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El psicólogo de emergencias cumple un papel fundamental en situaciones excepcionales como terremotos, accidentes de aviones o atentados.
El psicólogo de emergencias debería estar preparado psicológica y emocionalmente para afrontar todo tipo de contingencias. Por eso, algunos expertos de la psicología de emergencias advierten de que es una especialidad en la que, más allá de la preparación técnica y mental que se necesita, es indispensable una gran vocación.
La psicología de emergencias y desastres se define como ‘’la rama de la psicología que abarca el estudio del comportamiento y el modo de reacción de los individuos, grupos o colectivos humanos en las diferentes fases de una situación de emergencias o desastres” (Acevedo y Martínez, 2007). Es una especialidad en el campo de la psicología dirigida al análisis de las actitudes de personas y equipos antes, durante o después de un desastre o emergencia. La psicología de emergencias utiliza técnicas de participación psicosocial con el propósito de prevenir, optimizar la alerta y minimizar las respuestas disfuncionales asociadas a ella con el objetivo de posibilitar la rehabilitación y recomposición.
No todos los profesionales de la psicología están preparados para actuar bajo tanta presión y en situaciones de particular vulnerabilidad. Hay que tener en cuenta que se tratará con personas que están pasando por episodios traumáticos en estados de ansiedad, ataques de pánico, desconsolación…
La meta del psicólogo de emergencias es regular las crisis emocionales y psicológicas tanto a nivel individual como grupal, lo cual implica, además, una excelencia en la administración de tiempos y recursos.
Las principales funciones de este profesional son prevenir, planear, intervenir y rehabilitar, tratando de conseguir los siguientes objetivos después de un evento traumático:
- Reducir el efecto psicológico a corto plazo.
- Facilitar una gestión adecuada en situaciones potencialmente generadoras de estrés por su elevado contenido emocional.
- Reducir la posibilidad de aparición de un trastorno psicopatológico en las personas que fueron testigos directos o indirectos de sucesos traumáticos e imprevisibles. A ellas hay que sumarles los familiares, amigos o allegados.
- Informar y orientar sobre recursos específicos de ayuda.
- Promover la entrada poblacional de peligro a la red asistencial sanitaria.
Sobre el psicólogo de emergencias y desastres recae la función de dar a conocer a las personas implicadas en un desastre de sus estados vulnerables y examinar el impacto psicoemocional de la emergencia. Todo ello con el objetivo de crear un ambiente de protección y asistencia, promover un clima de confianza y regular las reacciones psicológicas negativas que se presenten en los afectados.
Puede darse el caso de que el profesional de emergencia tenga que intervenir en otros compañeros de profesión o miembros de los equipos de ayuda (médica, de estabilidad, técnicos…) que, ante situaciones de máxima emergencia, sufran situaciones de crisis porque la situación los supera.
Formación del psicólogo de emergencias
El requisito de base para ser psicólogo de emergencias es la licenciatura o Grado en Psicología, una titulación que se puede complementar con formaciones específicas en emergencias y catástrofes o el Máster en Psicología General Sanitaria.
Entre los requisitos aptitudinales, de personalidad y capacidades, señalar:
- Equilibrio emocional y capacidad de autocontrol.
- Resistencia al cansancio de tipo psicológico y físico.
- Capacidades sociales como la empatía, la capacidad de comprensión y la escucha.
- Flexibilidad, disposición para trabajar en grupo y capacidad para colaborar con otros profesionales.
- Tolerancia a la frustración.
- Capacidad de toma de elecciones en situaciones de presión y estrés alto.
- Disciplina y responsabilidad.
La formación de este especialista debe incluir conocimientos básicos y avanzados sobre los modelos, las técnicas y los recursos asociados al campo de las emergencias:
- Mediación en crisis.
- Técnicas de colaboración: terapia sistémica, breve, cognitivo-conductual, dinámica de grupos…
- Formación de formadores.
- Psicología social: comunicación, averiguación…
- Estructura y organización de custodia civil. Planes Territoriales de Emergencia.
- Comportamiento colectivo en emergencias y catástrofes, comunicación social en situaciones de emergencias y catástrofes, información preventiva a la población en situaciones de riesgo, estrategias de afrontamiento, autocontrol, expresión emocional, dinámica familiar, preparación del duelo, toma de elecciones, técnicas de apoyo psicológico, terapia breve…
Además, como formación complementaria se recomienda:
- Conocimientos relacionados con la administración de desastres, de los servicios de salud en emergencias, saber evaluar las necesidades después de una situación de este tipo, la atención para víctimas en masa, la gestión de albergues temporales, etc.
- Conocer la organización de diferentes organismos nacionales e internacionales ligados a la atención de la población y las personas víctimas de situaciones de emergencias y desastres, como son Protección Civil, Cruz Roja, Cuerpo de Bomberos, Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, etc.
- Especialización en primeros auxilios psicológicos, triaje psicológico (clasificación por prioridades), gestión y coordinación en simulacros. Esta formación teórica debe ir acompañada de una formación práctica vasta y supervisada que permita obtener y desarrollar las competencias y habilidades de la práctica del profesional de la psicología en emergencias.
El papel de los psicólogos de emergencias es fundamental para gestionar situaciones excepcionales como terremotos, accidentes de avión, atentados, etc.