UNIR Revista
La realidad virtual sumerge a una persona en un espacio simulado en el que puede interactuar, o desplazarse por el mismo, mediante el uso de dispositivos tecnológicos. Su utilidad abarca desde el ocio al sector sanitario, pasando por el educativo.
La Real Academia Española define la realidad virtual (RV) como la “representación de escenas o imágenes de objetos producida por un sistema informático, que da la sensación de su existencia real”. Este tipo de tecnología permite que una persona pueda adentrarse en un mundo diferente al suyo a través del uso de un dispositivo electrónico que, normalmente, tiende a implicar la utilización de unas gafas o un casco.
Los profesionales responsables de diseñar esos mundos virtuales alternativos son expertos que se han formado en titulaciones como el Máster en Smart Building & Diseño de Edificios Inteligentes o el Máster en Realidad Extendida: virtual, aumentada y mixta, ambos de UNIR.
¿Cómo funciona la realidad virtual?
La realidad virtual, que es la creación de espacios ficticios en los que las personas pueden interactuar, requiere de la utilización de dispositivos como gafas o cascos para lograr la efectiva inmersión en este entorno alternativo.
Así pues, la RV se sirve de la tecnología para facilitar que una persona se introduzca en un entorno creado digitalmente. Para lograrlo, será necesaria la utilización de, al menos, un dispositivo en el que se implemente el programa que mostrará el espacio simulado en el que se moverá el usuario.
El funcionamiento es sencillo: digitalmente se diseña un escenario basado en las necesidades y objetivos que se persigue con la simulación. Después, se introduce la información en el aparato de tal forma que el usuario, una vez se lo pone y enciende, se siente dentro de esta realidad ficcionada.
Este desarrollo tecnológico encuentra múltiples aplicaciones —que van desde el ocio con los videojuegos hasta el sector sanitario— que facilitan que el sujeto se coloque en la posición de poder relacionarse con una situación diferente a la que está teniendo lugar en su vida real.
Usos de la realidad virtual
Las aplicaciones de la realidad virtual son de lo más diversas y, aunque en la mayoría de los casos, se asocia con la recreación de escenarios fantásticos para el desarrollo de experiencias inmersivas en los videojuegos o actividades recreativas, las utilidades que se le pueden dar van mucho más allá:
- Educación. El empleo de la realidad virtual en el aula facilita que el estudiante no solo aprenda los conceptos sino que se relacione con ellos. De esta forma, al incorporar el uso de esta tecnología en el proceso de aprendizaje, con unas gafas los alumnos pueden, desde un aula en Madrid, visitar el Museo del Louvre o viajar a la España del siglo XV.
- Arquitectura. La realidad virtual en arquitectura da vida a los planos, convierte las ideas en espacios por los que caminar para entender cómo se comportaría el diseño. De hecho, su incorporación en el flujo de trabajo permite comprobar si es necesario realizar modificaciones en el proyecto antes de su construcción.
- Ingeniería. Con la misma finalidad se puede aplicar la realidad virtual a otros sectores empresariales vinculados con la ingeniería. En definitiva, la posibilidad de tener una aproximación al producto final ideado facilita la toma de decisiones antes de su fabricación, reduciendo con ello los costes asociados a las modificaciones posteriores.
- Salud. La realidad virtual aplicada al ámbito sanitario muestra una gran versatilidad de opciones, ya que esas simulaciones se pueden aplicar para ayudar en la preparación de los médicos, así como ser parte de los tratamientos de los pacientes del área de salud mental con traumas relacionados con determinadas situaciones del pasado.
Diferencias entre realidad virtual y aumentada
Aunque la realidad virtual y la aumentada comparten que ambas crean elementos digitalmente, precisamente es en el contexto en el que lo ejecutan el punto en el que encuentran su diferenciación.
Así, mientras que en la realidad aumentada el escenario real permanece y se muestran objetos diseñados gracias a aplicaciones tecnológicas, en la realidad virtual el usuario se sumerge en un mundo diferente al suyo.
Sin embargo, sí es posible afirmar que la realidad aumentada y la realidad virtual tienen puntos en común:
- Uso de la tecnología para mostrar elementos que tienen su origen en el mundo.
- Uso del 3D, dotando de volumen a los espacios u objetos simulados para impregnar mayor veracidad a las creaciones.
Por último, existe una tercera categoría, que es la realidad mixta, que se configura como una tecnología que aúna los principales elementos de la realidad virtual y la aumentada. Al igual que en los dos casos anteriores, requiere de un dispositivo electrónico para facilitar la interacción con los elementos creados de manera digital.
En conclusión, la realidad virtual es una tecnología que posibilita a una persona relacionarse con un escenario diferente a aquel en el que se encuentra, con fines educativos, profesionales, empresariales, sanitarios o recreativos.