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Raúl Manzano es un experimentado psicólogo forense que ha ampliado su formación en el Máster en Intervención Psicológica en Niños y Adolescentes.
“El temario del máster es actual e innovador. Las asignaturas me han aportado un reciclaje de mis conocimientos en psicología infantil”. Son palabras de Raúl Manzano Gutiérrez, especialista en el desempeño de informes periciales en el ámbito penal y civil y con gran experiencia como psicólogo clínico y en terapia e intervención con menores. Ha terminado sus estudios del Máster Universitario en Intervención Psicológica en Niños y Adolescentes, y ahora quiere aplicar estos conocimientos a su profesión, ya que trabaja de manera fija como psicólogo forense. “La finalidad de cursar estos estudios no ha sido la búsqueda de empleo. Quería reciclar conocimientos y asistir a asignaturas con contenidos actualizados”, explica Manzano.
Aprovechamos para saber más sobre su profesión, por qué es tan importante su trabajo desde edades tan tempranas y cómo ha sido su experiencia en el postgrado.
Estamos acostumbrados a hablar de psicología y adultos pero, ¿cuál es la importancia del tratamiento de la salud mental para los más pequeños?
La intervención psicológica temprana, es decir infantil, es vital tanto de forma preventiva como reactiva ante problemas psicológicos. Resulta de especial relevancia para el desarrollo de la persona de forma adaptativa, no solo en la etapa infantil, sino también para el desarrollo de la persona en otras etapas de la vida como la adolescencia o edad adulta.
¿Cuál es la finalidad de adaptar los conocimientos de psicología a etapas tempranas de la vida? ¿Es necesario o es algo que puede dejarse, en palabras sencillas, ‘para más tarde’?
La infancia y adolescencia son etapas fundamentales que pueden influir de forma irreversible en el desarrollo psicológico de las personas a lo largo de su vida. Los profesionales en el ámbito de la psicología infantil son esenciales para poder intervenir en etapas tempranas con la finalidad de promover el bienestar de los menores en sus diferentes áreas personales, social, familiar, emocional, conductual…
¿Es más complicado tratar a niños y adolescentes que a adultos? ¿Existen diferencias a la hora de abordar los tratamientos?
La población infantil tiene particularidades que hacen distintiva a la intervención infanto-juvenil. Esta exige al profesional, en primer lugar, entender el continuo desarrollo del niño y la influencia de múltiples factores. Una vez entendido esto, es cuando se podrá realizar el proceso de intervención con menores y, de esta manera, poder concretar entre otras cuestiones, los objetivos terapéuticos.
Entendemos que existe una mayor dificultad en acceder a un niño que a un adolescente. El primero no decide si quiere, o necesita, algún tipo de tratamiento.
Efectivamente. Es necesario comprender que el acceso al niño se encuentra determinado en todo su espectro, en las diferentes áreas personales, por el sistema familiar. En este sentido, la participación del sistema familiar con menores se recomienda necesaria según las circunstancias y objetivos de intervención a tratar.
«La Covid-19 ha afectado negativamente la salud mental de niños y jóvenes debido, precisamente, a su edad»
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha revelado en un estudio que la Covid-19 ha afectado negativamente a la disponibilidad y acceso a los profesionales de la salud mental. Además, asegura que han aumentado considerablemente los casos de depresión y ansiedad. En este sentido, ¿ha tenido un impacto especial la pandemia en los más jóvenes?
Los efectos pandémicos de la Covid-19 han influido de forma negativa en la salud mental de todas las sociedades del mundo y, sobre todo, en aquellos intervalos de edad donde el desarrollo psicológico es especialmente vulnerable debido a sus cambios psicobiológicos (plasticidad neuronal).
En este sentido, podemos señalar algunos datos objetivos aportados por UNICEF (2021) en un estudio con adolescentes y jóvenes menores de 29 años. La situación general en los países y sus localidades ha afectado el día a día de las personas jóvenes puesto que un 46% reporta tener menos motivación para realizar actividades que normalmente disfrutaba y el 36% para actividades habituales.
¿Son los jóvenes optimistas ahora que todo ha vuelto a una relativa calma?
Por desgracia, no. La percepción sobre el futuro también se ha visto negativamente afectada, particularmente en el caso de las mujeres jóvenes quienes están enfrentando dificultades particulares. El 43% de ellas se siente pesimista frente al futuro frente a 31% de los hombres participantes (UNICEF, 2021).
«El sistema familiar determina la posible intervención del menor»
Siempre hablamos de formación continua o reciclaje en, prácticamente, todas las profesiones pero, ¿cuál es la importancia de la actualización constante para un profesional de la salud mental?
La intervención psicológica infantil, al igual que se producen cambios sociales, requiere adaptarse también a ellos. Cabe reseñar las nuevas propuestas de intervención infantil a través de las nuevas tecnologías y de medios digitalizados. Aportar estudios acerca de la evidencia científica de las diferentes modalidades de intervención infantil con el uso de los espacios y medios digitales es uno de los retos futuros que presenta dicha disciplina.
¿Qué destacaría en particular del Máster en Psicología Infanto-Juvenil de UNIR?
En términos generales, los docentes han generado un clima donde se fomenta la participación, la interacción del grupo, la dinámica enseñanza-aprendizaje, además de la aportación de nuevos conocimientos. He notado una gran dedicación por parte del claustro hacia los estudiantes y un gran desempeño laboral.
También el trabajo online. Gracias a ello he podido compaginar los estudios y mi jornada laboral de forma satisfactoria y con buenos resultados. La metodología de las asignaturas se ajustaba a mis necesidades, ya que la misma te permite organizarte de forma flexible, con autonomía y de manera pedagógica.
Estudia en UNIR
El objetivo del Máster Oficial en Intervención Psicológica en Niños y Adolescentes es dotar a los estudiantes de las competencias necesarias para realizar intervenciones, así como ofrecer las técnicas y tratamientos más innovadores, relacionados siempre con la sociedad cambiante actual. La flexibilidad del postgrado es uno de sus puntos fuertes, ya que este está dirigido, principalmente, a profesionales que ya están trabajando en el campo de la salud. Consulta todos los detalles en nuestra web y no dudes en matricularte para el nuevo curso.
