UNIR Revista
En el mundo digital la creación de grafismos es fundamental para tener una imagen corporativa definida y conseguir comunicar de forma sencilla y accesible.
En los inicios de Internet la mayoría de páginas web estaban construidas a base de texto, con formas básicas como botones o recuadros y algún color. Actualmente, lo que vemos cuando entramos en una página o aplicación es muy distinto y es en buena parte gracias al grafista digital que la ha diseñado.
Botones redondos o cuadrados, iconos, fondos y texto con una paleta de color armónica, imágenes, gráficos, rótulos, barras de herramientas… Aunque pasan desapercibidos, todos estos elementos forman parte del diseño gráfico que realiza un grafista digital y son esenciales para que una web sea útil, bonita y funcional.
Antes de continuar, es interesante hacer una apreciación: Todos los diseñadores gráficos hacen grafismos, pero no se les suele llamar grafistas digitales, más bien diseñadores web o, sencillamente, diseñadores gráficos. De hecho, según el uso convencional del lenguaje, grafista digital suele asociarse más con el profesional encargado de los grafismos de TV o videojuegos.
Funciones de un grafista digital
El diseño gráfico tradicional se utiliza en multitud de plataformas, tanto en las audiovisuales como en los videojuegos, incluso en los periódicos que publican infografías o en la televisión. Concretamente en Internet, el diseño gráfico digital engloba cualquier diseño creado para interactuar con él a través de un dispositivo digital. Así, un grafista digital diseña y crea junto a los programadores todo el concepto detrás de la web, aplicación o herramienta que estén desarrollando.
De forma no excluyente se pueden diferenciar seis grandes áreas dentro del grafismo digital.
- Imagen corporativa: logotipos, marcas, símbolos.
- Diseño editorial: libros, revistas, periódicos.
- Tipografía: fuentes tipográficas.
- Diseño publicitario: anuncios, folletos, tarjetas.
- Diseño web: páginas web, eCommerce, blog.
- Diseño multimedia: vídeo, animación, imágenes 3D.
De modo esquemático, entre las funciones del grafista digital se pueden señalar:
Experiencia de usuario
El diseño gráfico está presente en toda la experiencia del usuario al que esté destinado y debe ser acorde a sus necesidades. Por ejemplo, en una web el diseñador crea los banners y las imágenes de portada, pero también decide si el menú estará a la derecha o a la izquierda, si será desplegable o estático, los logos, los colores, la tipografía, etc. De igual forma ocurre en una herramienta online o en una aplicación móvil.
Comunicación y objetivos
Los elementos que elige el grafista digital no son por azar o estética, sino que cumplen funciones comunicativas y de usabilidad. Es decir, están orientados a que el usuario tenga una experiencia concreta y a conseguir unos objetivos, ya sea de ventas, de visitas, de tiempo de permanencia en la página, etc.
En el mundo empresarial, por ejemplo, el diseño gráfico es esencial para desarrollar una imagen de marca corporativa o una identidad visual. La web es la forma en que una empresa se presenta ante sus clientes y esto define su identidad, su imagen pública, muestra sus servicios y productos, pero también comunica otras cosas intangibles como sus valores. En estos casos, el camino de pestañas y botones a la hora de adquirir el producto es clave y tiene muchos elementos de diseño gráfico que favorecen esa experiencia al comprar.
Hay otras webs cuya finalidad no es vender un producto, sino conseguir interacciones y usuarios (como en el caso de una red social) o tiempo de permanencia y visitas (como un periódico online o una web de noticias que busca lectores y que estos pasen varios minutos en la página). En esos casos, el grafista digital debe amoldarse a las necesidades de la empresa. Por ejemplo una tipografía clara en el caso de los medios de comunicación online, entornos que no cansen la vista, elementos visuales con fondos claros, paletas de colores que muestren el espíritu del medio, etc. Además, en el caso de las redes sociales se necesitan otros elementos gráficos como botones de interacción, emojis, organización de los elementos en scroll, entre otros.
Diseño multidispositivo
El diseño gráfico online debe adaptarse al dispositivo con el que vaya a ser utilizado, ya sea una tablet, un móvil, un ordenador o una televisión inteligente, por mencionar algunos. Así, el caso del catálogo online de un servicio de visualización de series en streaming debe estar diseñado para consultarse a través de una televisión y que sea legible, fácil de usar, intuitivo…
En este tipo de diseños el trabajo conjunto entre el grafista digital y los programadores es clave para conseguir que diseño gráfico y usabilidad tengan objetivos comunes y funcionen casi como uno solo.
¿Qué estudiar para ser grafista digital?
La creatividad, la visión espacial y la capacidad de análisis son competencias básicas de un grafista digital, así como la actualización constante de herramientas digitales con las que realizar y mejorar su trabajo.
La formación de base pasa por un Grado en Diseño Gráfico online como el que ofrece UNIR. En él se combinan los elementos del diseño tradicional con las técnicas más innovadoras aplicadas a los distintos medios digitales: visuales, interactivos, de web, interfaces y de producto.