UNIR Revista
Ambas disciplinas sanitarias abordan aquellos problemas que puedan surgir con el habla, con el área comunicativa de la persona, si bien existen diferencias en su formación y funciones.
El habla es fundamental para el desarrollo social de la persona. Los logopedas y los foniatras son los especialistas sanitarios en el tratamiento de las patologías del habla, pero en muchas ocasiones no se tiene clara la diferencia entre un logopeda y un foniatra. De hecho, su formación y funciones difieren en muchos casos, de ahí que sea necesario conocer la diferencia entre uno y otro.
Aunque hoy en día los logopedas han asumido el tratamiento de gran parte de las enseñanzas de la foniatría relativas al habla, como, por ejemplo, los problemas de afasia o todas aquellas situaciones que impiden una correcta comunicación de la persona, existen diferencias claras entre un foniatra y un logopeda.
El foniatra es un médico especialista en foniatría, capaz de diagnosticar y tratar trastornos de audición, fonación, pero también de la comunicación oral de la persona, como pueden ser malformaciones, afasias y problemas sensoriales, entre otros.
Su formación está más relacionada con los aspectos biológicos que pueden estar dando lugar a ese problema de salud. Puede prescribir medicamentos, cosa que el logopeda no, y también recomendar sesiones de logopedia para sus pacientes.
Así, el logopeda se centra en el diagnóstico, el tratamiento y la rehabilitación de los problemas del lenguaje oral y en todos aquellos elementos que lo permiten. Su formación pone el foco en el área de la comunicación, del lenguaje humano, y de los procesos que así lo facilitan; mantiene una perspectiva más pedagógica que el foniatra y se encarga de la rehabilitación del paciente.
Definición de foniatra
El foniatra es aquel médico especialista en foniatría, “encargado de la prevención, del diagnóstico, y del tratamiento de las alteraciones del lenguaje, del habla y de la voz, como vehículos de la comunicación verbal”, según detalla la Sociedad Médica Española de Foniatría (Somef).
También es experto en el tratamiento de los trastornos de la audición y la deglución que afectan al habla. A su vez, y en un sentido amplio, es la especialidad médica dedicada a los trastornos de la comunicación, cuya incidencia entre la población asciende al 8 %, según datos de la citada sociedad científica.
Capacitación del foniatra
La foniatría es una especialidad médica para la que hay que obtener primero el grado de Medicina y posteriormente una formación de posgrado específica. Combina conocimientos de otras disciplinas como la pediatría, la odontología, la otorrinolaringología, la rehabilitación, la psiquiatría o la neurología. Al mismo tiempo, está formado en acústica, fonética, lingüística, pedagogía, ciencias del comportamiento y psicología, entre otras disciplinas no médicas.
Entre otras patologías, el médico foniatra aborda el estudio biomédico de aquellos aspectos funcionales predominantes en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes:
- Cognitivos
- Conductuales
- Emocionales
- Lingüísticos
- Perceptivo-motores
Definición de logopeda
Por su parte, los logopedas representan una profesión sanitaria regulada encargada de la prevención, detección, evaluación, diagnóstico y tratamiento de todas las alteraciones de la comunicación, así como de las funciones orales no verbales, tanto en la población infantil como en la edad adulta.
Su campo de actuación es muy variado y engloba desde la atención temprana en la edad infantil hasta la tercera edad. De acuerdo con el Consejo General de Colegios de Logopedas, estos profesionales sanitarios se ocupan de:
- Trastornos específicos de la lectoescritura y del cálculo.
- Alteraciones en el desarrollo del lenguaje por deprivación social y asociadas a contextos.
- Trastornos de la fluidez del habla.
- Alteraciones del lenguaje: trastornos específicos del desarrollo del lenguaje (trastorno específico del lenguaje, retrasos del lenguaje, trastornos fonéticos y fonológicos).
- Alteraciones del lenguaje en el envejecimiento y trastornos degenerativos.
- Alteraciones del lenguaje y la comunicación en enfermedades mentales.
- Mutismo e inhibiciones del lenguaje.
- Trastornos de la comunicación y del lenguaje asociados a déficits auditivos y visuales, déficit de atención, trastorno generalizado del desarrollo, parálisis cerebral infantil y plurideficiencias.
- Afasias y trastornos asociados.
- Disartrias.
- Disfonías y trastornos de la resonancia.
- Disglosias.
- Alteraciones de las funciones orales no verbales: deglución atípica, disfagia y alteraciones tubáricas.
Capacitación del logopeda
Para que una persona pueda ser logopeda necesita, en primer lugar, superar una formación universitaria, como el Grado en Logopedia de UNIR, que capacita para esta profesión. En segundo lugar, tiene que estar habilitada para ejercer por un colegio profesional de logopedas.
Tanto los foniatras como los logopedas intervienen en todas las etapas de la vida en las que se presentan alteraciones de la comunicación y del lenguaje, pero desde distintos ámbitos. Suelen colaborar unos con otros para así mejorar la calidad de vida de las personas, que gocen de una mayor autonomía y de plena integración en la sociedad.