Ornela Mateu Martínez
La prevención de estos comportamientos requiere de un enfoque integral que abarque aspectos teóricos y prácticos desde una mirada profesional y humana. Es crucial dotar a los psicólogos sanitarios de herramientas para abordar el problema de forma eficiente.
El Área de Prácticas del Máster en Psicología General Sanitaria online de UNIR organizó junto a distintos centros clínicos del País Vasco una jornada para compartir una experiencia de aprendizaje conjunto más allá de lo teórico-práctico, más humana y cercana.
El evento se celebró en el centro IPACE Psicología Aplicada de Vitoria (País Vasco), donde se encontraron profesionales de los centros sanitarios colaboradores de las zonas de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, así como del resto de España. Profesionales de la Fundación Gizakia y del Centro de Psicoterapia, como Laura Requena, ofrecieron ponencias y talleres prácticos para reflexionar, compartir experiencias y aportar conocimientos para alcanzar soluciones desde la práctica profesional para las conductas suicidas, un problema de enorme relevancia en la salud y en la sociedad.
Erdoitza Unanue Herrero es psicóloga, directora de Programas y coordinadora del Área de Adolescentes y Familias de la Fundación Gizakia, y ponente en la jornada del pasado 15 de septiembre que organizó UNIR; Maider Landeta Sáenz es también psicóloga sanitaria en el Área de Adolescentes y Familias de la Fundación. Las dos expertas acompañan desde hace tiempo a UNIR en los procesos de formación de los estudiantes del Máster en Psicología General Sanitaria.
Las dos especialistas aportan una mirada amplia de los procesos terapéuticos y de la prevención desde distintos tratamientos: ambulatorio, residencial, reducción de daños… “En este tiempo nos hemos encontrado con grandes profesionales. Destacamos la facilidad de coordinación con UNIR siempre que ha sido necesario, así como la flexibilidad a la hora de proponer itinerarios de prácticas”, elogia Erdoitza Unanue.
Aprender a gestionar emociones
Unanue Herrero, cuya trayectoria está vinculada a la atención sociosanitaria, dirigió la ponencia “Tras el vacío adolescente”, en la que destacó que se debe enseñar a los niños y a las niñas a gestionar las emociones. Debe ser un aprendizaje continuo que permita a los profesionales sanitarios ver más allá de lo meramente conductual. “La idea es dotar a las personas de herramientas que les permitan gestionar el malestar y los conflictos con los que se van a encontrar en su proceso madurativo”, subrayó durante su intervención.
“Es importante que cuando miremos a un niño o adolescente nos pongamos una especie de gafas que nos permitan ver y entender qué se esconde detrás de, por ejemplo, un comportamiento disruptivo o de una búsqueda constante de la perfección”, añade la psicóloga.
Maider, especialista en intervención con personas en situación de vulnerabilidad y/o en riesgo de exclusión social, presentó junto a Erdoitza Unanue el taller práctico “Qué hay detrás de la conducta” para fomentar la reflexión grupal, el intercambio de experiencias y el aprendizaje conjunto.
Resaltaron así la importancia de trabajar con la persona y sus contextos. “No podemos centrarnos única y exclusivamente en los síntomas. Independientemente de la metodología que utilicemos para trabajar, es necesario entender qué sucede para realizar un acompañamiento a la persona”, explica Landeta Sáenz.
Formación continua
Ambas profesionales consideran que la formación continua es algo indispensable para los futuros profesionales de la psicología que trabajen en la prevención del suicidio o con personas de este perfil.
“La supervisión del profesional no debe faltar, sobre todo cuando trabajamos con problemas que nos llevan en ocasiones a cuestionar la intervención que realizamos por los riesgos a los que está expuesta la persona a la que acompañamos en su proceso terapéutico”, observan ambas especialistas. También recalcan la importancia del trabajo en equipo para garantizar un buen cuidado de la salud mental de los psicólogos que intervienen en los procesos.
De izquierda a derecha: Maider González de Artaza Lavesa, Laura Requena Jiménez, Maider Landeta Sáenz, Erdoitza Unanue Herrero y Eleni Petkari, ponentes en el evento.
Unanue Herrero describe su paso por esta jornada como un “encuentro familiar, cercano y acogedor”. Resalta la oportunidad que significó reflexionar sobre aspectos que preocupan a toda la sociedad, y compartir, mostrar, y hablar sobre diferentes abordajes posibles del problema, expuestos además desde diferentes experiencias y modalidades de trabajo y metodologías, lo que supuso un gran enriquecimiento.
Las psicólogas entienden que la prevención de conductas suicidas requiere de un enfoque integral que abarque aspectos teóricos y prácticos desde una mirada profesional y humana. Es crucial crear conciencia y dotar a los profesionales de la psicología general sanitaria de herramientas y conocimientos para abordar el problema de forma eficiente.
La Fundación Gizakia es una clínica consciente de la importancia de esta formación continua de los profesionales que se quieren dedicar a la psicología. Se enfoca, entre otras cosas, en el acompañamiento sociosanitario, con una sensibilidad especial por las personas que se encuentra en riesgo de exclusión social grave.