UNIR Revista
Tras finalizar un máster en Psicología General Sanitaria, Berta Álvarez quiso avanzar en su carrera cursando el Máster en Psicoterapia de UNIR para ampliar sus conocimientos en terapias de tercera generación.
Certificada como coach (AECEE) y practitioner en PNL Transpersonal (IPH) esta terapeuta, miembro de la Asociación EMDR España, se dedica al Coaching Ejecutivo y Personal. Como estudiante de UNIR, Berta ha participado como ‘viver’ en el Programa Vivero de Empleo de España y ‘mentee’ en el Programa de Shadowing, que le dio la oportunidad de conectar con profesionales de alto nivel para aprender de su experiencia.
Residente en Madrid, Berta ha optado por el trabajo online; “así cualquier persona que esté interesada en trabajar conmigo puede hacerlo, aunque no estemos viviendo en el mismo lugar”. Su misión, “facilitar que las personas tanto en su área personal como en lo profesional encuentren sentido en aquello que hacen, cumplan sus objetivos, eleven su nivel, y, sobre todo, que lo vivan plenamente desde la propia conciencia, disfrutando y saboreando cada momento”.
P: ¿Por qué te decidiste a estudiar Psicoterapia?
R: Estudié Psicología porque siempre me fascinó la mente humana, el bienestar de las personas, el promover su salud y su relación. Desde muy pequeña siento curiosidad en comprendernos como persona, nuestras formas de actuar, los procesos cognitivos que nos llevan a comportarnos de una manera u otra, las reacciones fisiológicas que se producen, etc. Siempre me cuestionaba ante determinadas circunstancias qué había que yo no estaba viendo con mis ojos.
Además, me apasiona ayudar a las personas a que vivan en sintonía con sus valores, a crecer y desarrollarse personal y profesionalmente, a cumplir sus sueños, a entenderse mejor a sí mismos y con otras personas y a vivir con menos estrés. Últimamente, desde hace dos años aproximadamente, también siento mayor interés en ayudar en aliviar la experiencia de dolor de las personas y de ayudarles a convivir de la mejor manera con aquello que no se va a poder modificar.
P: ¿Y por qué en UNIR? ¿Cómo valoras nuestra metodología?
R: De UNIR valoro la metodología y la estructura que tienen. Al ser 100% online me permite conciliarlo con otros aspectos de mi vida como trabajo, otros estudios, vida personal, ocio y descanso. La estructura de los cursos me ayuda a organizarme. Puedo acceder a las clases en mi disponibilidad ya que se quedan grabadas. Y cuando surge algún problema, todos reman a encontrar soluciones, siempre que se pueda, que ponen en el centro al alumno y buscan un win to win, buscando beneficios en el alumno.
Tanto la figura del tutor como la del defensor del estudiante funcionan muy bien. Además, posee diferentes programas para seguir creciendo, por ejemplo, UNIR Viveros enfocados a empleo como a emprendedores con Programa de Shadowing.
La disponibilidad, flexibilidad y querer encontrar caminos es algo que valoro mucho en UNIR. Además de su adaptación a los diferentes escenarios que se van encontrando a cada momento. Es una universidad dinámica y viva. Quizás esto influye en la planificación y organización de las clases y de las entregas, que es el único inconveniente que he encontrado.
Me he sentido cómoda y me ha retado el enfoque de las prácticas. Es un máster que invita al alumno a crecer por si mismo, así te puedes buscar tú el centro o te ayudan ellos. También existe el reconocimiento de prácticas que lo puedes solicitar, como es mi caso, con las prácticas que he cursado del Máster en Psicología General Sanitaria online.
Por último, mi experiencia con el tema del trabajo de fin de máster he de decir que está siendo muy constructiva y valiosa. Tanto las directoras de los dos TFMs cursados (Psicología General Sanitaria y Psicoterapias: Terapias de Tercera Generación) han sido muy profesionales y cercanas, aportando valor a mi trabajo, retándome y facilitándome aquellos conocimientos y/o recursos que en algún momento he necesitado.
