UNIR Revista
¿Por qué un fotógrafo profesional decide estudiar el Grado de Fotografía en UNIR? José Antonio Fernández Salas, autor de fotolibros premiados y con una rica e interesante trayectoria artística nos lo cuenta en esta entrevista.
José Antonio Fernández Salas, fotógrafo, estudiante del Grado en Fotografía de UNIR y miembro de la pareja artística Rojo Sache es el autor de uno de los 30 fotolibros ganadores en el Belfast Photo Festival, en su edición de 2023, con el fotolibro D-AI. Dicha obra fue además finalista en el Premio al Mejor Libro de Fotografía del Año de PhotoEspaña 2023.
Pregunta: ¿Podrías explicar en qué consiste el proyecto fotográfico ganador en el Belfast Photo Festival y finalista en PhotoEspaña?
Respuesta: A partir de un proyecto anterior de Rojo Sache, Dai, que cuestionaba la explotación mediática de asesinatos cometidos en parajes apartados de la civilización, este nuevo trabajo, D-AI, toma la forma de un periódico, recopilando diferentes noticias de sucesos (crímenes), donde tanto los textos como las imágenes (variantes de las fotografías originales) han sido desarrollados por inteligencia artificial. De este modo, se genera una nueva realidad más inquietante, difusa y perturbadora.
D-AI busca reflexionar y fomentar una conciencia crítica sobre la manera en la que consumimos información, en el contexto actual en el que los medios de comunicación, influenciados por intereses económicos y políticos, provocan que sea difícil distinguir entre información veraz y manipulada. La irrupción de la inteligencia artificial ha incrementado la confusión y el desconcierto; esta ha sido la razón de que sea la principal herramienta empleada en este trabajo.
P: Compaginas la docencia en el campo de la fotografía con la fotografía profesional y la creación artística. ¿Cómo articulas estos tres aspectos de tu práctica fotográfica?
R: Creo que, en los tiempos que corren, cada vez es más habitual que los fotógrafos y fotógrafas aborden diferentes vertientes al desarrollar su actividad. Personalmente, pienso que la clave para llevarlo bien es aprender a trabajar en equipo, priorizar cada labor, según el momento en el que se encuentre, y ser muy disciplinado con las fechas y los horarios.
En mi caso particular, la fotografía profesional ahora es más intermitente, porque solo realizo los trabajos que me parecen más interesantes y, de esa forma, consigo dar cabida al resto de áreas. En la parte artística, somos más constantes. Junto a Rosa Isabel Vázquez, la otra mitad de Rojo Sache, generamos continuamente ideas y propuestas nuevas que luego materializamos.
En los tiempos que corren, cada vez es más habitual que los fotógrafos y fotógrafas aborden diferentes vertientes al desarrollar su actividad. La clave para llevarlo bien es aprender a trabajar en equipo, priorizar cada labor y ser muy disciplinado.
Como autor de libros didácticos, he escrito las obras Sin miedo al flash, Sin miedo al retrato y coescrito Sin miedo a la fotografía en los últimos años, pero ahora me estoy tomando una pausa en esta faceta para poder centrarme en otros ámbitos. En cuanto a la docencia, es algo con lo que siempre me he sentido muy cómodo, quizá sea mi zona de confort y la que estabiliza lo demás, la que me apremia a seguir aprendiendo y mejorando cada día. Y, por supuesto, no hay que olvidar que ahora también soy estudiante universitario.
P: ¿Qué tipo de encargos sueles realizar habitualmente como fotógrafo profesional?
R: Aunque, como ya he comentado, actualmente no llevo a cabo tantos encargos como antes, trabajo con una productora audiovisual para la que realizo fotografía publicitaria. Por ejemplo, últimamente, he hecho las fotos de una campaña para el Ministerio de Igualdad y otra para la Dirección General de Turismo de Castilla-La Mancha.
A veces, también realizo reproducciones de obras pictóricas; a pesar de que es algo muy protocolario y no demasiado creativo, disfruto con ello. Por ejemplo, fue muy interesante fotografiar prácticamente todos los cuadros de Goya del Museo del Prado. Tener la oportunidad de visitar el museo de noche y estar con expertos en arte fue una muy buena experiencia. Por otro lado, también soy el responsable de las labores de preimpresión fotográfica para la editorial de fotolibros Muertedero.
P: ¿Estás ahora trabajando en algún proyecto relacionado con la fotografía?
R: En Rojo Sache siempre tenemos algo entre manos, a veces, varios proyectos al mismo tiempo. Rosa es una persona muy creativa e incombustible en este sentido. Muchas de estas propuestas florecen, otras se quedan en reserva; quizá por eso, nunca las mostramos antes de que estén terminadas y publicadas.
Puedo decirte que ahora mismo estamos trabajando en un proyecto que, como D-AI, está relacionado con la inteligencia artificial y cerca de llegar a término y convertirse en un fotolibro.
P: Actualmente estás estudiando el Grado en Fotografía de UNIR. ¿Cómo está resultando la experiencia de aprendizaje?
R: La formación es algo que, tanto desde el punto de vista del docente como del alumno, me parece apasionante. Creo que, por la naturaleza cambiante del mundo de la imagen, los fotógrafos y fotógrafas necesitamos mantenernos en un estado de constante aprendizaje.
La UNIR está siendo una experiencia muy enriquecedora. Aunque es cierto que me han convalidado varias asignaturas debido a mi experiencia, en la parte que estoy cursando estoy adquiriendo muchos conocimientos y, lo más importante, está sirviendo como disparador de nuevos proyectos artísticos. Además, estoy conociendo a gente muy interesante, tanto a alumnos como a profesores, que ya se han convertido en grandes amigos.
José Antonio Fernández Salas, un artista con mil y una caras.
- Conoce de primera mano el trabajo de José Antonio Fernández Salas en su página web.