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La investigación con células madre forma parte de una práctica innovadora de la medicina y se emplea en múltiples procesos destinados a tratar enfermedades y conocer más sobre estas dolencias.
La investigación con células madre juega un papel muy relevante, ya que gracias a su aplicación médica podría explicarse cómo se generan ciertas enfermedades, además de servir de tratamiento de muchas afecciones. A pesar de los beneficios, el uso de células madre para prácticas investigativas plantea un dilema moral.
¿Qué son las células madre?
Son células que sirven como un sistema de reparación para el cuerpo humano. Se caracterizan por ser células indiferenciadas, autorrenovables e inmaduras, capaces de generar uno o varios tipos de células. Se diferencian de otro tipo de células porque:
- Tienen habilidad para dividirse en más células madre.
- Pueden autorrenovarse.
- Son capaces de generar diferentes tipos celulares (células sanguíneas, epidérmicas, neuronales…).
Las células madre se dividen en dos tipos según su origen:
- Las células madre embrionarias provienen de embriones formados a los pocos días (entre tres y cinco) de haberse fecundado el óvulo por el espermatozoide. Los embriones reciben el nombre de blastocitos y contienen en torno a 150 células.
- Las células madre adultas, también conocidas como células somáticas, son aquellas que pueden generar diferentes tipos de células del mismo tejido u órgano en el que viven. Estas células se recolectan en la médula ósea, sangre periférica y otro tipo de tejidos adultos.
Aplicaciones de la investigación con células madre
La investigación con células madre tiene como propósito estudiar sus propiedades para aplicarlas en procesos biomédicos y lograr tratamientos innovadores para ciertas enfermedades. A continuación, abordamos alguna de sus aplicaciones:
Medicina regenerativa
El objetivo principal de esta terapia es utilizar las células madre para regenerar o reparar tejidos dañados o disfuncionales y tratar diversas enfermedades. Por ejemplo, se emplea en la cicatrización de heridas o procesos de ingeniería de tejidos.
Esta terapia celular tiene como objetivo reemplazar o modificar células, tejidos u órganos para lograr restituir sus funciones normales. Al respecto, en las enfermedades neuronales y musculares esta aplicación ha sido muy útil en terapias contra la enfermedad de Párkinson.
Dentro de este área también hay otro tipo de aplicaciones clínicas. Se trata de aquellas terapias celulares en las que se aprovecha la capacidad de autorrenovación de las células madres y son utilizadas para tratar enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas o, por ejemplo, la diabetes.
Trasplantes de células madre
A través de la médula ósea se obtiene una gran cantidad de células para emplearlas en trasplantes autólogos de células madre. De esta forma, se logra reemplazar con células sanas la médula ósea que no funciona como debería.
Los autotrasplantes sirven para tratar distintas enfermedades como: leucemia linfoblástica, mieloma múltiple, anemia severa aplásica u otros fallos medulares, entre otras.
Dilemas éticos en la investigación con células madre
En el proceso de extracción de células madre existen ciertas consideraciones éticas que abordan esta práctica. Concretamente, el dilema radica en el uso de células madre embrionarias, ya que para obtenerlas hay que manipular embriones en edad temprana, es decir, óvulos fecundados que son destruidos para extraer de ellos las células madre. De esta forma, se puede considerar que para el uso de células madres embrionarias en una investigación se sacrifica la vida de un feto.
En España, la investigación con células embrionarias se regula mediante la Ley sobre Técnicas de Reproducción Humana Asistida y la Ley de Investigación biomédica, que establecen como deber el consentimiento firmado de los progenitores para que se permita su uso.
En el caso de las células madre adultas, su obtención no se encuentra dentro de ningún debate moral porque el proceso es más sencillo, se encuentran repartidas por todos los tejidos del cuerpo humano y no requieren ser ni cultivadas ni manipuladas.
Para los trabajadores sanitarios, estas controversias éticas pueden ser habituales en su ámbito laboral, por lo que les será de utilidad contar con una formación adecuada que les permita saber cómo gestionar y abordar estas cuestiones con eficacia. Al respecto, UNIR ofrece el Máster en Bioética online y oficial a través del cual se capacita a los egresados a abordar estos dilemas desde una perspectiva científica y profesional.