P: ¿Qué es lo que destacarías del programa académico?
R: Personalmente destaco el contenido. En Psicoterapia te ofrece una visión en conjunto de las diferentes terapias de tercera generación y ahondas en cada una de ellas. Esto te permite decidir en cuál de ellas quieres seguir formándote y profundizando.
P: ¿Cuáles son las características que debería de tener un buen psicoterapeuta?
R: Para mí son las siguientes:
- Tener una formación actualizada y continuada en diferentes terapias y técnicas más eficaces de las mismas,
- Tener formación en diversidad cultural
- Cumplir con el código deontológico,
- Tener conocimiento de los criterios diagnósticos,
- Estar psicológicamente presente en la terapia
- Tener autocontrol y asertividad profesional,
- Mostrar compasión, aceptación, bondad, empatía y respeto
- Trabajar con una comunicación abierta, fluida, sin barreras
- Mostrar autenticidad y ser genuino
- Mostrar interés real para poder ayudar a la persona que tienes delante. Atender a las propias limitaciones y aceptarlas, derivar en caso
P: ¿Falta más formación de terapias de tercera generación en España?
R: Creo que actualmente empieza a hacerse más visible. Sin embargo, aún queda recorrido. Aunque la investigación va mostrando resultados favorables, sin embargo, aún se necesitan más estudios para mostrar una evidencia científica de mayor solidez.
La efectividad en la investigación ha sido demostrada en mayor medida en las terapias como el mindfulness o la Terapia de Aceptación y Compromiso.
P: ¿Cuáles son las ventajas de estas?
R: Para mí lo principal de estas terapias es que, aunque parten de la evolución de la terapia de conducta y la terapia cognitivo – conductual, ponen en el centro a la persona en el sentido de no centrarse en el síntoma o problema, sino que tienen en cuenta tanto la vivencia de la persona como su contexto. Es decir, su objetivo principal es ayudar a la persona a percibir de otra manera su problema.
En este sentido, se pretende modificar el comportamiento de la persona desde una perspectiva más general. Para ello, se ayuda a la persona a observar, entender la relación que existe entre sus comportamientos y la función que les ha otorgado, aceptándolo, y volver a plantear dicha relación de una manera más adaptativa para ella. Se utiliza el diálogo, el contexto, la funcionalidad, la aceptación. No se trata tanto de luchar contra los síntomas, controlándolos o eliminándolos como de reorientar la vivencia y así generar cambios significativos, más duraderos y estables en la persona.
P: ¿Qué impacto ha tenido este máster en tu vida profesional?
R: Me abre nuevos conocimientos. Gracias a este máster, he empezado a formarme como terapeuta de EMDR, ya he completado mi formación nivel 1, y, aunque ya tenía antes de comenzar un Experto Universitario en Salud en Mindfulness y Salud, me surge curiosidad en seguir profundizando en esta terapia. Como oportunidades profesionales, también he encontrado nuevas. Otros colegas se han interesado en mí para colaborar con ellos una vez finalice mi formación en UNIR. Además, con el TFM, aparece un área que yo desconocía y que me ha gustado mucho, como la investigación y como en este campo de las terapias de tercera generación se necesitan más estudios, no descarto seguir también este camino.
P: Ahora que has finalizado el posgrado, ¿cuál es tu próximo paso laboral?
R: Me gustaría aplicar lo aprendido hasta ahora. Soy autónoma, actualmente trabajo como Executive and Life Coach y en cuanto acabe, quiero abrir el servicio de Psicología, ponerlo a disposición ya de aquellas personas que estén interesadas en trabajar conmigo. Escucharé las propuestas profesionales que otros colegas quieren hacerme y que tenemos pendiente reunirnos. Además, quisiera realizar el doctorado también en UNIR y ¡por supuesto escucharé aquellas propuestas laborales de aquellas personas que quieran trabajar conmigo!
