UNIR Revista
La musicoterapia hospitalaria repercute positivamente en los enfermos y les ayuda, entre otros muchos beneficios, a mejorar su estado de ánimo, disminuir el estrés y reducir la sensación de dolor.
Se ha demostrado que el uso profesional de la música repercute positivamente en las personas, por esa razón se utiliza en diferentes ámbitos relacionados con la salud. La musicoterapia hospitalaria actúa de forma terapéutica en pacientes con diferentes dolencias y enfermedades mejorando su estado de ánimo, disminuyendo su estrés y reduciendo la sensación de dolor.
La musicoterapia se define, según la Federación Mundial de Musicoterapia, como la utilización profesional de sus elementos en entornos médicos, educativos y cotidianos con personas, grupos, familias o comunidades con el fin de mejorar y optimizar su calidad de vida y su salud física, social, comunicativa, emocional, intelectual y espiritual.
La musicoterapia hospitalaria es la aplicación de esta práctica al ámbito de la salud, de cuya ejecución se encarga un profesional titulado que recibe el nombre de musicoterapeuta. Este buscará y trabajará sobre objetivos terapéuticos, adaptando sus funciones a cada paciente y caso en particular.
Para trabajar como musicoterapeuta es necesario contar con la formación necesaria, como la que ofrece UNIR a través del Máster en Musicoterapia online. Este posgrado capacita para implementar técnicas musicales con funciones terapéuticas en beneficio de la salud y bienestar de las personas.
Objetivos de la musicoterapia hospitalaria
La música es el medio no el fin en este tipo de terapia, es decir, no se pone el foco en la interpretación formal y estilística sino en adaptar los recursos sonoros a los objetivos terapéuticos que persigue. Además, estas intervenciones son complementarias a los tratamientos médicos y están destinadas a prevenir, facilitar la recuperación y a promover un entorno clínico emocionalmente saludable.
Así, la musicoterapia hospitalaria persigue los siguientes objetivos:
- Ayudar a gestionar la ansiedad y el miedo asociado a los tratamientos o procedimientos médicos.
- Facilitar la recuperación a través de la mejora emocional y el apoyo para saber afrontar estos procesos de forma eficaz.
- Minimizar los efectos secundarios de los tratamientos médicos como la percepción de dolor y la medicación.
- Mejorar la salud física y contribuir a la rehabilitación del paciente.
Beneficios de la musicoterapia en hospitales
La musicoterapia hospitalaria favorece la comunicación e interacción social, el bienestar emocional y tiene capacidad para estimular aspectos cognitivos, sensoriales, motores y afectivos a nivel cerebral.
En el entorno clínico, la musicoterapia se puede emplear con pacientes adultos y pediátricos. Además, esta terapia tiene cabida en distintas unidades hospitalarias como las UCI, oncología, cuidados paliativos y psiquiatría, entre otros.
Cuando se introducen las artes terapéuticas musicales en el sector hospitalario alguno de los beneficios que se evidencian y que han sido ratificados por múltiples estudios son:
- Mejora el estado de ánimo, por lo que genera en el paciente una actitud positiva para sobrellevar o afrontar mejor la enfermedad o los tratamientos.
- Reduce la percepción de dolor.
- Mejora estados depresivos, sobre todo en pacientes ingresados en Cuidados Intensivos.
- Ayuda a reducir la ansiedad y manejar mejor situaciones de estrés, como el ingreso hospitalario en niños.
- Afecta positivamente a la frecuencia cardiaca y a la presión arterial.
- Beneficia al sistema inmune de pacientes con problemas de corazón o que han sufrido infartos.
- En pacientes oncológicos, mejora ciertos síntomas asociados a la quimioterapia, como la falta de apetito.
- Algunos estudios ratifican que disminuye la necesidad de analgésicos de aquellos pacientes conectados, puesto que ven una mejora de su bienestar emocional.
- Mejora las habilidades verbales y comunicativas, fomentando que el paciente hable y explique qué y cómo se siente.
- Cuando se realiza en grupos, fomenta la interacción social.
La musicoterapia hospitalaria puede darse en la fase de diagnóstico, durante la fase paliativa y de tratamiento, y también a posteriori, pues a estos pacientes ya curados les puede resultar útil esta práctica para gestionar mejor su nueva realidad.
Ejemplos de musicoterapia hospitalaria
Estos beneficios se consiguen gracias a la ejecución de actividades de musicoterapia como las que se detallan a continuación:
Música en las aulas hospitalarias
Para los pacientes pediátricos y con la misión de favorecer su estado anímico, se emplean actividades de distinto tipo en las que la música es el elemento central. Pueden ser:
- Juegos en los que el objetivo es adivinar la canción para incentivar la imaginación y creatividad de los niños.
- Actividades de improvisación musical
- Actividades de audición para fomentar su evasión y relajación.
- Práctica instrumental compartida con los musicoterapeutas para lograr que los niños se diviertan y se tranquilicen.
Expresión de emociones
La música es una vía muy eficaz para ayudar a canalizar emociones, por ello existen actividades que utilizan este elemento para hacer que los pacientes expliquen musicalmente cómo se sienten. Por ejemplo, componer junto al musicoterapeuta una canción y preguntarles qué les ha hecho sentir escribir la letra y pedirles que expresen con palabras los sentimientos que han aflorado al interpretar esa música.
Disminución del estrés y relajación
El método receptivo permite al paciente conectar con un sentido más positivo de su realidad mediante la audición activa de música. En momentos de estrés, obsesión o depresión esta técnica resulta muy útil para permitir que el enfermo se desinhiba y pueda relajarse y minimizar así los niveles de estrés ocasionados por la enfermedad o el tratamiento al que está sometido.
Musicoterapia activa
En este tipo de técnica la persona participa activamente en la terapia, es decir, puede bailar, cantar, tocar un instrumento, las palmas, hacer sonidos con su cuerpo o boca, improvisar un ritmo o crear una estrofa de una canción. Este tipo de práctica favorece la salud del paciente, mejorando su movilidad y estado físico.