Conocer mejor a los clientes adaptando las estrategias de marketing y ventas, en consecuencia, es solamente una de las ventajas que ofrece el Big Data al sector de la moda.
La implantación del análisis de datos en todas las áreas de negocio resulta ya imprescindible para todas las empresas que quieran sobrevivir en la era digital. Así, aplicar las funcionalidades del Big Data en moda se ha convertido en algo indispensable para competir en este sector.
Hablar de Big Data, o datos masivos en español, significa referirse a conjuntos de datos complejos y de gran volumen que proceden de fuentes nuevas y variadas. Esta gran cantidad de información puede emplearse para detectar nuevas oportunidades o problemas en las compañías de moda que hace unos años no podían solventarse.
Quienes lideran el cambio son las empresas nativas digitales, las cuales han implantado ya nuevas estrategias de análisis de datos, según indica el informe elaborado por la consultora Mckinsey que lleva por título Geek meets chic: four actions to jump-start advanced analytics in apparel. Sin embargo, las compañías de moda tradicionales se están quedando rezagadas en la implantación del Big Data para mejorar su estrategia y rendimiento. La industria de la moda, que mueve millones de euros a nivel mundial, puede y debe optimizar sus procesos y resultados mediante la aplicación de la tecnología Big Data.
Así pues, el sector de la moda ha sido uno de los últimos en adoptar esta tecnología, la cual ha demostrado grandes beneficios a la hora de aportar soluciones innovadoras y eficientes. Algunas de las ventajas que supone la aplicación de Big Data al sector de la moda son:
Conocer al público objetivo
El hecho de contar con las herramientas adecuadas para procesar los datos permite a las empresas de moda elegir fácilmente a su público objetivo, basando sus decisiones en información, como las preferencias de los consumidores, los históricos de ventas o segmentando por géneros.
Esta es una de las grandes ventajas que el Big Data ofrece al sector de la moda, ya que conocer los gustos del consumidor es fundamental para llevar a cabo campañas de marketing efectivas y lo más personalizadas posible.
Posibilita la toma de decisiones informadas
Uno de los principales beneficios del Big Data para la industria de la moda es su capacidad para ayudar a las empresas a tomar decisiones informadas, basadas en evidencias.
Al recopilar y analizar grandes conjuntos de datos sobre el comportamiento del consumidor, la evolución del mercado y otros factores, las firmas pueden identificar patrones y tendencias que, de otra manera, pasarían desapercibidas. Así, basándose en esa información, las empresas pueden ajustar sus estrategias de marketing y producción, adaptándose a las necesidades y preferencias de los consumidores.
Optimizar los procesos de producción
Al recopilar y analizar datos sobre la cadena de suministro, los procesos de fabricación y otros factores, las empresas identifican áreas en las que es posible hacer mejoras para reducir los costes y aumentar la eficiencia.
Por ejemplo, la empresa de moda Zara utiliza Big Data para monitorizar las tendencias en tiempo real y, en consecuencia, ajustar su producción. De este modo, pueden producir nuevos diseños y llevarlos a las tiendas en cuestión de días, en lugar de tardar meses, como sucede en otras empresas de moda. Esto les permite responder rápidamente a las tendencias y maximizar las oportunidades de ventas.
Hace más fácil establecer los precios
La tecnología Big Data facilita la labor de determinar los precios de las diferentes colecciones porque permite analizar enormes volúmenes de información relacionada con costes y demanda de productos.
Ayuda a impulsar la innovación
El Big Data también contribuye a impulsar la innovación en el sector de la moda. Al recopilar y analizar datos sobre el comportamiento del consumidor, las tendencias del mercado y otros factores, las empresas pueden identificar oportunidades para desarrollar nuevos productos y servicios que satisfagan las necesidades y preferencias de los consumidores.
Por ejemplo, la empresa de ropa deportiva Under Armour ha utilizado Big Data para tener información sobre el rendimiento deportivo de los atletas y así, poder diseñar y fabricar ropa que mejore el rendimiento.
Aplicar el Big Data al sector de la moda no es una elección para las empresas que quieren ser competitivas. Formaciones como el máster en Marketing y Comunicación de Moda de UNIR ofrecen una instrucción práctica y actualizada para saber cómo sacar el máximo partido a estas herramientas en su cometido de conocer mejor al cliente.
