UNIR Revista
El analista web se ocupa de recolectar, analizar y transformar información de una web para entender el comportamiento de los usuarios y determinar qué acciones se pueden implementar para mejorar su experiencia.
En su camino hacia la digitalización, cada vez más empresas y marcas demandan personal especializado que les ayude a interpretar y aprovechar los datos que generan y recopilan sus plataformas online. Es la figura del analista web quien, después de analizar la información que genera una página web, extrae conclusiones que le ayudan a entender el comportamiento de los usuarios e implementar diferentes estrategias para el beneficio de la compañía.
El analista web es una de las profesiones en auge dentro del marketing digital, ya que las empresas han comprendido —sobre todo las pymes tras la pandemia— la importancia de contar con presencia online.
¿Qué es un analista web?
La analítica web permite conocer el efecto de la estructura, jerarquía y demás elementos de una web en base a la navegación de los usuarios que acceden a la misma. El analista web puede conocer las búsquedas en Internet que llevan a un determinado dominio, cómo es la interacción con el contenido, cuál despierta más interés, el tiempo de permanencia, etc.
Básicamente, un analista web es el profesional que se encarga de recopilar, cuantificar y analizar los efectos de cualquier acción realizada por el usuario de una web u otro canal digital (como una app). Por medio de estos datos puede identificar pautas de comportamiento y proponer acciones más satisfactorias para el usuario lo que, a su vez, repercutirá en la rentabilidad de las empresas.
Es cierto que en este punto pueden surgir confusiones en torno a las funciones del analista web y el analista de big data. La principal diferenciación radica en que el analista big data trabaja con volúmenes de datos muy superiores, mientras que el analista web se dedica a recolectar datos para comprender el comportamiento de los usuarios web, detectar errores o hacer cambios en la plataforma.
Funciones de un analista web
Las funciones de un analista web se pueden resumir fundamentalmente en nueve pasos:
- Elegir las mejores herramientas de análisis web en base a las necesidades del proyecto, por ejemplo:
- Mint
- Google Analytics
- Clicky
- Church Analytics
- Kissmetrics
- Open Web Analytics
- Participar en la definición de la estrategia de marketing.
- Definir los KPIs.
- Monitorizar el tráfico web (procedencia, dispositivo, perfil del usuario…) para recabar datos.
- Controlar y definir qué campaña de marketing o acciones ejecutar para obtener resultados óptimos, en base a los datos recabados de las plataformas online.
- Monitorizar las conversiones y generar estrategias. Esto requiere entender el comportamiento del usuario y tomar medidas para que el potencial usuario/cliente realice las acciones que desea la empresa.
- Analizar los datos para poder sacar conclusiones, identificando limitaciones, cumplimientos —o no— de indicadores y objetivos, y oportunidades de optimización UX.
- Determinar acciones de mejora en la optimización de la web. Proporcionando guías y pautas a seguir para que las acciones que desarrolle una compañía en el ámbito digital sean lo más rentables posibles, estén dirigidas al público objetivo e impliquen un positivo retorno sobre la inversión (ROI).
- Establecer nuevos objetivos adecuados a los datos que va recopilando.
Requisitos para ser analista web
Ser un analista web va más allá de manejar Google Analytics o Facebook Insights para recopilar métricas. El analista debe comprender los objetivos del proyecto, usar las mejores herramientas para ello y, posteriormente, interpretar esa información para redactar reportes que arrojen luz sobre el desempeño actual y futuras medidas de optimización.
Por esto, los profesionales de esta área deben ser profesionales multidisciplinares que dominen ámbitos como:
- Estadística
- SEO y posicionamiento web
- UX (Experiencia de Usuario)
- Arquitectura web
- Programación web
- Marketing online
- Hojas de cálculo (Excel)
Además de los requisitos técnicos, el analista web debe poseer determinadas soft skills, entre las que destacan:
- Creatividad
- Trabajo en equipo
- Adaptabilidad
- Capacidad de comunicación
- Atención al detalle
- Pensamiento estratégico y analítico
- Habilidades de resolución de problemas
¿Qué estudiar para ser analista web?
Si bien actualmente no existe un grado específico que estudiar para trabajar como analista web, sí hay carreras técnicas más afines a esta profesión, como Estadística, Informática, Matemáticas, o estudios como Comunicación y Diseño, entre otros.
Sin embargo, los estudios de grado no son suficientes y es recomendable obtener una formación posuniversitaria para destacar entre la competencia y multiplicar las opciones de empleabilidad.
Un Máster en Marketing Digital online como el de UNIR prepara al alumno para adaptarse a los desafíos y necesidades de cualquier tipo de sector, le permite conocer y certificarse en las principales herramientas que utilizará en su profesión y, además, le ofrece la posibilidad de realizar el Trabajo de Fin de Estudios (TFE) sobre casos reales en la plataforma RED Proyectum.
El salario de un analista web en España
Gracias a una formación especializada no solo se potencia la empleabilidad y prestar un servicio de calidad, sino que se fortalece el currículum y se puede optar a percibir un salario promedio anual de 34.000 euros, tal como recoge la web de empleo Talent. Los perfiles con menos experiencia comenzarían en España con un ingreso de 26.625 euros al año, mientras que para profesionales con más experiencia puede llegar hasta los € 42.500 anuales.