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La educación musical es una disciplina fundamental en el desarrollo integral de los alumnos, especialmente durante sus primeras etapas académicas, gracias a sus beneficios interdisciplinares.
La música no solo constituye una actividad de ocio, sino que también se alza como una potente herramienta para el desarrollo integral de las personas, especialmente de los alumnos más jóvenes. De este modo, la educación musical es un pilar fundamental en la formación de cualquier persona. UNIR apuesta por ella con su Máster en Pedagogía Musical online, donde se imparten sus metodologías.
¿Qué es la educación musical?
La educación musical es un campo de la pedagogía centrado en formar a los alumnos sobre todo lo relacionado con la música, los ritmos o las melodías. Esto incluye todo tipo de habilidades prácticas y teóricas.
Este tipo de enseñanzas pueden desarrollarse en diferentes entornos, como colegios, conservatorios, clases particulares, comunidades… y a través de recursos en línea. Su objetivo es cultivar una comprensión más profunda del mundo artístico y sonoro, así como fomentar el desarrollo de nuevas capacidades.
Los elementos de la educación musical
Los elementos de la educación musical son los componentes básicos que conforman el proceso de enseñanza y aprendizaje de la música. Se interrelacionan y se combinan de diferentes maneras para crear experiencias musicales ricas y significativas.
Los principales elementos de la educación musical son:
- Percepción auditiva: escuchar y discriminar sonidos musicales.
- Lectura y escritura musical: leer y escribir símbolos musicales.
- Interpretación musical: tocar o cantar música.
- Composición musical: crear música original.
- Improvisación musical: crear música de forma espontánea.
- Movimiento corporal: movimiento corporal para expresar la música.
- Tecnología musical: tecnología para crear, interpretar y aprender música.
Además de estos elementos principales, la educación musical también puede incluir otros aspectos como:
- Sonido y silencio: la base de la música es el sonido, pero el silencio es también un elemento importante que proporciona contraste.
- Ritmo: organización del tiempo en la música creado mediante la combinación de sonidos.
- Melodía: sucesión de sonidos que se perciben como una entidad musical coherente.
- Armonía: combinación de dos o más sonidos que se escuchan simultáneamente creando una sensación de complejidad.
- Timbre: cualidad del sonido que permite distinguir entre diferentes instrumentos o voces.
- Forma: estructura de una pieza musical, organización de los elementos musicales en el tiempo, como la repetición, la variación y el contraste.
- Expresión: comunicación de emociones e ideas a través de la música, lográndose mediante la combinación de todos los elementos musicales.
En este sentido, los elementos de la educación musical se pueden categorizar en varios aspectos que juntos forman una experiencia educativa integral. En ellos se incluyen componentes teóricos y prácticos, así como enfoques metodológicos y contextuales. Dentro de los elementos teóricos se contemplan la teoría musical, la historia de la música o la apreciación musical. A nivel práctico, se desarrollan conceptos relacionados con los instrumentos, la voz, la improvisación o los conjuntos musicales.
Los beneficios de la educación musical en la infancia
Los beneficios de la educación musical en la infancia son numerosos y abarcan áreas cognitivas, emocionales, sociales y físicas. Del mismo modo, también se relaciona este concepto con ventajas académicas, psicológicas, culturales o éticas.
En general, los principales beneficios de la educación musical son:
- Desarrollo cognitivo
- Estimulación del cerebro activando nuevas conexiones neuronales.
- Mejora del lenguaje y la comunicación con canciones y rimas.
- Desarrollo del pensamiento lógico y matemático gracias a las estructuras de ritmo, melodía o armonía.
- Aumento de la capacidad de resolución de problemas y pequeños desafíos que fomentan el pensamiento crítico y creativo.
- Desarrollo psicomotor
- Mejora de la coordinación al tocar instrumentos, bailar y hacer movimientos rítmicos.
- Desarrollo del sentido del ritmo y la percepción espacial.
- Fomento de la expresión corporal gracias a los beneficios de la danza y el movimiento.
- Mejora de la percepción auditiva.
- Desarrollo emocional y social
- Mejora de la autoestima y la confianza.
- Desarrollo de la sensibilidad y la empatía conectando con emociones y sentimientos.
- Reducción del estrés y la ansiedad.
- Fomento del trabajo en equipo y la socialización promoviendo la interacción social.
En general, los beneficios de la educación musical aplican a todo tipo de personas y edades, si bien los beneficios concretos varían en función de la etapa escolar en la que se encuentren los alumnos.
La educación musical en Infantil
La educación musical en la etapa de Educación Infantil (niños de 0 a 6 años) presenta beneficios multidisciplinares que redundan en el desarrollo integral de los más pequeños.
Esta educación musical temprana es fundamental, proporcionando una base sólida para su crecimiento cognitivo, emocional, social y físico. Las experiencias musicales tempranas no solo fomentan habilidades específicas en música, sino que también contribuyen a un desarrollo equilibrado y enriquecedor en múltiples áreas de la vida.
Con todo, los niños mejoran su capacidad de concentración, memoria, coordinación y psicomotricidad, habilidades lingüísticas, a la vez que adquieren habilidades comunicativas y estimulan su imaginación.
La educación musical en Primaria
En el caso de la Educación Primaria, los beneficios son similares, aunque enfocados a su nivel de aprendizaje. Así pues, la educación musical sigue siendo fundamental para el desarrollo integral de los niños de 6 a 12 años.
La pedagogía musical en el aula ayuda a reforzar los aprendizajes curriculares de otras asignaturas y potenciar habilidades esenciales en su futuro. Entre los aprendizajes más destacados figuran un fortalecimiento de la memoria y la capacidad de atención, la estimulación del pensamiento lógico y creativo, el refuerzo del aprendizaje matemático, o la mejora de habilidades lingüísticas.
Actividades para la educación musical
La educación musical abarca una serie de actividades cuya clave está en que sean interactivas, prácticas y amenas para despertar un mayor interés.
- Juegos con canciones y rimas: las actividades con las letras de las canciones y sus patrones rítmicos mejoran la memoria y comprensión del lenguaje. Pueden utilizarse instrumentos de percusión, canciones populares o, simplemente, las manos y pies.
- Escucha activa: los estudiantes se acercan a diferentes estilos musicales, obras de compositores o piezas específicas para identificar sus estructuras. Del mismo modo, la música puede incorporarse a otros contextos, como la concentración antes de los exámenes o la relajación tras actividades físicas.
- Exploración de instrumentos: los instrumentos de percusión son de los más efectivos a la hora de acercar a los alumnos a los diferentes ritmos y patrones, reduciendo el estrés y potenciando su creatividad.
- Composiciones: los docentes pueden animar a los estudiantes a componer su propia música con pautas simples y dejando que exploren su creatividad para crear sus piezas musicales.
- Danza: los bailes requieren movimiento y ayudan a mejorar la capacidad motora y la expresión corporal, algo que presenta beneficios no solo para la asignatura de música sino para otras como Educación Física, complementando los beneficios de ambas materias.
Además, la educación musical también puede integrarse en otros contenidos, como la acentuación de las palabras en la asignatura de Lengua o las composiciones poéticas en Literatura. Son ejemplos sencillos para aplicar en las aulas que no requieren de grandes recursos ni medios económicos pero que ayudan a aprovechar todos los beneficios de la educación musical.
