketing da forma al comportamiento humano y si algo ha faltado en esta pandemia ha sido el apoyo comunicacional para introducir nuevos comportamientos: distanciarse físicamente, usar mascarillas y evitar las reuniones.
Donald Trump podría haber sido un adelantado en esta materia por su potencia comunicativa y por su instinto de vendedor, pero nunca entendió la pandemia y sus implicaciones. Sus mensajes sólo crearon confusión. En términos generales, los responsables de la salud pública han tenido buenas intenciones y han transmitido información, pero carecen de recursos y del talento para el buen marketing.
Pero las cosas están cambiando con la llegada de las vacunas. Aunque el porcentaje de personas que se niega a vacunarse voluntariamente varía según los países, la resistencia es problemática porque mientras no se consiga una elevada inmunidad entre la población, la batalla contra el coronavirus no se habrá ganado. Pero con las campañas de vacunación, el marketing ha comenzado a mejorar notablemente.
El presidente norteamericano Joe Biden abrió el camino señalando que, si los norteamericanos se vacunan, usan máscaras y se distancian físicamente por un tiempo más, podrían tener un 4 de Julio casi normal. Google también ha lanzado una publicidad excelente para alentar a vacunarse y distintas marcas y comercios locales están ofreciendo incentivos concretos. Una multinacional de donuts regala uno de sus bollos a cada persona que se vacune y Budweiser, por ejemplo, se ha sumado con una publicidad propia que refuerza el mensaje de que hay que vacunarse. La apuesta del marketing por las vacunas puede ser de gran ayuda para acabar con la pandemia.
Enlace al artículo de referencia: Finally, some great vaccine marketing
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