UNIR Revista
Dominar las principales técnicas de traducción y saber cuándo emplear cada una de ellas resulta fundamental para ser un buen profesional de este oficio que cada vez cuenta con mayor demanda laboral.
Ser competente en varias lenguas no es suficiente para ejercer como traductor y, mucho menos, para hacerlo de manera impecable. Un buen profesional de la traducción deberá manejar a la perfección todos los tipos de técnicas de traducción y aplicar la más conveniente en cada momento.
Para hacer una traducción de forma eficiente es requisito indispensable que estos expertos tengan tal control de las lenguas con las que trabajan que lleguen a hacerlas totalmente suyas. En el Grado de Traducción e Interpretación online de UNIR los alumnos tendrán ocasión de familiarizarse con las distintas técnicas de traducción para convertirse en los mejores profesionales.
Las técnicas de traducción podrían definirse como los mecanismos que los especialistas tienen a su alcance para poder ejecutar con solvencia su trabajo a la hora de trasladar un texto de una lengua a otra en la fase de transferencia.
Mientras que los métodos de traducción se aplican a la totalidad del documento, las técnicas están enfocadas a partes concretas, como determinadas palabras, frases o párrafos. Entre las más utilizadas podemos encontrar las siguientes:
La literal
Sería la traducción palabra por palabra y es la menos utilizada de todas las técnicas porque requiere que las dos lenguas con las que se trabaja posean estructuras muy similares. Se emplea únicamente cuando un vocablo tiene una sola correspondencia en el otro idioma y no hay lugar para la interpretación del significado, algo que ocurre en contadas ocasiones.
El préstamo
Se trataría de dejar sin traducir un término o expresión del idioma de origen, bien porque tenga también cierto arraigo en la lengua de destino, o bien, porque no exista un equivalente ya acuñado.
En este caso, las palabras o dichos que se mantengan como originales, deberán aparecer en letra cursiva si no hay adaptación fonética de ningún tipo. Un ejemplo de esta técnica de traducción sería el uso en un texto escrito en español de palabras como déjà vu, hardware o mozzarella.
El calco
Se parece al préstamo, pero es una técnica ligeramente diferente, pues consiste en la traducción literal respetando la estructura del original. Por ejemplo, términos como balonmano, procedente del inglés handball, sería un calco. Los traductores deben ser cautos al utilizar el calco, ya que algunos vocablos pueden volverse confusos y difíciles de entender.
La modulación
Al emplear esta técnica, el traductor transmite una idea cambiando la forma en la que se expresa en la lengua original, pero manteniendo su esencia. Se produce, por tanto, un cambio semántico o de perspectiva. Ejemplo de modulación sería traducir la expresión en inglés Don’t get so excited por la española Cálmate. Los cambios de pasiva a activa serían otro buen ejemplo de modulación.
La transposición
Consiste en un cambio de categoría gramatical. Un ejemplo del uso de esta técnica sería la traducción de Before I come back por Antes de mi regreso.
La equivalencia
Es el recurso más empleado a la hora de traducir refranes o frases hechas, ya que se trata de emplear la estructura equivalente ya acuñada para expresar la misma idea. Por ejemplo, el equivalente acuñado del refrán español Las desgracias nunca vienen solas sería la inglesa It never rains, but it pours.
La adaptación
Conocida también como equivalente cultural, consiste en sustituir elementos culturales del texto de origen por otros que se adapten mejor a la civilización de la lengua de destino. Por ejemplo, mientras en Reino Unido suelen tomar té, en España lo habitual es tomar un café.
La compensación
Cuando no es posible dar con una reformulación que recoja todo lo que transmite el original (forma, fondo, doble sentido, sonoridad, ritmo, etc.), se recurre a la compensación, que consiste en tratar de producir el mismo efecto en el conjunto del texto, si bien aplicando de forma creativa algunos recursos. Por ejemplo, si al traducir un poema en algunos versos no es posible trasladar una aliteración, puede renunciarse a ella en ese momento, pero en otra parte del texto tratar de introducir una aliteración que produzca un efecto sonoro igualmente.
Cabe añadir que no todas las técnicas son aplicables siempre ni existen técnicas únicas para cada caso. El traductor profesional debe actuar con criterio a la hora de optar por una u otra. Por ello, dominar todas estas técnicas de manera solvente es un requisito indispensable para cualquier profesional de la traducción y, por ello, resulta vital la formación académica recibida y un aprendizaje afianzado por la práctica individual por parte de los alumnos.