Jorge Arana Varona
Frente a más de 6.000 asistentes, expertos en psicología y psiquiatría destacaron la importancia de realizar una detección precoz y ofrecer un tratamiento especializado para frenar una pandemia que ya carga con más de 720.000 víctimas al año.

Según la Organización Mundial de la Salud, más de 720.000 personas fallecen por suicidio cada año, y se estima que al menos 14 millones de episodios de autolesión ocurren anualmente. Estas conductas, que pueden iniciarse entre los 13 y los 16 años, están frecuentemente relacionadas con una baja tolerancia al malestar y problemas de regulación emocional, afectando gravemente a la salud mental de los adolescentes.
Para enfrentar estos preocupantes datos, la Universidad Internacional de La Rioja reunió en el Foro UNIR a destacados especialistas en psicología y psiquiatría frente a más de 6.000 asistentes.
Entre los ponentes se encontraban Ascensión Blanco, directora del Área de Psicología de UNIR; Enric Armengou, psiquiatra de ItaSaludMental y la Fundación Ayuda y Esperanza; José Juan Nogales, psicólogo especialista en psicología clínica y militar; Daniel Vega, psicólogo adjunto en el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital de Igualada; Bárbara Gil, directora clínica e investigadora en el Madrid Institute of Contextual Psychology; Miriam Rodríguez Menchón, directora ejecutiva del Máster Universitario en Intervención en Niños y Adolescentes; y María del Mar Molés, directora ejecutiva del Máster Universitario en Psicoterapia: Terapias de Tercera Generación.
Durante el inicio del foro, Armengou quiso enfatizar un importante y sonoro tabú sobre el suicidio en la adolescencia. “Hablar de suicidio con un joven nunca lo provoca. No tengamos miedo a preguntar”, afirmó.
El psiquiatra de la Fundación Ayuda y Esperanza destacó la importancia de comprender el contexto emocional de los adolescentes y la necesidad de ofrecerles un entorno seguro para expresar sus sentimientos. Subrayó que los jóvenes a menudo comunican su malestar de manera indirecta, y es crucial que los adultos estén atentos a estas señales. “Debemos estar perceptivos y siempre hemos de entender que nunca es una llamada de atención, sino una forma de pedir ayuda“, añadió.
Cuestiones de debate en el Foro UNIR
- Detección precoz y prevención: Los expertos enfatizaron la necesidad de detectar precozmente las conductas autolesivas y de implementar programas de prevención en centros educativos y comunidades. “La detección temprana puede salvar vidas”, afirmó Enric Armengou.
- Terapias de tercera generación: Se discutió la eficacia de las terapias de tercera generación, como la terapia de aceptación y compromiso (ACT) y la terapia dialéctico-conductual (DBT), en el tratamiento de conductas autolesivas. “Estas terapias ofrecen nuevas herramientas para abordar problemas complejos”, comentó María del Mar Molés.
- El papel de la familia: Se destacó la importancia del apoyo familiar en el tratamiento y recuperación de los jóvenes con conductas autolesivas, subrayando la necesidad de educar a los padres sobre cómo abordar estos temas. “La familia es el primer círculo de apoyo para los jóvenes”, señaló Miriam Rodríguez.
- Impacto de las redes sociales: Los expertos analizaron el impacto de las redes sociales en la salud mental de los adolescentes y cómo estas pueden contribuir a la aparición de conductas autolesivas. “Las redes sociales pueden ser un arma de doble filo”, advirtió Daniel Vega.
- Formación de profesionales: Se discutió la necesidad de formar a los profesionales de la salud mental en terapias de tercera generación y en estrategias de prevención y detección de conductas autolesivas. “La formación continua es clave para ofrecer el mejor apoyo a nuestros pacientes”, afirmó José Juan Nogales.
Prevención y apoyo familiar
“La familia juega un papel fundamental en la detección y tratamiento de estas conductas, ya que pueden proporcionar un entorno seguro y de apoyo”, comentó Miriam Rodríguez
Ascensión Blanco destacó la necesidad de educar a los padres para que puedan identificar señales de alerta y actuar de manera adecuada. “Es crucial que los padres comprendan que no deben tener miedo de preguntar a sus hijos sobre sus sentimientos y pensamientos”, afirmó Blanco. Por su parte, María del Mar subrayó que “la formación de los padres en habilidades de comunicación y manejo emocional es vital para crear un entorno de confianza y apoyo“.
Detectar para prevenir
Otro punto clave del foro fue el papel del entorno educativo en la detección y prevención de conductas autolesivas. Los expertos coincidieron en que los centros educativos deben implementar programas de prevención y formación para docentes, con el fin de identificar señales de alerta y proporcionar el apoyo necesario a los estudiantes. “La prevención en las escuelas es esencial para detectar y abordar problemas emocionales antes de que se conviertan en conductas autolesivas“, señaló José Juan.
Daniel Vega añadió que “los docentes deben estar capacitados para reconocer los signos de alerta y saber cómo intervenir de manera efectiva”. Además, Bárbara Gil enfatizó la importancia de crear un entorno escolar que fomente la resiliencia y el bienestar emocional de los estudiantes. “Es fundamental que los jóvenes se sientan apoyados y comprendidos en su entorno educativo”, afirmó Gil.
Miriam Rodríguez Menchón destacó que “la colaboración entre psicólogos escolares, docentes y familias es crucial para crear un sistema de apoyo integral”.
Formación para el mundo real
“La prevención del suicidio pasa por una mayor sensibilización y formación de todos los actores involucrados, desde la familia hasta los profesionales de la salud y la educación”, señaló Armengou.
UNIR reafirma su compromiso con la formación continua de profesionales y estudiantes, ofreciendo programas educativos que abordan las necesidades actuales de la sociedad. “Nuestra misión es proporcionar una educación de calidad que prepare a los profesionales para enfrentar los desafíos del mundo real“, afirmó Ascensión Blanco.
Programas como el Máster Universitario en Psicoterapia y el Máster Universitario en Intervención Psicológica en Niños y Adolescentes, capacitan a los profesionales para abordar estos desafíos y proporcionar el apoyo necesario a quienes lo necesitan.
- Facultad de Ciencias de la Salud