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A través de la memoria de responsabilidad social corporativa, las empresas exponen sus actividades relacionadas con la responsabilidad social que llevan a cabo y las presentan a la sociedad de forma transparente.
La sociedad está cada vez más concienciada con el cuidado del planeta y de los tejidos sociales, en especial los más desfavorecidos. Es por eso que las empresas, más allá de su actividad económica, se preocupan por el impacto que genera su actividad en materia de sostenibilidad y responsabilidad social. En este contexto, la memoria de responsabilidad social corporativa (RSC) o memoria de sostenibilidad es una herramienta clave para comunicar de manera transparente y detallada estas acciones y sus resultados.
La memoria de responsabilidad social corporativa es un documento que funciona a modo de informe de responsabilidad social corporativa, ya que en ella se recoge toda la información relacionada con las prácticas y estrategias de una empresa realizadas en el ámbito social, ambiental y de gobernanza (criterios ESG, por sus siglas en inglés).
Las memorias de sostenibilidad abordan los impactos económicos, sociales y medioambientales que genera una organización, reflejan la estrategia de sostenibilidad de la empresa y, por tanto, son herramientas de gestión clave. También sirve como un medio para mostrar a la sociedad de manera transparente su política de responsabilidad social corporativa.
¿Cuándo redactar la memoria de responsabilidad social corporativa?
Desde 2018, en España, están obligadas a elaborar las memorias de sostenibilidad las empresas que tengan un tamaño superior a 500 empleados, o que durante sus últimos dos ejercicios fiscales hayan contado con una plantilla media de 250 empleados, tal como consta en la Ley 11/2018, de 28 de diciembre que transpone la Directiva 2014/95/UE, NFRD.
La normativa también establece esta obligación para las compañías cuyo total activo consolidado anualmente sea superior a 20 millones de euros, así como aquellas cuya cifra anual de negocios sea superior a los 40 millones de euros.
Desde enero de 2023 entró en vigor la Directiva (UE) 2022/2664 (CSRD), que modifica a la directiva NFRD aumentando la transparencia y la comparabilidad en aspectos ESG. Esta directiva obliga también a reportar información no financiera, desde el 1 de enero de 2025, además de a las grandes empresas de más de 500 empleados a grandes empresas con más de 250 empleados o 40 millones de euros de facturación o 20 millones de euros de activos totales. Y desde el 1 de enero de 2026 para entidades de crédito pequeñas y no complejas, aseguradoras cautivas y pymes cotizadas con opción de exclusión voluntaria hasta 2028.
¿Qué debe incluir la memoria de RSC?
La memoria de responsabilidad social corporativa debe abordar diversos aspectos relacionados con las características de la responsabilidad social corporativa. Esto quiere decir que hay que incluir todas las acciones y resultados orientados a cumplir compromisos sociales, reducir el impacto ambiental y mejorar sus aspectos éticos y de gobernanza.
En la memoria de RSC principalmente se define el contexto de la empresa y el desempeño de la misma a través de su plan de responsabilidad social corporativa y sus prácticas de gobierno corporativo.
Para ello, hay que explicar cuál es la contribución voluntaria de la empresa en relación con el bienestar social y el impacto ambiental; por ejemplo, informando sobre las iniciativas para reducir la huella ecológica y preservar el medio ambiente. Asimismo, se deben incluir detalles sobre las acciones llevadas a cabo para promover un ambiente laboral justo, inclusivo y seguro.
También se aporta información sobre los compromisos adquiridos con los diferentes grupos de interés, como empleados, clientes, proveedores, comunidades locales, entre otros.
Por último, es recomendable incluir información que refleje los efectos económicos, ambientales y sociales significativos de la compañía.
¿Cómo elaborar una memoria de RSC?
La memoria de RSC se tiene que redactar teniendo en cuenta unos principios de calidad de información que garanticen la fiabilidad de los datos que se muestran.
A la hora de elaborar este documento es importante optar por una presentación adecuada y sencilla para que sea fácil de entender. Estos son algunos de los pasos que se deben seguir para elaborar una memoria de RSC:
- Identificar los temas a tratar. El primer paso en la preparación de la memoria es determinar cuál será su contenido en base a las características de cada compañía.
- Recopilación de datos fiables. A la hora de recopilar la información se deben tener en cuenta dos cosas: que lo que se recoge tiene que ser preciso y relevante sobre las actividades sociales, ambientales y económicas de la empresa, y que pueda compararse con datos de ejercicios anteriores y los objetivos de la propia RSC.
- Elaboración comprensible y evaluable. La información que se recoge y expone sobre las acciones de responsabilidad social corporativa llevadas a cabo debe ser comprensible y accesible. Además, tiene que ser lo suficientemente precisa y medible para que pueda evaluarse.
¿En qué consiste la metodología GRI para redactar la memoria?
Conforme ha ido cobrando más importancia la responsabilidad social corporativa, se han establecido diferentes estándares para que las empresas puedan elaborar sus memorias. Una de las metodologías más utilizadas es la Global Reporting Initiative (GRI), ya que es fácil de adaptar a cualquier tipo de empresa, independientemente de su tamaño o sector.
En 2022, GRI lanzó su último estándar, el “GRI 2021 Revised Universal Standards”, con el objetivo de promover reportes de información de sostenibilidad mejores y más consistentes.
Sus principales elementos son:
- Establece una serie de indicadores específicos para evaluar el desempeño de una empresa en áreas de responsabilidad social corporativa. Estos abarcan aspectos económicos, sociales y ambientales, proporcionando una estructura detallada para medir y comunicar el impacto de la empresa en estos ámbitos.
- Enfatiza en la importancia de la comprensión del contexto, la materialidad, que consiste en identificar y abordar los temas más relevantes y significativos para la empresa y sus partes interesadas.
- Busca involucrar a todas las partes interesadas relevantes en el proceso de elaboración de la memoria.
Cabe destacar que en julio de 2023, la UE aprobó el Reglamento Delegado (UE) 2023/2772 para completar la Directiva 2013/34/UE modificada por la Directiva (UE) 2022/2464, en lo que respecta a las normas de presentación de la información sobre sostenibilidad. Este Reglamento, establece las Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (NEIS), donde se especifica la información que las empresas deben divulgar en conformidad con las Directivas anteriormente mencionadas. Es decir, las NEIS especifican la información que una empresa debe divulgar sobre sus incidencias, riesgos y oportunidades de importancia relativa en relación con cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza.
Para las personas interesadas en la sostenibilidad y la responsabilidad social de las empresas, UNIR tiene a su disposición el Máster en Sistemas Integrados de Gestión (SIG). A través de esta formación, los estudiantes aprenderán a planificar, implementar y evaluar los principales sistemas de gestión empresarial relacionados con calidad, medioambiente, responsabilidad social corporativa y seguridad y salud en el trabajo.
En resumen, la memoria de responsabilidad social corporativa es un documento fundamental para comunicar las acciones y resultados obtenidos en el ámbito de la RSC.
